viernes, 30 de abril de 2021

Ojalá acierten con lo que van a hacer en la Ronda

 

Por poco menos de 600.000 euros de nada se va a hacer una acera en un tramo de 150 metros de la Ronda de la Muralla. Bueno, la inversión también incluye unos triángulos de césped y unos arbustos en la zona de la Puerta de Santiago, con lo que está más que justificado el gasto… ¡Un chollo!, dando por sentado además que la cifra incluye todo tipo de estudios y otros conceptos de compleja explicación pero que estoy totalmente seguro que los técnicos pueden avalar.

En las infografías vemos una remodelada entrada a la Puerta de Santiago que, estoy seguro, se va a repavimentar (cosa que hace mucha falta porque hace ya meses que se cambió el suelo en ese punto), y en la Ronda se transformarán los dos carriles actuales en uno, consolidando los atascos en la zona, una magnífica noticia para todos aquellos conductores que quieren disfrutar de las paradas obligatorias para así admirar nuestro principal monumento.

Lejos quedan aquellos tiempos oscuros en que se buscaba la fluidez del tráfico en las vías principales, esas que los planes de movilidad determinaban como básicas y que garantizaban la estabilidad de todo el sistema de circulación. Hemos llegado ahora a la conclusión de que es mejor entorpecer el paso y crear una especie de infarto viario para lograr que los vehículos abandonen ese trayecto y opten por otro en que dan más vuelta y, por lo tanto, invierten más tiempo y generan más contaminación. Plantamos árboles para compensarlo o hacemos edificios de madera y listo.

Hablando en serio, no dudo de las buenas intenciones de esta actuación, que viene de aquella reducción a un carril de la Ronda de la Muralla que generó tal conflicto de tráfico que hubo que dar marcha atrás… pero dejando este testimonio de “la mía por encima” a pesar de que se está demostrando que en determinadas horas la cola de vehículos llega hasta la gasolinera Martínez.

Una vez más hay que hablar de que las cosas no se deberían hacer así, pero se hacen. Peatonalizar es una gran cosa, y recuperar el espacio para las personas en detrimento de los vehículos es un fin noble que aplaudo y comparto, pero no creo que en esto se deba seguir la filosofía de Napoleón Bonaparte, autor de la frase “el fin justifica los medios”, aunque todo el mundo piensa que es de Maquiavelo (yo mismo lo creía hasta hace poco).

Hay sitios en que la peatonalización podría generar algunos problemas menores pero que sí tendría resultados visibles y razonables. Por ejemplo, yo peatonalizaría Camiño Real, una calle que conectaría el casco histórico con la Milagrosa para los viandantes, en que prácticamente no hay garajes (se cuentan con los dedos de la mano) y que estoy seguro de que se convertiría en una zona comercial de primer orden porque es agradable para el paseo y hay muchos locales “vivos”. Entiendo que la Ronda es más visible y que, como políticos que son los que toman las decisiones, “la foto” es más atractiva porque “se deja huella”.

El problema es que si la reducción a un carril de la Ronda fue un fracaso y el estrechamiento que quedó en este punto es otra sonora metedura de pata, es peligroso el principio de “tira p’alante y que se acostumbren” a pesar de que en ocasiones funcione. Hay que estar muy seguro de lo que se hace y de tener razón, aunque no los veo tan convencidos porque aquí no han “preguntado al Pueblo” ni a los interesados como en Rafael de Vega en que presumían de demócratas. Aquí por no hacer no han hecho ni reuniones informativas.

Recordemos, por ejemplo, la peatonalización del tramo de la Ronda frente a las dependencias municipales del Seminario, una actuación de hace ya unos años y que debería haber generado “costumbre”. No lo hizo. Es una zona que está prácticamente desierta en cualquier momento. Incluso en las grandes fiestas (cuando se podían hacer) como el Arde Lucus o el San Froilán se veía la calle Aguirre llena hasta la bandera y ese tramo prácticamente desierto. Casi nunca hay gente sentada en los bancos…

El motivo, probablemente, es que es una zona sombría, en que sopla un viento que te deja tieso y que es poco acogedora. Pues ahora la vamos a prolongar unos metros más por un precio totalmente disparatado…

En fin, ojalá acierten y yo esté equivocado. De verdad que lo deseo.

jueves, 29 de abril de 2021

Las (muchas) webs municipales que no funcionan


Hablábamos ayer de la desastrosa gestión de la información turística digital de la ciudad de Lugo, cuyo gobierno presume de "Smart city" y de tecnológica, y esto me trajo a la memoria el hacer un repaso de las páginas que nuestra administración presentó a bombo y platillo y que ya no funcionan o que están tan desactualizadas que no valen para nada.

Empezaremos por una de las más simbólicas, la de la Plaza de Abastos y el Mercado de Quiroga Ballesteros. Sacando las notas de prensa de autobombo (que esas por supuesto sí están al día, como no podía ser menos, porque en realidad es el verdadero objetivo de todo esto) el resto de la página no hay por dónde cogerla. Aparece puestos que llevan años cerrados  (incluso de compañeros lamentablemente ya fallecidos) pero no figuran otros que funcionan desde hace muchísimo tiempo. Algunos de los que coincide que llevan abiertos desde que se hizo la página y continúan ya no están ubicados en el mismo lugar y todos, sin excepción, tienen fotos de antes de la reforma de la Plaza y el Mercado. En cuanto a las actividades, las últimas que figuran son del año 2013 (creo que vamos algo tarde para asistir).

La única actualización que han hecho, salvo las ya referidas de “mira qué buenos somos” es la de quitar toda referencia a la compra online porque ya se cansaron de hacer el ridículo, sobre todo desde que la iniciativa privada puso en funcionamiento, a través de la empresa Kibus, una web de compra en la Plaza y el Mercado que sí funciona de verdad. Y muy bien, hay que añadir.

Pero observemos, sin ir más lejos, algunas pestañas a las que nos dirige la página principal del Ayuntamiento de Lugo. Les invito a comprobar por sí mismos la desastrosa gestión de la información:

Lugo, cidadeviva: Te redirige a una cuenta “suspendida”, con lo que NO funciona.

Perfil del Contratante: Página no encontrada.

Vivero de empresas Tinería: Esto no lo han tocado desde que resolvieron la adjudicación y así te encuentras que hay anunciados locales “en funcioamiento” como el del Breogán, que jamás movió una piedra en el que se le otorgó. Por cierto, sería bueno saber si le han retirado la concesión tal y como contemplaban aquellas bases.

Corre con Nós: Error 404 Página no encontrada.

Huertos Urbanos:  Página no encontrada.

Cuatro páginas que no funcionan y una que no vale para nada anunciadas desde la entrada principal de la web oficial. Las que sí están en regla son las que son meras redirecciones a apartados de la web (urbanismo y cosas así), el resto desastroso.

La única excepción para la regla, que me parece que está funcionando muy bien, es la página a la que te dirigen para consultar la biblioteca municipal. No tengo ni idea de esto pero su buen funcionamiento me hace pensar que lo lleva gente diferente, porque da gusto verla.

Otra web creada hace poco, la tan publicitada de “Lugo é capital” y que nació hace cuatro meses tampoco funciona, y ni siquiera han puesto, que sería lo suyo, un mensaje haciendo una valoración de los resultados… quizá porque es mejor no decirlos.

La gran pregunta es… ¿cuánto ha costado todo esto y qué función ha desempeñado?


miércoles, 28 de abril de 2021

Lugo es una ciudad arisca (informativamente) para el visitante

Los cochambrosos paneles de la calle de la Reina están tan desactualizados que es imposible para el turista encontrar la información a la que remiten, quizá porque no existe.

La mayoría de las veces el problema de un proyecto no es iniciarlo sino mantenerlo. Poner a funcionar una web, un negocio o comprarse un coche es una inversión importante, pero nada que ver con la energía, la constancia y la importancia de mantenerlo vivo durante años. Si hablamos de la cosa pública el tema se pone más interesante, porque una vez más hemos de recordar que el dinero que se “invierte” (malgasta en muchas ocasiones) es nuestro, de todos, y que por lo tanto en teoría tendrían que ser mucho más cuidadosos.

Nuestra ciudad es probablemente una de las más despilfarradoras del planeta en ese sentido. Las huellas de “lo que pudo ser y no fue” en muchísimos temas se nos presenta allá donde miremos. Tenemos desde los esqueletos físicos del Rebicíclate, adornando nuestras calles desde hace muchísimos años, hasta los restos mortales del “centro de energías alternativas” del Ceao (que jamás funcionó y en vez de generar energía la consumía)… y en Internet los esqueletos también se acumulan.

Ahora que las vacunas parece que nos hacen empezar a vislumbrar una luz al final del largo túnel de la pandemia, es el momento de replantearse la estrategia turística de nuestra ciudad (dando por hecho, generosamente, que existe alguna). Esto implica el revisar lo que se ha hecho garrafalmente mal y que hay que empezar a corregir, aunque me temo que la tónica de la casa es hacer algo que supondrá otra inversión absurda para que una vez más no funcione.

Les pongo ejemplos, que son lo que mejor vemos todos. En la Calle de la Reina hay unos paneles cochambrosos que se supone que pretenden publicitar la ciudad a quienes nos visitan, y les animan a visitar una web, que ahora es la Sede Electrónica Municipal, y a descargar una aplicación para móvil que ya no existe. Así está el nivel.

Lo de la Sede nunca lo he entendido. En lugar de hacer como todo el mundo y mantener la página oficial municipal en el dominio www.lugo.gal y dirigir la sede a la típica dirección (que podría ser, como es obvio sede.lugo.gal) se tomó la inexplicable decisión de migrar la página oficial del Ayuntamiento a otro dominio y meter la Sede en el básico. Ilógico y, como en este caso al no actualizarse la información, confuso. El turista que ponga esa dirección en su móvil se encontrará con una página que no tiene la menor indicación para el foráneo.

Si intenta entrar en el Twitter oficial al que le dirigen se encontrará con un perfil que, en lugar de estar dedicado al turismo, que sería lo normal, mezcla el área de cultura y, como es lógico llevándola quien la lleva, está exclusivamente en gallego y no tiene información turística. Ni la menor indicación para el visitante de nada (ni lugares de interés, ni horarios de nada…).

Por supuesto, como ya mencionaba antes, como cándidamente intente buscar la aplicación de Turismo oficial se encontrará (al menos en el sistema Android que es el que tengo yo) con la nada, porque no existe tal Aplicación. Ya en 2015 (hace seis añitos de nada) había este problema y desde el Ayuntamiento se decía que era una incidencia “temporal”, que la aplicación estaba siendo adaptada y que “en un breve plazo de tiempo” estaría disponible. Seis años, repito.

Lugo es una ciudad arisca informativamente para el visitante. Encontrar las oficinas turísticas es una odisea y la información digital es casi inexistente, con la honrosa excepción de la web del Obispado de Lugo (muy completa en lo suyo) y poco más.

Eso sí, somos una “Smart city”… A veces uno se ríe por no llorar.

martes, 27 de abril de 2021

El Círculo se defenderá



La Junta General celebrada ayer en el Círculo de las Artes de Lugo aclaró bastante sobre el pleito iniciado por el arquitecto Arturo Silvosa contra la sociedad… pero no todo. El debido sigilo sobre algunas de las cuestiones se justificó en la estrategia legal del Círculo, que en breve presentará la contestación a la demanda.

Sin embargo, y a pesar de que hay cosas que no se dicen claramente, sí hay una serie de cuestiones que quedaron meridianamente claras. La primera de todas, y quizá la más importante, es que la base del pleito es un encargo firmado por el fallecido expresidente del Círculo, Sánchez del Valle, que supuestamente encargó a Silvosa un proyecto que no podía contratarle porque no estaba capacitado para ello.

Los Estatutos del Círculo dicen clarísimamente que para que se adquiera un compromiso que supere el 5% del presupuesto anual de la Sociedad no llega con la firma del Presidente, ni siquiera con el aval de la Junta Directiva. Es necesaria la aprobación en Junta General, cosa que no sólo no pasó sino que se hizo justo lo contrario.

En 1991 se llevó a la Junta General la aprobación de un proyecto deportivo para los terrenos de Labio (por cierto, entiendo que la compra de dichos terrenos también se tendría que haber aprobado en ese órgano y no tengo yo muy claro si fue así). Se votó en contra por el disparatado coste, de unos 500 millones de pesetas (3 millones de euros).

Sin embargo, la directiva de aquel entonces, cabezonamente, pretendió “saltarse” la representación de la Junta General y convocó un referéndum para que todos los socios pudieran votar. También perdieron y el proyecto se abandonó. Hace 30 años.

A pesar de todo esto el arquitecto Arturo Silvosa visó un proyecto en el Colegio de Arquitectos que no sólo iba contra esas decisiones sino que aumentó el coste de dicha actuación hasta los 9,1 millones de euros… y después presentó la factura de sus honorarios.

Esto es lo que se nos contó, y se nos aseguró que existe respaldo documental de toda esta información, cosa que parece evidente porque de lo contrario dudo que se atrevieran a llegar tan lejos.

Aparentemente la cuestión está clara: si el señor Silvosa recibió un encargo del Presidente el Círculo de hacer un proyecto y éste no tenía capacidad legal para firmar dicho encargo, la culpa no es del arquitecto sino de quién firmó… Pero no todo es tan fácil, y menos cuando hablamos de cifras mareantes.

Para empezar el señor Arturo Silvosa era miembro de la Junta General del Círculo de las Artes, así que era plenamente consciente de que se había rechazado el proyecto no una, sino dos veces. También debería saber que el Presidente no podía hacerle ese encargo, y si no lo sabía se lo podría haber informado su padre, que era el Contador (nombre que recibe el Tesorero del Círculo) que le pagó parte de sus honorarios sin que se haya explicado muy bien el motivo.

Pero todo esto es un embrollo más complejo de lo que pueda parecer. En lugar de rechazar de plano las pretensiones del señor Silvosa, la entonces directiva pretendió una huida hacia adelante y le encargó el proyecto de la reforma de las casas adosadas del Círculo, la llamada “zona joven”, que este señor hizo cobrando una buena suma. Dicho proyecto no se hizo correctamente, y metió al Círculo en otro lío legal considerable porque parte del edificio no se puede utilizar por no ser legal la obra ejecutada. Por cierto, la intervención del exconcejal de urbanismo, Miguel Couto, fue clave para solventar en la medida de lo posible el desaguisado.

El Círculo tiene encima un marrón importante, una herencia de la forma de hacer las cosas tan “de Lugo” y que se ha esperado a hacer explotar en un momento en que no sólo hay una grave crisis global (quizás esa crisis explique la motivación del demandante, que si pierde quedará en evidencia ante toda la ciudad). Es evidente que se hicieron las cosas mal y entiendo que la esperanza del señor Arturo Silvosa es que el juzgado declare responsable subsidiario al Círculo de los manejos de una directiva que le otorgó contratos irregularmente, una directiva de la que era miembro su propio padre…

La única cosa con la que no estuve de acuerdo ayer, y a la que no me pude oponer porque pensé que los puntos se votaban por separado cuando se realizó una única votación, es en facultar a la directiva para “elegir” si se toman acciones penales por los indicios de delito apreciados en toda esta historia. No comparto que se pueda usar como baza negociadora el ocultar un presunto delito, no veo correcto el intercambio de rehenes en plan “si desistes de este pleito civil no te metemos una querella que te puede llevar a la cárcel”… si consideran que hay dicho delito su obligación es perseguirlo o denunciarlo.

En fin, esperemos que todo acabe como debe y que la justicia aclare las responsabilidades de cada cual. En todo caso es de agradecer la transparencia de la actual Directiva y su compromiso con los socios, a los que se ha informado puntualmente de todo esto.


lunes, 26 de abril de 2021

El "asesinato" de libros como promoción cultural (o recordando el desastre de Cumulum)

La tristeza de un libro que acaba sus días mojado, estropeado o incluso quemado no parece la mejor forma de reivindicar la Cultura.

Está claro que no aprendemos de los errores, y que a veces, como colectivo, nos tragamos nuestras propias mentiras colectivas.

Estos días el PP escenificó una performance frente al cerradísimo Auditorio de Magoy colocando libros en una “biblioparada”, que se supone que es una forma de llamar la atención sobre el escándalo de estar décadas reclamando una instalación cultural para, una vez se entrega, entrar en un concurso de excusas baratas para no abrirlo. Esto es como el que está dando la lata a los padres para que le compren un coche de alta cilindrada porque no quiere seguir con su viejo utilitario y, una vez lo consigue, no lo usa porque no tiene para gasolina.

Pero más allá del tema de fondo que se pretende denunciar, la forma de hacerlo nos trae a la cabeza a algunos aquel fracaso colectivo disfrazado de éxito llamado Cumulum.

La idea era preciosa, y de hecho se había hecho en muchos otros lugares del mundo: cubrir de libros la Muralla para reivindicar su declaración como Patrimonio de la Humanidad. El problema es que aquella bonita iniciativa se convirtió en un disparate, en el triunfo de la forma sobre el fondo, en el engaño colectivo más convincente de las últimas décadas en Lugo (y eso que tiene varios competidores como el Plan Estratégico o la estafa de la Intermodal): la gente pensó que eso iba a ser algo más que una foto. No, no lo fue.

“Los libros se enviarán a países en vías de desarrollo”, se nos decía. Hubo gente que dio libros a los que tenía cariño porque pensó que iban a llegar a buen puerto, que una vez que fueran parte de un evento histórico que ayudaría a lograr el reconocimiento de la Muralla como Patrimonio, serían cuidadosamente retirados y embarcarían hacia el Nuevo Mundo para llevar la cultura a quienes no tenían la fortuna de disfrutarla. Pues no. Los mejores libros fueron robados (suponiendo que llegasen a ser colgados) y el resto acabó ardiendo en un vertedero, recordándonos al 10 de mayo nazi.

No hay mayor ultraje para la cultura que la quema de libros. Vale que muchos de los que adornaban la Muralla realmente no eran más que esos estudios que la administración imprime como si no hubiera un mañana y que nadie lee. De hecho Cumulum fue una fantástica oportunidad para muchas entidades públicas para vaciar los almacenes de un montón de volúmenes con los que no sabían qué hacer… y encima vendieron la moto de “colaborar con la cultura”, cuando es justo al contrario.

Pero más allá de esos libros “de relleno”, que fueron la inmensa mayoría, pienso en los libros que dieron los que tienen cariño a la letra impresa. Novelas, ensayos, libros interesantes que acabaron siendo pasto de las llamas después de servir a su verdadero propósito: la foto. Siempre la foto.

Veinte años después mucha gente sigue hablando del gran “éxito” de la iniciativa, cuando en realidad su fracaso desde el punto de vista cultural es inapelable. Se logró la puñetera foto, y no les digo que no ayudase a que la Muralla acabase entrando en el elenco de la UNESCO, pero si no entendemos lo que falló en el pasado es difícil no repetir esos errores en el presente, como ha ocurrido en Magoy.

El día del libro se celebra insultando al libro. De nuevo veo estudios que nadie quiere ni regalados, bolsas vacías… y libros mojados, estropeados, asesinados… A mí me produce una tristeza terrible, y desde luego no me parece la mejor forma de reivindicar la cultura.

viernes, 23 de abril de 2021

Reabierto y renovado el canil de Estantigas

El renovado canil es un lugar estupendo para ir con el perro y que socialice (y nosotros también)

Tras cuatro meses y medio de obras (que es un plazo generoso para una actuación tan reducida, pero quedémonos con lo bueno) ha reabierto el canil del carril de Estantigas, lo que es una gran noticia para todos los que tenemos perro en casa (o que nos tienen ellos a nosotros, no lo tengo muy claro).

Es el único canil del casco histórico, y no sólo eso, sino que al haber poquitos en Lugo (que yo sepa sólo hay otros tres, en diversos grados de conservación) da servicio a un área bastante considerable. Por ejemplo, hacia la zona de Fonte dos Ranchos no hay ninguno así que mucha gente de por allí va al de Estantigas así que es muy utilizado.

Es un fantástico espacio en que no sólo puedes soltar a tu perro sino que además socializa con otros… y también nosotros . Lo pasan muy bien y sólo se echa de menos que hayan cerrado el paso a la parte interior de la ronda en ese tramo, una zona que era estupenda para jugar con la pelota porque ni molestas a nadie ni hay problema con coches ni nada por el estilo. Tal vez lo abran de nuevo.

En todo caso el resultado ha sido estupendo. Se han eliminado cosas que parecían poco seguras. Por ejemplo, había en el suelo una especie de láminas de metal para diferenciar las zonas de paso de las de césped y las han retirado porque eran un peligro.

Han puesto una fuente para que los perros puedan beber... y que la accionan ellos con la pata. Ayer mismo me divertí viendo cómo un precioso perro pastor jugaba con el mecanismo y bebía hasta reventar, seguramente más para entretenerse que por sed, pero era realmente estupendo verlo.

Pisando aquí sale agua a chorro... le auguro mucho éxito entre los perros

Se ha instalado también una zona de lavado para los perros, algo único en Lugo y que será muy útil para quienes quieran darle un “manguerazo” a su compañero. Lo de “manguerazo” es un decir, porque han puesto una verdadera ducha para mascotas que es una pasada y que estoy seguro que tendrá gran éxito… mientras dure. No quiero ser negativo, de verdad, al revés que me gustaría transmitir una felicitación al Ayuntamiento en general y a la alcaldesa, Lara Méndez, en particular por su implicación personal en este tema tan demandado por los muchos usuarios del canil.

Es tarea de todos la conservación de este espacio, y si les digo la verdad me preocupa muchísimo que la grifería continúe allí mucho tiempo, que nos conocemos.

Ojalá me equivoque, ojalá esta ciudad empiece a respetar las cosas que hemos pagado entre todos y que se han puesto con toda la ilusión y el cariño. Que dure mucho y haga su función. El resultado desde luego es estupendo.


jueves, 22 de abril de 2021

Adiós a una de las grandes viajeras y embajadoras de Lugo

En su foto de Facebook está en la India. Viajando, dónde si no.

Tomando un café con un amigo de La Voz de Galicia me llamaron para darme la triste noticia. Escribí estas breves líneas a toda prisa, pero confío en que no hayan reducido por ello el cariño que quería transmitir hacia una bellísima persona.

Chity Pardo Teijeiro

Un imprevisible accidente vascular se nos ha llevado a Chity Pardo Teijeiro, lucense de nacimiento y de corazón afincada en la capital de España. Era una auténtica embajadora de la ciudad por el mundo. Chity formaba parte de una numerosa familia lucense, con varios hermanos por diversos lugares de la provincia. Era la que más se parecía a su madre, Conchita Teijeiro, y no sólo en el físico, que también, con su elegante y estilizada figura. Al igual que ella, era una enamorada de la obra social de Aspnais, entidad con la que colaboraba con frecuencia.

Chity era la mujer de los viajes. Cada vez que llamabas a su casa estaba en un país diferente. Siempre amable, con una gran sonrisa en la cara, encantadora, la plena imagen de quien disfruta de la vida a pesar de los reveses que ésta se empeñó en querer darle. Se nos ha ido prematuramente, repentinamente, pero nos queda el pequeño consuelo de que vivió y aprovechó el tiempo mejor que la mayoría de la gente.

Algún día, querida Chity, se editará esa guía de Lugo en varios idiomas por la que siempre preguntabas y que, con tu visión cosmopolita y abierta del mundo, veías tan necesaria para esta ciudad. Tenías razón y confío en que lleguemos a materializarla.

Desde aquí envío un abrazo a su larga familia y amigos, a su marido, hijos y nietos, así como a su madre, nuestra querida Conchita, y hermanos.

Publicado en La Voz de Galicia del 21 de Abril de 2021

miércoles, 21 de abril de 2021

La web municipal colapsó (aunque el Gobierno lo niegue)

Captura de pantalla del colapso que el Gobierno local niega...

Que los sistemas electrónicos y digitales fallen es una posibilidad real y que hay que intentar evitar. Que se nieguen esos fallos es intolerable. Que se perjudique a los usuarios por ese motivo es inadmisible.

El otro día les hablaba de los bonos turísticos de la Xunta y de los muchos problemas que hubo para poder acceder a ellos. Ayer pasó exactamente lo mismo con la sede electrónica municipal pero por un tema mucho más serio: las ayudas a las empresas locales por la crisis del COVID-19.

Lo de los bonos turísticos no deja de ser un “divertimento”, una cuestión más o menos accesoria, mientras que en el caso de las ayudas a las empresas algunas se juegan esa gota que colma el vaso, ese grano de arena que puede suponer su continuidad o su cierre.

La administración obliga a las empresas a utilizar medios electrónicos, lo cual está muy bien pensado porque se supone que todos tienen que saber usarlos… el problema es el “se supone”. Pero incluso sin entrar en eso, si la propia página en la que tienes que presentar la solicitud colapsa en cuanto hay una avalancha de solicitudes (cosa esperable en determinados casos) la cuestión ya no es tan sencilla.

Estas ayudas se conceden por orden de entrada en el registro, pero si éste funciona ora sí, ora no, ¿qué justicia hay en que reciba la ayuda una empresa que “coló” a las 10:30 mientras otra estuvo desde las 9 a las 12 sin poder presentar la solicitud?

Los problemas de la sede electrónica municipal de Lugo son ya conocidos por todos, y se basan en la cabezonería de querer tener “su” chiringuito en lugar de usar la plataforma estatal, que funciona de maravilla y casi nunca tiene incidencias.

Iba a escribir que “confiemos en que solventen este problema para quienes se han quedado fuera de las ayudas por un error de la administración”, pero es imposible. Si anulan el procedimiento sería injusto para los que pudieron presentar la solicitud, y si abren la mano para quienes tuvieran problemas… ¿cómo se demuestra eso? Se colarían todas las entidades que quisieran alegando que lo intentaron y no pudieron…

Lo que sabemos es que esto nace con mal pie, y que encima lo niegan, lo que es más grave. Mentir no es la mejor solución a estas meteduras de pata, sólo agravan la situación.

martes, 20 de abril de 2021

La norma gallega sobre las cenas es clasista

Desafío visual: ¿en cuál de estas terrazas podemos cenar y en cuál no? Porque son idénticas sólo que unas tienen licencia de cafetería y otras de restaurante. Ridículo. Foto: La Voz de Galicia

Desde el pasado viernes los gallegos podemos salir a cenar hasta las 11 de la noche… pero sólo en restaurantes. Bares y cafeterías mantienen el cierre a las 9, cosa que no cabe en cabeza humana sobre todo si tenemos en cuenta que la Ley de Turismo de Galicia faculta expresamente a bares y cafeterías para servir menús y raciones, con lo que es arbitrario e injusto discriminar a unos tipos de locales frente a otros.

Los artículos 77 a 80 de la vigente Ley 7/2011, de 27 de octubre, del turismo de Galicia, recogen la clasificación de las empresas de restauración en restaurantes, cafeterías y bares.

·         La definición de las cafeterías dada por el artículo 79 las describe como “aquellos establecimientos que ofrezcan, en una misma unidad espacial, servicio de barra y mesas con el fin de dispensar todo tipo de bebidas, que pueden acompañar de una oferta de restauración sencilla y de ordinario a la plancha, para lo que, en su caso, deberá contar con un servicio de cocina adecuado”.

·         En cuanto a los bares, dice que son “aquellos establecimientos que, además de la barra, cuentan, en la misma unidad espacial, con servicio de mesas, en las que podrá facilitarse a la usuaria o usuario turístico el mismo servicio que en la barra, así como con un servicio de restauración consistente, como máximo, en un menú único ofrecido por un precio global. Para la oferta de tapas y raciones y del menú, el establecimiento deberá contar con cocina acorde con los servicios que prestase”.

Se puede argumentar que la diferencia con los restaurantes es que éstos tienen que tener comedor separado de la barra, pero esa diferencia es irrelevante en este momento, ya que sigue vedado el servicio de barra en todos los locales por lo que no se sostiene ningún argumento que justifique esta medida. Tampoco parece sostenible, por ejemplo, poder cenar en la terraza de un restaurante y no en la de un bar o una cafetería.

Este criterio es arbitrario, injusto y discrimina a unos establecimientos a los que la legislación faculta para servir comidas y cenas a la ciudadanía. Parece partir de una visión clasista en que unos son “más” que otros, cuando no es el caso.

La explicación realista parece ser que “si dejamos abrir los bares la gente se irá de vinos y se emborrachará”, pero eso es una bobada por dos motivos: porque también se pueden emborrachar en restaurantes y porque se evita vedando las consumiciones que no sean cenas, a pesar de lo difícil que es definir qué es una cena. ¿Cuenta salir a tomar unas raciones como cena?

Es surrealista que si vemos una terraza tengamos que preguntar si tienen licencia de restaurante para saber si podemos cenar. ¿Acaso ese permiso diferencia los posibles contagios con el COVID-19?

Lo llamativo es que los primeros en quejarse de este tema fueron los propios restaurantes, porque aunque aparentemente se benefician, se han solidarizado con sus compañeros de bares y cafeterías entendiendo que en este momento hay que unirse.

Otra bobada de la normativa es el registro de clientes. Es una buena iniciativa, pero cae por su base al tener que hacerlo únicamente desde las 21:00 horas. No tiene ningún sentido. Sin entrar al debate sobre la protección de datos, dadas las circunstancias, lo que es completamente absurdo es que únicamente se haya de tomar nota de los datos de los que acudan a partir de las nueve de la noche.

Si la intención de esta medida es poder localizar con facilidad a las personas que acudan a un establecimiento si hay un brote, ¿no tendría lógica que fuera una medida global independientemente del horario?

La Xunta debería recapacitar sobre estas dos cuestiones porque la segunda es ridícula, pero la primera es aún peor porque hace la puñeta a una serie de locales de forma totalmente injusta.

lunes, 19 de abril de 2021

Miguel Couto tira de la manta

La toma de posesión de Miguel Couto fue hace un par de años. Suficientes para cansarse de luchar contra una estructura muy asentada en el Ayuntamiento de Lugo. Foto: El Progreso

Para empezar a conocer los gravísimos problemas estructurales del Ayuntamiento de Lugo, que explican parcialmente la deficiente gestión y los disparatados tiempos de tramitación de casi todo es imprescindible la lectura de la impecable entrevista publicada ayer por ElProgreso al exconcejal de urbanismo Miguel Couto, firmada por otro Miguel, Olarte. Couto pone en negro sobre blanco una realidad que todo Lugo conoce pero que nadie se atrevía a decir tan claramente: hay una estructura dentro de “la casa” que se dedica imponer su voluntad y que está formada por parte del personal municipal.

Aunque somos muy dados a crucificar a todo un colectivo por las malas acciones de algunos, es evidente que eso es una injusticia. En el Ayuntamiento de Lugo, como en todas las administraciones, hay personal bueno y personal malo, gente eficiente y otros que van a echar la mañana, profesionales y caraduras, honrados trabajadores y chorizos que  buscan solamente su propio beneficio… Lo que puede que sea diferente de unas organizaciones a otras es la forma de gestionar a esas situaciones y las consecuencias de tener una u otra actitud y quién sale ganando finalmente.  En Lugo parece que se premia al cantamañanas, sin que eso implique que todo el que tenga un cargo administrativo lo sea… creo que nos entendemos perfectamente.

Conozco a gente joven que ha entrado a trabajar en el Ayuntamiento y que está horrorizada con lo que allí se ha encontrado, porque en lugar del servicio al ciudadano prima el “aquí esto siempre se ha hecho así”, o el “qué se ha creído este tío, que sólo es concejal y está de paso” en el mejor de los casos. Ya no hablemos del “mejor en eso no te metas que lo maneja Fulanito que tiene… mucho interés en eso”. Quienes mandan no son los representantes de los lucenses, sino los de una vieja guardia que huele a podrido, lo que explica que muchas de las causas y problemas en que está metido el Gobierno hayan salido adelante en su fase administrativa. Lo suyo habría sido que no se metiera la pata porque los funcionarios lo tendrían que haber impedido.

¿Esto implica corrupción? Pues depende de cómo lo veamos, pero está claro que sí hay algo de eso…  y lo que es peor, existen prácticas que son, como poco, incorrectas pero que son toleradas y premiadas.

A los hechos me remito. Han salido en prensa funcionarios reconociendo que les llegaban regalos de empresarios que después lograban contratos municipales y ¿qué ha pasado con ellos muchos años después? Pues que siguen en sus puestos (algunos de libre designación) o incluso han subido en el escalafón, lo que sólo se explica por la intolerable ineptitud de los responsables políticos de los gobiernos de los últimos 20 años o, siendo aún más desconfiados, porque estas personas saben dónde están enterrados los cadáveres y es mejor tenerlas tranquilitas y contentas, así que seguimos mirando hacia otro lado eternamente porque si no pueden hundir al Gobierno cuando les plazca.

Pero esto no es tan sencillo como hablar de presuntas incorrecciones o incluso ilegalidades, que eso se podría perseguir desde el juzgado… es peor aún, se trata de esa forma de hacer las cosas tan de Lugo basada en “yo conozco a fulanito” y de demostrar que el poder real no lo tienen los elegidos por los lucenses sino los de “la casa”.

Esto se ve incluso en algunos informes emitidos por personal municipal, los llamados “técnicos”, que los hay para echarse a temblar. Impresiones personales, cuando no insultos mal disimulados a los administrados, u opiniones de cómo se deberían hacer las cosas (al margen de cualquier normativa) se convierten en obligatorios porque nuestros próceres no tienen ni idea de por dónde se mueven y parecen creer que eso es normal. No lo es.

Tampoco lo es la dejación de funciones de los titulares de las concejalías, que se ve que creen que la función del personal a su cargo es decidir “qué se hace”, lo que es una barbaridad porque esa es la función de los concejales, que para eso los elegimos. El trabajador municipal, independientemente de su rango, puede ser consultado para el “cómo se hace” y, por supuesto, para ejecutar la decisión. De pensar lo contrario, concluiremos que nos sobra el Gobierno, frase que mucha gente aplaudiría por no ser conscientes de que no es más que demagogia pura y el inicio de cualquier dictadura.

La oposición peca de lo mismo. He tenido largas discusiones con algunos concejales de los partidos que se sientan frente al Gobierno, y siempre me salen con lo de “es que no podemos ir contra los técnicos”, como si las reiteradas sentencias de los juzgados contra las decisiones tomadas basándose en los informes de esas personas no fueran suficiente base como para asumir que no gozan de infalibilidad. Pero nadie les tose.

Esa misma oposición, con la cortedad de miras que le caracteriza en Lugo, aprovechará esta entrevista de Couto para meter el dedo en el ojo y buscar debilidades en el Gobierno, cuando lo que tiene que preguntarse es si el problema no es más profundo, y más estructural, que lo es. Quizá sea el momento de arremangase y decirle a la Alcaldesa: “Haz lo que tengas que hacer para resolver este gravísimo problema que nos está haciendo la puñeta a todos y te vamos a apoyar”… pero tal vez sea esperar demasiado de unas organizaciones cuyo fin último es el circo político y no el bien de la ciudad, algo a lo que también juega un Gobierno que en sus notas de prensa tiene una obsesión enfermiza por hacer oposición a la Xunta en lugar de dedicarse a lo suyo.

Miguel Couto es una persona seria y trabajadora, que llegó con ganas de cambiar las cosas que veía mal pero que chocó contra un muro cuyos ladrillos son un “statu quo” de intereses y poderes que, sorprendentemente, se ve afianzado por el propio Gobierno del que él formaba parte hasta que se cansó y se fue a su casa, algo que le honra pero que Lugo lamentará porque necesitábamos esa revolución que él quiso hacer y no pudo. Estoy seguro de que habría gozado de la colaboración de muchos funcionarios municipales que están hartos de esta forma de hacer las cosas que hay en el Ayuntamiento y que desean que esta administración sea lo que debe ser.

Ahora Couto “tira de la manta” y explica con pelos y señales que Lugo tiene un Gobierno que no es capaz de llevar a cabo sus políticas porque algunos de los funcionarios, a los que tiene pavor, no se lo permiten.

Si esto no es motivo para un escándalo, no sé qué lo puede ser.

Pueden ver aquí la entrevista a Miguel Couto

viernes, 16 de abril de 2021

El Círculo de las Artes descarta pagar 210.000 por el proyecto de una obra NO ejecutada



Hoy me van a permitir que sólo me limite a reproducir un texto que considero de mucho interés:

Comunicado de la Junta Directiva relativo a la demanda presentada por Arturo Silvosa contra el Círculo de las Artes

LOS SOCIOS DEL CÍRCULO CONTESTARÁN EN EL JUZGADO AL ARQUITECTO ARTURO SILVOSA, QUE PRETENDE COBRAR 210.000 EUROS POR EL PROYECTO DE UNA OBRA NO EJECUTADA DE HACE 20 AÑOS

Silvosa ya cobró más de 150.000 euros por el proyecto que los socios  rechazaron en referéndum en 1991

Lugo, 16 de abril de 2021

La junta directiva del Círculo de las Artes contestará al arquitecto Arturo Silvosa en el juzgado.  Este técnico quiere cobrar 210.000  euros más intereses de demora y costas por un proyecto de hace 20 años para una obra que fue rechazada por los socios del Círculo y nunca se ejecutó, consistente en unas instalaciones deportivas en la parroquia de Labio, en el Concello de Lugo.

La junta general, que es el órgano competente para decidir si las obras de esta envergadura se hacen o no, celebró un referéndum en 1991 y emitió un dictamen preceptivo y vinculante en el que se rechazó la ejecución de esta obra por ser  inabordable económicamente. El resultado de ese referéndum oficial se comunicó al Gobierno Civil de entonces.

En tres años el arquitecto  multiplicó por cinco el presupuesto inicial

A pesar del pronunciamiento en contra de la junta general, Arturo Silvosa hizo un estudio previo para saber cuánto costarían las obras de Labio, desoyendo la decisión de los socios del Círculo expresada en referéndum. Conviene puntualizar que tanto Arturo Silvosa como su padre, Egidio Silvosa,  eran miembros de esa junta general. Y además, Egidio Silvosa, ya fallecido,  era el encargado de autorizar los pagos en aquella época, ya que  era el tesorero de la sociedad cultural. En ese estudio previo, firmado por Arturo Silvosa y Manuel Ferradás en 1997, se concluye que las obras de Labio tendrían un coste de 1,9 millones de euros.

Sorpresivamente, tres años después, en el año 2000, el propio Arturo Silvosa, ya en solitario, presentó al presidente del Círculo, José Carlos Sánchez del Valle, una factura por el importe astronómico de más de 380.000 euros. Esa cantidad la decidió el arquitecto en base al presupuesto de la obra que él mismo fijó finalmente  en 9.6 millones de euros. Es decir, en 3 años el presupuesto de la obra de Labio se multiplicó por más de 5 y pasó de 1.9 a 9.6 millones de euros. Este incremento se produjo por decisión de Silvosa ya que, ni la junta directiva ni la junta general, habían autorizado tal presupuesto ni sabían en qué se basaba esa estimación disparatada e inasumible para una entidad cultural sin ánimo de lucro, como el Círculo de las Artes.

Malestar en la junta directiva por el engaño

La presentación de la factura de Arturo Silvosa  por más de 380.000 euros y el coste de ejecución de la obra,  que el arquitecto cifró en más de 9.6 millones de euros, provocaron un profundo malestar en la directiva  que tenía el Círculo en el año 2000, ya que desconocía ambas cuestiones y se sintió engañada por Arturo Silvosa y por su padre, Egidio Silvosa.

A este respecto hay que recordar que dos directivos de entonces ya habían presentado su dimisión irrevocable por disconformidad con la forma en que Silvosa estaba manejando este asunto: José Luis Macho y Antonio Seral.

Se da la circunstancia de que Macho además de secretario del Círculo era secretario del colegio de arquitectos, donde Arturo Silvosa presentó el proyecto faraónico de Labio para su visado sin que la directiva del Círculo lo hubiese autorizado.

El otro directivo, Antonio Seral, formaba parte de una comisión tripartita creada para controlar la viabilidad técnica y económica de la obra de Labio pero esa comisión no llegó a funcionar nunca y todas las gestiones que le habían sido encomendadas las asumió en solitario Egidio Silvosa, padre del arquitecto y tesorero del Círculo en aquella época.

Un burofax que responsabiliza al arquitecto y a su padre

Conocida la factura exagerada del arquitecto y el presupuesto desorbitado de la obra, el resto de directivos del Círculo enviaron un burofax a Arturo Silvosa el 4 de diciembre de 2001.  En él le dicen que desconocen  el  proyecto al que se refiere y  que, además, por su cuantía,  solo podría ser autorizado por la junta general, tal como establece  el reglamento de la sociedad, exigencia que el arquitecto conoce, por ser  miembro de  dicha junta general. Manifiestan igualmente que  “esta junta únicamente ha tenido conocimiento de que, siendo su padre miembro de la junta directiva, se realizase un estudio sobre el coste de la ejecución de las obras a realizar en Labio, con muy limitadas expectativas y presupuesto muy inferior al que usted maneja”.  Y  añaden que “cualquier desviación en el mismo solo puede entenderse como responsabilidad de ambos  (Silvosa padre y Silvosa hijo)”. Finalizan diciendo: «rechazamos de  manera absoluta el contenido de los escritos y los planteamientos que en los mismos se nos hacen». Es decir, en ese burofax la directiva del Círculo culpa al arquitecto y a su padre del intento de cobrar a la entidad cultural una cantidad disparatada y no autorizada.

Es significativo recordar que Arturo Silvosa ya cobró del Círculo de las Artes por el proyecto de esa obra fantasma,  que no iba a ejecutarse,  más de 150.000 euros. Esa cantidad la percibió en varias fases, alguna de ellas sin ningún contrato que avalase dicho pago y siendo su padre, Egidio Silvosa, tesorero y por tanto el encargado de realizar los pagos del Círculo. Las demás cantidades se ampararon en un contrato insólito y sin precedentes en el Círculo de las Artes, hecho sin el logotipo ni el sello de la entidad, que se incluyen siempre en todos los documentos oficiales, y sin conocimiento de la junta directiva ni de la junta general.  Es decir, hecho sin consentimiento de los socios del Círculo y en contra de lo previsto en el reglamento de la sociedad cultural que prevé en sus artículos 49 y 51 que la junta general debe autorizar todas las operaciones que excedan del 5% de su presupuesto anual y las que excedan la duración del  mandato de la junta directiva. Ambos supuestos  se dan en este caso: el presupuesto del año 1999 era de 935.000 euros y el mandato de la junta finalizaba al año siguiente.

Nuevo intento de cobro ante la directiva recién llegada

Dos décadas más tarde, en 2016, y ante una directiva recién llegada y absolutamente ajena a estos hechos, el arquitecto vuelve a intentar el cobro. La nueva directiva, vistos los antecedentes que obran en los archivos de la entidad y hechas las comprobaciones documentales y jurídicas precisas, rechazó la pretensión de Arturo Silvosa por entender que era ilegal. Ante esta negativa, el tema finalmente se decidirá en los tribunales de justicia.

Así las cosas, la actual directiva entablará todas las acciones legales necesarias para defender los intereses de los socios del Círculo, que son los propietarios de la entidad cultural. Para este fin la directiva ya ha recibido el apoyo de los dos órganos de control de la entidad: la comisión delegada de la junta general y la comisión censora de cuentas, que se pronunciaron a favor por unanimidad.

Igualmente, la junta directiva explicará a todos los socios que la reclamación de Arturo Silvosa, además de basarse en un proyecto rechazado en referéndum, puede  comprometer la propia viabilidad económica del Círculo, una sociedad cultural sin ánimo de lucro, financiada con las cuotas de los socios y  dedicada a colaborar altruista y solidariamente con proyectos culturales y sociales.

La directiva del Círculo  lamenta este ataque a una institución señera, respetada y querida por los lucenses y transmite a los socios  un mensaje de tranquilidad y confianza en la justicia.  Igualmente manifiesta que defenderá los intereses y el honor del Círculo de las Artes con determinación y  todos los medios legales a su alcance.

La junta directiva del Círculo de las Artes

jueves, 15 de abril de 2021

Los bonos de la Xunta o cómo morir de éxito

Cuatro de las muchas capturas que hice esperando el turno. ¿De verdad no se les ocurrió pensar que la demanda sería altísima?

La iniciativa de la Xunta de Galicia de establecer bonos cuyo fin es potenciar el turismo interior en nuestra comunidad fue una magnífica idea que ha tenido una demanda brutal. Ayer día 14 a las 00:00 se abría el plazo y yo, como muchos ciudadanos, estuve puntualmente sentado frente al ordenador… para encontrarme con la Sede Electrónica colapsada.

Cuando casi a las dos de la mañana se desbloqueó la web, me encontré con la desagradable sorpresa de que mi número en la cola era el 55337 y que tenía 4321 usuarios delante de mí, presumiblemente para hacer lo mismo, con lo que es harto improbable que la inmensa mayoría de los solicitantes consigamos el bono.

Sí, no deja de ser algo que podemos encuadrar en la categoría de "problemas del primer mundo", pero ya saben, cada uno es rehén de sus circunstancias,

Como tema era atractivo, y también porque la curiosidad me desveló (la tensión es como cuando pujas por algo en eBay y estás esperando a que cierre la subasta), estuve pendiente de la página y conseguí acceder a las 2:43 de la mañana, que fue cuando pude tramitar la solicitud. Ya les contaré el resultado, pero lo veo oscuro salvo que amplíen el crédito destinado a esto porque de los 2 millones asignados salen 6.666 bonos de los de mayor coste, que entiendo que serán los más solicitados.

Puede ser comprensible que se hayan visto desbordados pero, francamente, era previsible la avalancha y por lo tanto deberían haberse tomado las medidas oportunas para evitar el colapso informático. Estamos hablando de bonos de hasta 500 euros en que el usuario paga el 40% y la administración el otro 60% y que se pueden gastar hasta diciembre en una larga lista de hoteles gallegos. ¿De verdad no vieron venir la estampida? ¿No recuerdan las aglomeraciones en las puertas de los establecimientos cuando las rebajas no eran la actual trampa mortal para los pequeños comercios? Pues aquí igual, o peor porque la cola “digital” la haces cómodamente desde tu casa.

Es una magnífica iniciativa y su resultado lo demuestra, pero recuerden que también se puede morir de éxito y no hay nada peor que frustrar las expectativas que se crean en la ciudadanía.

miércoles, 14 de abril de 2021

Lugo, capital de los sellos este 2021

El logo de Exfilna 2021 hace guiños a los tres Patrimonios de la Humanidad de Lugo: Muralla, catedral y Camino Primitivo de Santiago

El Círculo de las Artes acogió ayer la presentación a la sociedad lucense de las actividades para 2021 de la Sociedad Filatélica Lucense, entre las que sin duda alguna destaca la celebración de la EXFILNA 2021 en nuestra ciudad.

¿Qué es EXFILNA?

Exfilna es la Exposición Filatélica Nacional, un evento que, bajo la presidencia de honor de SS.MM. los Reyes de España, organiza desde 1964 la Federación de Sociedades Filatélicas (FESOFI) con el apoyo y el patrocinio principal de Correos.

Tiene dos vertientes fundamentales:
  • La Exposición, que se centra en la promoción de la filatelia como un valor cultural y económico, buscando la difusión de esta apasionante afición.
    • Acoge las mejores colecciones filatélicas de España, muchas de las cuales han obtenido medallas de oro y premios internacionales.
    • Cuenta con unas 9.600 hojas de colección en 600 marcos expositivos que muestran la historia postal de España y del mundo desde el siglo XVI con colecciones particulares españolas y de los dos países invitados de este año (Francia e Italia) que han sido escogidos por su relación con la historia del Camino de Santiago y de la ciudad de Lugo.
  • El Campeonato de España de Filatelia, que se organiza en tres clases (Oficial, Maestra y Competición) dividiéndose esta última en varios grupos y subgrupos.
    • Está en redacción el reglamento de participación, que se publicará como es habitual en la web de FESOFI y que supondrá la competición de las mejores colecciones filatélicas de nuestro país.
¿Qué supone para Lugo?

Teniendo en cuenta que el año 2021 es Xacobeo, ser la sede de EXFILNA centra en Lugo un importante foco de atención para coleccionistas, aficionados y para el público en general.

Es la culminación de las aspiraciones lucenses que, desde los años 60, buscaban traer a la ciudad de las Murallas la Exposición Filatélica Nacional algo que se ha logrado para octubre de este año. EXFILNA es una de las mayores exposiciones filatélicas del mundo.

Dada su la gran importancia CORREOS, principal patrocinador, emite cada año una hoja bloque conmemorativa dedicada a la ciudad donde se realiza, y otras emisiones durante el periodo que serán claves para que Lugo se vea reconocido a nivel nacional e internacional, ya que no podemos olvidar que la filatelia española es mundialmente reconocida, admirada e incluso codiciada a nivel de coleccionismo.

¿Cuándo y dónde tendrá lugar?

EXFILNA 2021 tendrá tres sedes: una carpa en la Plaza de Santa María, el Salón Regio del Círculo de las Artes y la sala de exposiciones del Palacio Provincial de la Diputación de Lugo. Se celebrará entre los días 21 y 24 de octubre de este año.



martes, 13 de abril de 2021

Lugo necesita una auditoría

Restos calcinados en el Ceao - Foto: La Región

Cuando hay un suceso extraordinario se ha de recurrir a medidas extraordinarias, eso parece de puro sentido común, y que en una emergencia como el incendio del domingo haya que tirar de recursos privados no sólo es lógico, sino elemental. Los camiones de Leche Río que abastecieron de agua a los bomberos hicieron una gran función, digna de aplauso, en que la colaboración entre lo particular y lo público superó esa barrera que artificialmente se intenta trazar siempre, la del “ellos” y el “nosotros”. Ver también que un empresario ofrece desinteresadamente terrenos e incluso locales a los afectados si los precisan para continuar con su actividad, reconcilia a uno con esa desconfianza que siempre nos hace ver intereses tras cualquier acto generoso.

Pero más allá de esta visión positiva en la desgracia hay preguntas que hay que responder y que supongo que, como les apuntaba ayer, las compañías de seguros pondrán sobre la mesa con razonable seguridad: si tenemos en cuenta que los camiones de Leche Río pudieron cargar el agua en la planta de esa fábrica, ¿por qué no se pudo hacer eso mismo en las bocas de incendios que hay en el polígono industrial?

Dice el nuevo concejal de Urbanismo, Álvaro Santos, que el caudal de agua estaba garantizado, algo que nadie duda. El problema no es ese sino la presión. De hecho los bomberos no pudieron utilizar el cañón de agua porque no tenían suficiente fuerza para hacerlo.

El problema ahora viene de las pólizas y las investigaciones. ¿Qué pasará si se demuestra que un deficiente equipamiento de la zona del Ceao fue crítica para no poder extinguir el incendio antes de que se extendiese? ¿Quién pagará los daños? Porque las pólizas de responsabilidad civil a terceros son limitadas y les puedo garantizar que si algo caracteriza a las compañías de seguros es el apego que tienen a sus millones.

Vista la mala pata judicial que caracteriza a Lugo (a las diversas y variopintas sentencias me remito, mencionando de pasada las del Garañón, la fábrica de la luz o la montaña de juicios perdidos contra el propio personal de la casa) me veo venir una importante batalla legal en que podremos palmar unos cuantos millones de nuestros euros.

Si se demuestra esa deficiencia de los medios en el Ceao, ¿podemos culpar a Lara Méndez de esta situación? A pesar de que soy muy crítico con la gestión del gobierno local, no me atrevo a llegar hasta ahí. Tampoco a exculparlos, porque hay una responsabilidad (que no necesariamente es lo mismo que una culpa).

Una vez más es una situación heredada. El polígono es viejísimo y las medidas de seguridad que eran obligatorias cuando se construyó están más que superadas por las normativas vigentes a las que, por cierto, normalmente todo el mundo se resiste porque son caras y no les ven utilidad hasta que pasan estas cosas. También es cierto que si se destinasen los esfuerzos (y los millones) que se invierten en proyectos de discutible necesidad en poner al día lo que ya tenemos otro gallo nos cantaba.

Lugo es una ciudad de 2.000 años pero que en los últimos 20 está envejeciendo a una velocidad pasmosa. Quizá sea el momento de hacer una auditoría de la ciudad. Una buena inspección objetiva, profesional y que revise la eficiencia de los servicios que se prestan, el mantenimiento de las estructuras, el uso que se les da… Aunque es casi imposible que eso se haga de forma separada de la política que todo lo emponzoña.

También es verdad que si mañana anunciasen esa iniciativa reconozco que yo mismo la vería con desconfianza, porque ya hemos pagado muchos “planes” que sólo han sido de cara a la galería: el estratégico, el de subvenciones, el de igualdad, el de movilidad… papel mojado, carísimo papel mojado que no ha servido para nada.

Quizá Lugo necesite parar (sí, aún más), tomar aire y reflexionar sobre lo que queremos hacer con nuestra ciudad. Tal vez sea el momento de una auditoría que nos diga en qué estado real estamos para saber a dónde queremos ir.

lunes, 12 de abril de 2021

Lugo no existe (o existe poquito) para las teles nacionales

El impresionante incendio no ha merecido, al menos que yo haya visto, ni un segundo de telediarios nacionales.

Como es por todos sabidos ayer en Lugo hubo un impresionante incendio, en que varias naves del polígono de O Ceao ardieron por los cuatro costados y otras se vieron afectadas. Tan enorme fue la cosa que ni siquiera tuvimos que escuchar las típicas pullitas políticas entre administraciones rivales (que no deberían serlo pero lo son) y de hecho, al revés, hubo agradecimientos de unos a otros y otros a unos, algo que tendría que ser habitual pero es como el rayo verde, tan poco habitual que la mayoría dudan de su existencia.

No es momento de ponernos a analizar de quién es la responsabilidad de que para extinguir el incendio hubiera que tirar de camiones de Leche Río. Prefiero ver la positiva colaboración de unos particulares con una situación de emergencia, aunque habrá que aclarar en algún momento por qué la presión del agua en el Ceao es insuficiente, algo que se dilucidará en la más que segura investigación que harán en breve, y que seguramente estará bien hecha porque la van a encabezar las compañías de seguros que se verán obligadas a aflojar unos cuantos de sus preciados millones.

Lo que sí me llama poderosamente la atención es que los telediarios de ámbito nacional o no han recogido las imágenes o le han dedicado unos pocos segundos (en el telediario de TVE salieron 15 segundos en una hora de programa). Las impresionantes lenguas de fuego y la gran humareda son lo bastante “interesantes”, creo yo como para que al menos se les dé cierta importancia en los noticiarios que dedican varios minutos a hablarnos de un jabalí atacado por un oso, un accidente anecdótico en las calles de Alabama, la imagen curiosa de un niño patinando en las aguas heladas de un perdido lago de Rusia, o a difundir las peligrosas aficiones de señores que se dedican a trepar a pelo por las fachadas de los edificios o a hacer el ganso en grúas suspendidas a muchos pisos de altura.

Muchas veces pienso que rellenan telediarios con imágenes que hace unos años aparecerían como mucho en “vídeos de primera” porque las tienen, y claro, como las noticias que antes liquidaban en media hora ahora duran una entera y se repiten una y otra vez hay que meter algo para cubrir todo ese espacio. Pero no, por imágenes del incendio no será.

¿Acaso el hecho de que no hubiera muertos ni heridos es la clave? Puede ser, pero la comparativa con muchas de las tontas historias que nos cuentan en las noticias no resiste el análisis. Quizás es que Lugo, visto desde Madrid, es una pequeña capital de provincias sin mayor relevancia para sus audiencias, aunque como nos llenan las teles de cortes bobos sobre tonterías que pasan en Estados Unidos tampoco lo veo claro.

En todo caso es llamativo. A Lugo sólo le dedican tiempo en el telediario cuando hay escándalos sexuales, corrupción, criminales que salen de la cárcel… y visto así salimos demasiado, la verdad.


NOTA:

Originalmente este artículo hablaba de que no salía la noticia en medios nacionales. Ayer vi varios telediarios y pensé que no había salido en ninguno pero no es cierto. En el de TVE por ejemplo le dedicaron 15 segundos (contados) en una hora de noticias...

En los buscadores de las propias cadenas no se menciona la noticia. Entenderán que no puedo ver todos los telediarios, así que antes de publicar el artículo busqué y no me salía nada por eso di por sentado que no había salido. Salir salió... poquito, pero salió....

Gracias a los que me han hecho notar la equivocación :)

Errare humanum est, sed perseverare diabolicum

viernes, 9 de abril de 2021

La Intermodal como pelotazo (II): Tres torres de pisos y un centro comercial son el objetivo

¿Sabían que la nueva intermodal multiplica el espacio de la actual estación de tren... para dedicarlo a un centro comercial? ¿Otro?...

El otro día publicaba un artículo en que me preguntaba si la nueva Intermodal no es más que un pelotazo urbanístico disfrazado de obra de interés público. Hoy puedo afianzar esa opinión, ya que un análisis detallado de la documentación hace que no sólo sea una sospecha sino una firme convicción.

Verán, el resumen es el siguiente: se coge un área más o menos degradada (que se dejó morir por desidia, porque el Ayuntamiento no actúa en la plaza de Conde Fontao desde hace décadas), se presenta un plan de “renovación” que incluye la “mejora de servicios a los lucenses” y se gastan decenas de millones de dinero público en tirar unos edificios en perfecto uso para construir unas enormes moles totalmente desproporcionadas a lo que necesitamos. Según el Catastro el edificio de la estación de tren de Lugo ocupa una superficie de 278 metros cuadrados. El nuevo tendrá, según publica la prensa, 1.350 metros… (la estación de autobuses sería a mayores) ¿A qué viene ese salvaje incremento? 

La respuesta está en un protocolo muy revelador firmado el 4 de agosto de 2010 entre ADIF, el Gobierno de España, la Xunta de Galicia y el Ayuntamiento de Lugo. Dice en su cláusula sexta que la nueva estación de Lugo tendrá un uso del 70% de su superficie dedicada a usos “asociados y compatibles de edificabilidad terciaria” y después añade “comercial, ocio y restauración”. Traducido a román paladino: un centro comercial. De esos 1.350 metros 70%, es decir, 945 se usarán para un nuevo y disparatado centro dejando 405 para “el resto”, y recuerden que en ese resto hay que incluir los pasillos, baños, entradas y salidas con lo que nos vamos a quedar, aproximadamente, con la misma superficie que tenemos ahora para usos ferroviarios. Eso explica mucho.

Los convenios urbanísticos como éste y el del Garañón parece que eran muy interesantes para el Ayuntamiento...

Si añadimos las tres torres de pisos que les comentaba el otro día (en el párrafo siguiente de esa cláusula se recoge una edificabilidad lucrativa neta de 14.560 metros cuadrados de uso residencial), y un aparcamiento subterráneo que se reservará en parte para el uso privado de las viviendas, se cierra el círculo.

¿Qué grandísimas ventajas supone para la ciudad hacer una nueva estación de tren si no tenemos ni frecuencias, ni trenes, ni líneas y las variantes que podrían acercarnos a otras ciudades como Orense se han descartado? Ninguna. ¿Y alejar los buses de donde están ahora, lo que resulta comodísimo para la mayoría de los usuarios? Menos aún.

Pero sí es una inversión especulativa de primer orden. Se construyen tres torres de pisos, se les pone un aparcamiento subterráneo (construido con dinero público, pero en que tendrán una parte privada), se añade un enorme centro comercial, y se les hace un pasadizo al parque de Sagrado Corazón para que así tengan su jardín sostenido con el dinero de todos. Como negocio es redondo.

A la derecha pueden ver dos de las tres torres que van en el proyecto. Ya ven que no son precisamente un accesorio... NOTA: la tercera torre no sale en la imagen porque el vídeo se difumina muy oportunamente cuando se va a ver completa...

La pregunta es si Lugo necesita más viviendas aún. Un 20% de vivienda vacía, barrios cayéndose en pedazos, proyectos para construir junto al río Miño, en el barrio “ecoilógico”, enormes áreas urbanizadas pero sin edificar porque no hay demanda (sólo tienen que dar un paseo por San Fiz o la zona de Garabolos para ver las parcelas muertas de risa)… y se habla aquí de un nuevo macroproyecto disfrazado de utilidad pública.

El nuevo centro comercial (que es lo que será en realidad la Intermodal) tampoco creo que sea lo mejor ni para la ciudad ni para el ya debilitado y golpeado comercio tradicional. El éxito de otro mamotreto es más que discutible viendo la última experiencia en Lugo, el Centro comercial de Abella que es un sonoro fracaso en que hubo mucho interés por parte de algunas administraciones, que lo vendieron como la gran esperanza de esa zona de la ciudad.

Piensen en todo esto, consulten la documentación y a ver qué les parece. Yo lo tengo clarísimo: nos están tomando el pelo.


jueves, 8 de abril de 2021

Las pantallas de bus en catalán sólo son una anécdota. El retraso no.

 

Hay bastante cachondeo con el tema de las nuevas pantallas del autobús urbano, que por lo visto están en fase de pruebas o algo así, y que están en catalán, ilustrando a los lucenses de los recorridos que los autobuses tenían en marzo de 2019 entre Castelldefels y El Prat, una información sin la que probablemente nuestra vida no sería la misma. No deja de ser una curiosidad, sí, que mientras estén en ese extraño limbo ni siquiera pongan bien la fecha y la hora (sería bueno que dieran algún dato, por pequeño que sea) y ya si tuvieran una leyenda de “panel en fase de pruebas” ni les cuento lo razonable que sería. Hasta duda uno que la temperatura que marcan no sea la del Palau de la Música o algo así.

Pero a fin de cuentas no deja de ser una anécdota marginal. Estoy totalmente seguro de que si las pantallas tuvieran información en inglés de las líneas de New Hampshire nos parecería totalmente normal y no se habría escandalizado nadie aunque no tuviera nada que ver con Lugo. Bueno, si esa información fuera de Madrid y no estuvieran en el gobierno los que están, el propio BNG bramaría contra la “colonización” de los buses, pero ya saben, es parte de la imaginería política y el circo mediático al que ya estamos tan lamentablemente acostumbrados.

La pregunta no es por qué están en catalán ni por qué figura una información errónea, sino por qué no funcionan todavía. “Es pronto” dirá el lector, y tendrá razón… “Las cosas de palacio van despacio” y “Roma no se hizo en un día” son los habituales soniquetes sobre estos temas, pero si tiramos de hemeroteca vemos que todo depende de dónde esté uno cuando dice esas cosas. El propio Arroxo criticaba en 2019 que “en dos años” el Ayuntamiento no hubiera sido capaz de poner a funcionar un método para controlar las líneas de la ciudad, algo que ellos hicieron con unos móviles y un sistema casero, que se ve que no era para tanto porque no lo han puesto a funcionar una vez en el gobierno local, ni siquiera provisionalmente que habría estado muy bien.

Viendo de nuevo la prensa leemos que en enero del 2019 el actual concejal del ramo, Rubén Arroxo, protagonizó junto a su compañera de gobierno Maite Ferreiro uno de esos espectáculos de campaña precintando “simbólicamente” un panel informativo aclarando que llegaron a eso “al no tener ningún tipo de utilidad para los usuarios del pésimo servicio de transporte que el gobierno local no mejora”. Me pregunto qué pasaría si algún concejal de la oposición, que también los hay muy dados al tema circense (aunque sin ensuciarse demasiado los zapatos) hiciera una acción similar para tapar los (por ahora) inútiles paneles informativos que hay en Lugo. Me vería venir los grandes aspavientos y los términos “fascista”, “antidemocrático” y demás.

Más allá de la anécdota les diré que me parece que los paneles son una magnífica noticia. Lugo necesita la mejora del servicio de autobús urbano como agua de mayo, y que nos acostumbremos a dejar el coche en casa. Pero para esto último es necesario lo primero, porque si no tenemos una alternativa razonable no hay posibilidad.

Les deseo los mayores aciertos en esto y que de aquí a unas pocas semanas podamos estrenar esas nuevas líneas y descongestionar el tráfico de Lugo.

miércoles, 7 de abril de 2021

Preocupantes cambios de tráfico para lograr un magnífico objetivo

La Mosquera peatonal suena muy bien, pero el Plan de Movilidad considera ese tramo como de la "red básica", lo que puede liar el tráfico en Lugo enormemente.

Ayer murió Hans Küng, un teólogo que se hizo famoso en su momento por cuestionar uno de los grandes dogmas de la Iglesia Católica: la infalibilidad del Papa, un principio que parece tan absurdo como irracional pero que ahí sigue, sustentado por una mera cuestión de cabezonería o de fe, según se mire.

Se supone que la Humanidad debería ir avanzando, y que nuestros líderes tendrían que abandonar ciertos usos y costumbres, como el de considerar que sus decisiones son inapelables y que ni siquiera se ha de contemplar la posibilidad de cometer un error, pero existen, vaya si existen, y con la que se avecina en cuanto a tráfico en Lugo a veces se ven venir a la legua.

El Ayuntamiento de Lugo ha anunciado la peatonalización del tramo de la Ronda de la Muralla frente a la Mosquera, una buena noticia para la ciudad porque vamos a recuperar este espacio para los peatones. El objetivo es ir conquistando terreno al vehículo rodado.

El problema no está ahí sino en los cambios de tráfico aparejados a esa decisión, y que en lugar de hacer una simple desviación por Mártires de carral, se complica haciendo que desde la calle Villalba los coches tengan que subir por Salvador de Madariaga (en mis tiempos más conocida por “la calle del BB+”), pasar por Dinán, bajar por Hermanitas y volver a la Ronda desde San Roque. El pifostio de tráfico que se va a montar es más que evidente, y más si tenemos en cuenta que la Ronda de la Muralla viene recogida en el vigente Plan de Movilidad como “un anillo de dos carriles y un solo sentido que funciona como un importante distribuidor del tráfico”.

En ese documento el tramo que se pretende peatonalizar se incluye dentro de la red básica, la más importante de todas y la que se ha de mantener a toda costa para garantizar la correcta fluidez de los vehículos. No se mantendrá, y no tengo muy claro (porque no se ha publicado estudio alguno que se pueda leer o incluso rebatir) cómo se ha llegado a esa epifanía viaria.

Por otra parte, no parece tener mucha lógica dar la vuelta al sentido del tráfico de las calles Ciudad de Vigo y Alcalde Ángel López Pérez, ya que para alcanzar destinos tan frecuentes como el aparcamiento público del propio Ayuntamiento, el de Plaza Constitución o la Estación de Autobuses se obliga a dar un enorme rodeo a los conductores, lo que generará una gran cantidad de contaminación atmosférica. Estamos hablando de que, por ejemplo para acceder al aparcamiento municipal del Seminario, un recorrido de apenas 100 metros, se multiplicará por nueve el trayecto, lo que no parece compatible con los criterios medioambientales y de sentido común que han de imperar en el diseño del tráfico.

Todos queremos dar por sentado que las decisiones de las instituciones están bien pensadas, con sus informes y sus estudios, pero en ocasiones parece que no es el caso. No hay más que recordar el lío que se montó el pasado año con la peatonalización provisional de la Ronda de la Muralla, una medida que hubo que revertir por el caos causado por la misma y que a día de hoy sigue causando problemas en el tramo que hay entre la calle Santiago y la calle Villalba sobre todo en horas punta de colegios y centros de trabajo, ya que incluso la señalización horizontal es confusa y provoca situaciones peligrosas.

No se ha explicado todo esto a nadie, se ha aprobado y listo. Choca con ese ejercicio de democracia vecinal que se vendió para peatonalizar Rafael de Vega, en que supuestamente se decidió entre los vecinos apoyar la medida. Aquí no han preguntado a nadie, cosa que hasta cierto punto comprendo (el que gobierna, gobierna) pero sí que habría estado bien reunirse con asociaciones y colectivos para escuchar sus puntos de vista. Se ve que el tema de la participación es intermitente, en función de si se puede prever el resultado o no…

Tal vez sería razonable que en lugar de hacer las obras a las bravas se hiciera una prueba previa, con balizas y señalización provisional que nos indique cómo va a fluir el tráfico una vez se hagan los cambios. Si todo va bien y tienen razón, pues estupendo, pero si no es el caso una vez metidas las piquetas y terminadas las obras será imposible volver atrás, y cuidado, no me refiero a la peatonalización sino a las medidas “complementarias” de la misma.

Nadie es infalible. Ni el Papa ni el Ayuntamiento. Al Garañón, la fábrica de la luz y demás meteduras de pata (todas ellas con sus informes y sus sellos de colores) me remito.