martes, 31 de agosto de 2021

Un calentón lo tiene cualquiera

Fotograma del "vídeo-escándalo". Fuente: El Progreso

Publicaba El Progreso una noticia en que explicaba que “Un vídeo de dos personas teniendo sexo en la muralla indigna a los lucenses”. Les diré que yo me considero lucense como el que más e indignado, lo que se dice indignado no estoy.

¿Que lo suyo sería buscarse un lugar más discreto? Por supuesto que sí. También es cierto que a las horas que aparentemente se grabó eso (no se puede saber, pero parece ser noche cerrada) no es que fueran a encontrarse con excursiones de colegios ni con visitas guiadas del Ayuntamiento.

No confundamos los términos, no es que aplauda ese comportamiento, pero ser demasiado tajante condenando estas actitudes, cosa que muchos hacen con sospechosa vehemencia, revelaría no sólo un puritanismo exacerbado, sino que en mi caso (y el de muchas más personas) sería un ejemplo terrible de hipocresía. Todos hemos hecho cosas que no debíamos y la diferencia es que no nos han pillado con un móvil.

De hecho, si les digo la verdad, me parece más sancionable el comportamiento de quien capta y difunde esas imágenes que la de la pareja que tuvo un calentón y se desahogó donde pudo. Insisto, no es que apruebe su acto, pero cuando la naturaleza grita salimos por donde podemos. Un calentón lo tiene cualquiera.

Mucho escándalo con una pareja que está a lo suyo y mientras tanto, rienda suelta a los botellones y demás que no sólo suponen una molestia para los vecinos sino un peligro sanitario en este momento. ¡País!

lunes, 30 de agosto de 2021

Una maravillosa actuación en la Piringalla

Han creado, donde había un espacio terrible, un precioso rincón en la zona de la Piringalla, con una fuente muy hermosa, obra de Francisco Pérez Porto, y una zona verde más que agradable.

Paseando por la zona de la Piringalla por fin me acerqué a ver la fuente das Lavandeiras, que han instalado junto a la plaza Viana do Castelo. Una magnífica actuación que convirtió una esquina olvidada, sucia y triste en un espacio magnífico para sentarse a disfrutar del sencillo espectáculo del agua corriendo, algo que en los días de calor se agradece enormemente.

La escultura es obra de Francisco Pérez Porto (https://www.facebook.com/francisco.perezporto.96), un artista al que no conocía pero al que hay que seguir porque si esta es una muestra de su trabajo me parece muy interesante. 

La intervención realizada por el Ayuntamiento de Lugo contó con la colaboración de la Diputación Provincial, que cedió la fuente cerámica, algo que realmente es un estupendo gesto por parte del ente provincial y que da al conjunto una personalidad que esperemos que no se carguen los amigos del destrozo con esa pericia que tienen para llevarse por delante los esfuerzos conjuntos para embellecer la ciudad.

Me ha gustado mucho el lugar, y sobre todo ver gente allí. Había bastante gente, muchas personas mayores en sillas de ruedas que deduje que venían de la vecina residencia de ancianos y que tienen en este lugar un estupendo sitio donde estar fresquitos a la sombra y disfrutar del aire libre, algo que volvemos a apreciar en los últimos tiempos.

La única pega que le veo al tema es la del coste. Tengo que reconocer que la economía no es lo mío, porque me cuesta muchísimo trabajo entender que asfaltar un terreno relativamente pequeño (unos 1.400 metros cuadrados) y ponerle un solado cueste casi 180.000 euros. Es curioso porque los costes de urbanización de un terreno andan por los 78 euros metro cuadrado (según las guías de costes que he visto por ahí), y aquí se paga cerca del doble sin ningún tipo de rubor. De hecho la guía de costes de referencia de la construcción emitida por el Colegio Oficial de Arquitectos de Granada (he buscado una de aquí pero no la he encontrado) reduce ese coste al 18% si sólo hay que pavimentar, al 22% en las zonas de acerado, el 30% si incluye alumbrado… lo que reduciría esos 78 euros por metro a unos 45. Aquí se han pagado aproximadamente 128 euros por metro… También puede ser que no lo interprete yo bien, que no es lo mío, pero oigan, parecer parece que es así la cosa.

Si consultan la guía verán esto en la página 7...

En todo caso, y a pesar de esas desviaciones de precios que jamás comprenderé en las obras públicas de Lugo, quiero quedarme con lo positivo y, en la medida en que les llegue el mensaje, animar a nuestras instituciones a dedicarse a estas pequeñas obras. Personalmente prefiero que mejoren cinco o seis rincones de la ciudad con actuaciones como ésta a que despilfarren un millón de euros en unas bañeras colectivas que todos sabemos que en unos años estarán abandonadas o en una pasarela ridícula que arranca en una isleta de una carretera nacional.


viernes, 27 de agosto de 2021

¿Por qué nadie quiere hacerse cargo de la cafetería de la vieja cárcel?

A pesar de las buenas vistas la cafetería no acaba de arrancar. Y no me extraña.

Cuatro años y medio después de haberse terminado la obra sigue sin uso. Disculpen, les aclaro de qué hablo que en Lugo esa frase se puede aplicar a varios entornos públicos en que se malgasta nuestro dinero sin ningún resultado de utilidad para la ciudadanía. Me refiero en concreto a la cafetería de la vieja cárcel.

La falta de conocimiento del sector y la ausencia del menor sentido común han hecho que se haya fracasado varias veces en la adjudicación de un espacio por el que, aparentemente, tendrían que darse de bofetadas ya que la estampa es de las mejores de Lugo. El problema no es la falta de belleza del lugar, aunque, si les digo la verdad, en mi opinión ese edificio no debería tener esa altura, sino que se tendría que haber recuperado su configuración original para dejar ver bien la parte central de la cárcel que es lo realmente bonito.

Cuestión de gustos. A mí por ejemplo me parecía más bonito el conjunto sin las alturas adicionales metidas el edificio de delante.

No, los problemas son muy diversos y, aunque algunos se han solventado como parte de la cuestión horaria y la creación de un acceso independiente, otros son los condicionantes dictados desde los despachos y alejados de cualquier intento de acercarse a la realidad diaria de un negocio de hostelería.

Para empezar en lugar de ligar el horario de funcionamiento al de cualquier otro local de hostelería en base a la licencia, se fija uno determinado de forma inexplicable: la 1:30 de la mañana, pero responsabilizando al adjudicatario de lo que pueda pasar entre las 12:00 y esa hora, algo complicado de asumir. Al menos han eliminado el absurdo requisito de tener que abrir todos los días del año.

También se meten en la carta. Hay que tener un menú del día, otro para celíacos, uno de agricultura ecológica y tener productos de comercio justo en la carta. Sacando lo del menú para celíacos, que es razonable, lo demás es una injerencia absurda que está destinada a incumplirse mientas la administración mirará para otro lado, como pasa en la cafetería del parque, en que se incumple el pliego de condiciones y nadie dice esta boca es mía.

El Ayuntamiento pretende hacer un pastiche entre cafetería y restaurante, olvidando que es de obligado cumplimiento seguir la normativa autonómica. Esta indica que un restaurante tendrá “zonas de comedor independientes”, cosa que aquí no se cumple, y define una cafetería como locales de un único espacio en que se sirva “una oferta de restauración sencilla y de ordinario a la plancha”. Tener los menús que exigen no parece la definición de “sencillo”.

El día a día de ese local va a ser complicado porque es un híbrido que ni es cafetería, porque se le exige cumplir condiciones de restaurante, ni es restaurante, porque el espacio es el de una cafetería. Un sinsentido que se salda con lo que vemos actualmente: un pozo negro de dinero público en que a la inversión inicial tenemos que sumar los 30.000 euros que el gobierno ¡presume! haber gastado en este lugar que sigue estando cerrado a cal y canto… y lo que te rondaré, morena.

Mientras el pliego no tenga sentido, y no lo tiene, seguirá ahí, durmiendo el sueño de los justos y con la cafetería vacía, como la del MIHL que jamás se llegó a ocupar. Sí, sí, el MIHL tiene un espacio pensado para cafetería, pero obviamente entre el nulo nivel de visitantes y que no está precisamente en un sitio muy accesible no se han atrevido ni a sacar la licitación. Lo que no se comprende es, entonces, para qué demonios se gastaron nuestro dinero en ese espacio, pero ya estamos acostumbrados. Por desgracia.

Ahora este espacio se usa para exponer, aunque el de atrás, donde iban las cocinas y demás, no se abre y entiendo que lo usarán de almacén o algo así...

jueves, 26 de agosto de 2021

Alternativas si nos quedamos sin las habituales casetas del pulpo en San Froilán

El pulpo es, sin duda, el rey del San Froilán. Foto: Cadena SER

Una de las señas de identidad de nuestras fiestas patronales está en peligro. Tres de los cuatro históricos locales que ponían sus puestos para el pulpo (Ramiro López, Ana Núñez y Nacho Carballeira) ni siquiera han presentado solicitud y el cuarto de los habituales, Juan Pazó, indica que su instancia no garantiza que finalmente vaya a montar. La situación es más que incierta y las condiciones que pone el Ayuntamiento son inasumibles para seguir con un esquema que a día de hoy es insostenible.

Quizá la solución pase por retomar la idea inicial de lo que debería ser el pulpo de las fiestas y reducir a la esencia un montaje que se les ha ido de las manos. Hace ya años que las casetas del pulpo son de todo menos casetas. Se han convertido en restaurantes temporales, montados con un lujo y un boato bastante alejado del concepto de “carpa” que tenían inicialmente. Bien es cierto que las cosas evolucionan, pero tal vez en algunas cuestiones deberían mantenerse como eran sobre todo cuando se supone que son instalaciones de una feria.

El problema de fondo no se solventaría, y que los aforos son exactamente los mismos en un interior que en una carpa que esté cerrada por más de dos laterales, pero sí reduciría notablemente los costes como es lógico. También ayudaría a que, si el tiempo acompaña, se puedan abrir los laterales (es más fácil con una lona que con un tabique de madera) y convertir ese interior en un exterior, lo que permite ampliar la capacidad de atención al público con seguridad.

También sería lógico que se permita a la hostelería que está todo el año pagando sus impuestos en sus ubicaciones estables y que están sufriendo una crisis terrible instalar calderos temporales para cocer el pulpo. No es que no puedan hacerlo en sus cocinas, claro que tienen esa capacidad y la mayoría con exquisitos resultados, es que es más bonito y llamativo si se hace en el exterior. Entre todos podrán hacer que esta tradición se mantenga sin problema alguno durante estos años tan complicados.

Lugo y el San Froilán son en gran parte su pulpo, igual que Valencia es sus paellas, Mallorca sus ensaimadas o Guitiriz su torta de maíz.


EDICIÓN:

Leo en la prensa de hoy que el Ayuntamiento ya ha autorizado lo que se decía en el penúltimo párrafo, la posibilidad de instalar calderos en los locales de la ciudad. Buena falta van a hacer porque finalmente el concurso ha quedado desierto y no se ha presentado ninguno de los habituales ni nadie nuevo... Las condiciones no eran las adecuadas.

miércoles, 25 de agosto de 2021

Arqueolucus, una web interesante pero insuficiente

Una de las cosas que más me avergüenza como lucense es no tener una página web de turismo. Es chocante que cualquier pequeña población tenga un espacio dedicado a promocionar sus atractivos pero una capital de provincia como la nuestra no cuente con algo por el estilo.

Se han gastado ingentes cantidades de dinero en poner en marcha varias páginas, aplicaciones y demás chilindradas que no sólo tuvieron un éxito más bien discreto (salvo el titular del día, que en realidad era lo que se buscaba) así que por presupuestos no será. Alguien debería investigar a dónde fue todo aquel dinero y por qué ninguna de esas páginas está en activo a día de hoy. Ni la primera.

Lo más parecido que podemos tener a algo digno de enseñar es una página que ha sobrevivido a la quema, y que bajo el dominio www.arqueolucus.gal te permite conocer parte del patrimonio arqueológico lucense, incluyendo hasta modelos en 3D de algunas de las piezas más relevantes de nuestro depósito. También te puedes descargar algunos folleos en PDF, que aunque no sea precisamente la tecnología más puntera del mundo puede servir para salir del paso.

 

Llama bastante la atención que la web redirige a otras de empresa privadas continuamente, lo que se puede ver positivamente como una cuestión de “sinergias”, esa palabra que tanto gusta cuando no se sabe muy bien cómo justificar algunas cosas, y negativamente como que no nos queda otro remedio porque con los recursos públicos en Internet vamos flojitos. También es curioso que aunque la web esté en castellano y en gallego (a elección del visitante) bastantes partes están únicamente en gallego, lo que se podría justificar hasta cierto punto en que la página no es exclusiva para turistas, aunque siendo de lo poco que hay no nos vendría mal.

Con el sentido de la oportunidad que tiene este Ayuntamiento lo más probable es que gasten otra fortuna en hacer una nueva página, que anunciarán a bombo y platillo en la ciudad (porque recordemos que la materia turística en Lugo se enfoca a la captación del voto y no del visitante), que inaugurarán justo antes de las elecciones de 2023 (es decir, una vez hayamos pasado el Xacobeo 2021 y su extensión a 2022, una oportunidad perdida), y que en un par de años dejará de funcionar, como todo.

Incluso esta página, arqueolucus.gal, lleva un par de años sin actualizarse, desde marzo de 2019 (recuerden que las municipales fueron poco más tarde, algo que influye mucho en estas cosas) y el blog al que remiten tuvo su última entrada en esa fecha. Tampoco es que tuviera muchas más, siete en total si no he mirado mal.

El número de visitas (59) desde 2019 no es que sea para tirar bombas...

La página es muy interesante desde el punto de vista del tratamiento de la actividad arqueológica local, e incluye piezas en 3D que puedes girar a capricho, lo que realmente es muy chulo. Como página web de un colegio que hiciera prácticas con sus alumnos sería maravillosa. Como único recurso turístico oficial de Lugo… es una vergüenza.

martes, 24 de agosto de 2021

Por qué el pasaporte Covid no ha funcionado

Hay que ver lo difícil que es encontrar un certificado falso en Internet... (entiéndase la ironía)

No tengo la menor intención de seguir dando vueltas eternamente a un tema que ya está liquidado por los juzgados, pero a la vista de que se sigue insistiendo en su necesidad (a pesar de haber sido declarado ilegal) sí creo que es necesario puntualizar ciertas cosas sobre el famoso “pasaporte Covid” y su inutilidad, al menos en este santo país en que sabes que el otro toma las uvas de tres en tres porque “comía yo dos a dos y callabas”.

Para empezar, les diré que no tengo la menor duda de que muchas personas consideran de buena fe que esta herramienta es algo útil y necesario, permitiendo en teoría disfrutar de la tranquilidad de saberse en un entorno seguro. Pero es que ese es precisamente el problema, que dicha sensación es totalmente falsa. No hay más que ver los titulares en que se nos indica que los contagios han aumentado alarmantemente en varios puntos de la provincia de Lugo (por ejemplo en la residencia de mayores de As Gándaras o en Monforte de Lemos), justo durante los días de vigencia de la medida.

Empecemos por decir que, aunque yo enseñe en el móvil un documento con unos códigos que certifican que estoy vacunado, dicho papel no tiene por qué ser mío, ya que no se pedía el DNI para acreditar su titularidad. E incluso aunque se pidiera, es sencillísimo de falsificar ya que no hay un respaldo telemático de ninguna clase. Les pongo de ejemplo uno emitido a nombre del Kaiser Guillermo. Con esto ya cae por la base. Si cualquier mendrugo con unos mínimos conocimientos de informática puede trucar el certificado el sistema pierde toda validez ya que precisamente los que tienen pocas luces son los que cometerán más imprudencias.

Pero el problema va más allá. Supongamos por un momento que sí, que se crea un sistema para estar seguros de que el certificado es auténtico y que corresponde al titular… ¿se les ha ocurrido pensar que los vacunados podemos contagiar la enfermedad a terceros, aunque no la suframos o al menos no en tan alto grado? Si mezclas personas vacunadas con otras con PCR negativa estás poniendo en peligro a los segundos, que pueden entrar “limpios” y salir con el bicho, sobre todo porque como decíamos antes se crea una falsa sensación de seguridad que hace bajar la guardia y ser menos precavido.

Por otra parte, existe una discriminación inaceptable para aquellos que NO HAN PODIDO vacunarse. Lo pongo en mayúsculas por si no queda claro. No hablo de quienes no hayan querido vacunarse, que es otro debate que habrá que afrontar en un futuro no muy lejano. Si tenemos en cuenta que la vacuna, como decíamos, no impide el contagio sino que reduce los efectos de la enfermedad, tampoco parece muy lógico marginar a quien haya optado por no vacunarse, ya que las consecuencias las sufrirán ellos mismos. Pero en este momento el debate ni siquiera es ese, es el de quienes no han podido acceder al pinchazo y me preocupa que la normativa ilegalizada dejaba fuera de los locales a un montón de gente que no había elegido no ponerse las vacunas. Eso marca una diferencia importantísima a mi modo de ver.

Verán que aún no hemos tocado cuestiones más filosóficas como los derechos a la intimidad, a no difundir datos médicos (he leído por ahí que hay quien dice que un certificado de vacunación o de haber pasado el Covid no es un dato médico… supongo que el suyo lo firma un mecánico de aviones)… que pueden ser un motivo de peso aunque comprendo que más “atacables” en un momento de crisis como el actual. Lo malo es que estos momentos de crisis en que se piden medidas excesivas son los mismos que suelen acabar mal. Nadie empieza tomando medidas salvajes, se comienza dando pequeños pasos y toda cadena comienza con el primer eslabón. Hay que estar atentos para evitar males mayores, si bien reconozco que la línea es muy fina porque estamos en un momento delicado que exige esfuerzos extraordinarios.

Dejo para el final el aspecto político de la cuestión.

He recibido invitaciones para reunirnos con los dos partidos de la oposición a nivel autonómico. Tanto BNG como PSOE han cursado sendas citas para conocer “de primera mano” el punto de vista de nuestra reclamación, algo que tiene su guasa al hacerse cuando ya se ha ganado. Habría estado bien recibir apoyo cuando nos estaban zurrando hasta en el carnet de identidad y no ahora, que la justicia nos ha dado la razón de una forma tan aplastante. ¿A quién beneficia ahora esa foto? ¿A los partidos políticos que no movieron un dedo en este asunto?

He de hacer mención aparte al señor Gonzalo Caballero, un oportunista que sale en los medios a decir que a la Xunta de Galicia se le ha aplicado un importante correctivo (en lo cual tiene cierta razón) pero olvida mencionar que al Gobierno de España que encabeza su partido le han ilegalizado nada menos que un estado de alarma… por el momento. No se puede argumentar de forma tan sumamente grosera.

En fin, confío en que con todo esto quede claro que la petición de certificados de vacunación o PCR negativa no sólo no era legal sino tampoco racional. “Es que en otros países se usa” no me vale como argumento, porque este no es “otro país”, este es el que ha inventado una palabra para disimular sus trapacerías: se les llama “picaresca”.

Confío en poder dejar este tema a un lado en el futuro y volver a lo que es la naturaleza de este blog: Lugo.


lunes, 23 de agosto de 2021

¿Y ahora qué?

El TSJG ha dictaminado que el llamado “pasaporte Covid” no sólo es ilegal, sino que no ha servido para nada. Su único resultado ha sido volver locos a todos, invadir los derechos fundamentales de los clientes, imponer una exigencia más a los hosteleros, hacerles perder clientes y poner en riesgo la salud de los trabajadores no vacunados y los clientes con PCR negativa porque se les mezcló con personas que pueden transmitir la enfermedad bajo una falsa sensación de seguridad.

Mientras todo esto ocurría, los principales representantes del sector, los que comparten mesa con la administración, en lugar de plantear las lícitas dudas que le surgían a cualquier persona con dos dedos de frente se dedicaron a aplaudir con las orejas y denostar e insultar a todos quienes osábamos poner en duda sus criterios.

Es comprensible, no es fácil decirle que no tiene razón a quien te paga las facturas a través de generosas subvenciones. Es menos razonable que los asociados de esas entidades sigan tragando con eso, pero allá ellos.

Lugo Monumental no recibe subvenciones, lo que nos da una independencia de la que no gozan otras entidades. Quizás eso es lo que pone tan nerviosos a algunos: que una modesta asociación de barrio, que para ir al juzgado ha tenido que recaudar los fondos entre los locales interesados, les haya vencido con la fuerza de la razón y los argumentos, sin exaltarse ni insultar a nadie a pesar de los furibundos ataques recibidos.

Hemos hecho lo que debíamos, e incluso aunque hubiéramos perdido eso sería así, pero hemos ganado. Otros han puesto en riesgo a los trabajadores de la hostelería y al público pero les da igual. Seguirán durmiendo igual de bien, o mejor, mientras el dinero público siga llegando.

Artículo publicado en La Voz de Galicia del 21 de agosto de 2021

jueves, 19 de agosto de 2021

Carta abierta a los hosteleros de Galicia

Foto: La Voz de Galicia

Estimados lectores:

Como les he insistido en varias ocasiones este blog es mío, personal, y no el medio de comunicación de ninguna entidad a que pertenezca. Sin embargo también les he mencionado en ocasiones que lo uso para recopilar las publicaciones que haya podido hacer en varios medios aunque sea en ejercicio de una responsabilidad.

Por esto, y dada la importancia del tema, permitan que salga de mis vacaciones puntualmente para incluirles esta carta abierta a los hosteleros de Galicia que se publicó en La Voz de Galicia el día 18 de agosto de este año.

Muchas gracias por todo.

 

Carta abierta a los hosteleros de Galicia

Tras la impugnación que presentamos desde la Asociación Lugo Monumental, completada por otra que firmaron varios compañeros de Santiago, el TSJ de Galicia ha puesto fin a la obligación que se os impuso de pedir el certificado de vacunación o prueba PCR. Comprendo el enfado y la preocupación de los que veis cómo se han incrementado las restricciones tras el fallo del Tribunal, pero la cuestión es que el debate se asienta en bases erróneas.

Llevamos semanas leyendo y escuchando que sólo había dos posibilidades: o consentir la aplicación una imposición que se ha demostrado ilegal o aplicar restricciones más duras en vuestros locales, discriminando arbitrariamente más aún al ocio nocturno incluso en espacios al aire libre.

No es necesario entrar a razonar que una persona vacunada puede transmitir el Coronavirus a los que entraban con PCR negativa. Tampoco hemos de hablar de la falsa sensación de seguridad que se creaba, de los derechos fundamentales afectados o de la discriminación que se producía a grupos que no se han podido vacunar por el momento, entre los que puede que esté  parte de vuestro propio personal. Nada de eso está sobre la mesa porque la cuestión es más simple: era una medida ilegal. No se ha impuesto un criterio minoritario por argucias políticas o convenciendo a más gente en una encuesta creada a medida: los tribunales lo han invalidado lo que cierra toda discusión.

Una vez aclarado eso, la administración ha optado por endurecer las restricciones. Estamos convencidos de que lo hacen de buena fe, pensando que es lo mejor para todos, pero no estamos de acuerdo. La hostelería es segura, sobre todo en exterior donde no tiene la menor lógica limitar aforos si se siguen normas como las de distanciar las mesas. Cualquier entorno tiene riesgo si todos y cada uno de nosotros no ponemos de nuestra parte.

Pensad en esto: cuando se producen brotes en el botellón se castiga a la hostelería. Cuando surgen en entornos privados se castiga a la hostelería. Cuando no se tiene claro de dónde ha surgido… se castiga a la hostelería. ¿Por qué las asociaciones más representativas, las que tienen la capacidad de dialogar con la administración, transigen con esta inaceptable actitud, con esta criminalización del sector? ¿No estáis cansados de que se os impongan reducciones pero no se actúe con firmeza contra los comportamientos incívicos de otros, que se reúnen a plena vista de todos sin las menores medidas de seguridad y que son los focos de los brotes?

La administración debe reflexionar sobre el contrasentido que supone limitar la hostelería, empujando a la población a reunirse en entornos menos seguros sin control alguno, y animar a la juventud a no acudir a vuestros locales con lo que irán al botellón, algo que se les ha escapado de las manos a todas luces. Pero esas reflexiones sólo las harán si el sector se las plantea, si une para reclamar un trato justo.

Habéis gastado dinero en adaptar vuestros locales, habéis preparado a vuestro personal, habéis hecho un esfuerzo titánico y grandes sacrificios durante más de un año pero en lugar de agradecéroslo se os penaliza porque algunos no hemos tolerado una medida ilegal.

Tiene que haber límites. Hay que cumplir las órdenes que sean necesarias para contener esta pandemia, hay que hacer un esfuerzo conjunto porque aquí no se trata de elegir entre salud y economía sino de alcanzar juntos un compromiso por la sociedad… pero la hostelería no debe tolerar seguir siendo el chivo expiatorio. ¿Os sentís culpables de lo que está pasando? Si la respuesta es “no”, no toleréis que se os siga tratando como tales.

La nuestra es una pequeña asociación de barrio y no aspiramos a que quien toma las decisiones se siente a hablar con nosotros, pero sí lo hacen con quienes ostentan la representación mayoritaria. Ahora sólo falta que el mensaje que trasladen sea una verdadera defensa de la hostelería.

Sin duda alguna, os lo habéis ganado.

Luis Latorre Real
Presidente de la Asociación Lugo Monumental

Carta publicada en todas las ediciones de La Voz de Galicia del día 18 de agosto de 2021