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martes, 29 de junio de 2010

Números del Arde Lucus

La concejala Rosana Rielo acaba de decir que 460.000 personas vinieron al Arde Lucus y que dejaron 10 millones de euros en la ciudad. Una sencilla división nos dice que, según el Gobierno local, cada visitante gastó 22 euros en la ciudad de media, es decir, que se tomaron unos vinos y unas tapas y ni se quedaron a dormir.

En cualquier caso, me gustaría que los miembros del Gobierno recordasen que tanto el Nou Camp como el Santiago Bernabeu tienen capacidad para unas 90.000 personas. Es decir, que según las cifras del PSOE en Lugo han estado cinco veces cualquiera de los dos estadios al máximo. Difícil de creer, cuando en el acto con más público, el del Circo Romano, había unas 10.000 personas contando las cinco mil de las gradas y otras tantas (dando una cifra generosa).

Nadie duda de la masiva afluencia al Arde Lucus, ni del éxito de la iniciativa. Es una de las grandes citas “festeiras” de Galicia por derecho propio, y además está muy bien elegida la fecha, ya que se está convirtiendo en la fiesta de inicio del verano, pareja al San Froilán, que es la de cierre. No se entienda un ataque a una fiesta que disfruto como todos los lucenses, sino un intento de racionalizar cifras.

Al público esos números ya no le extrañan, pero tampoco se los creen. Cuando se habla de tres millones de manifestantes según la organización y cien mil según las autoridades tendemos a hacer la media, tirando un poco hacia nuestras simpatías. Las autoridades se han ganado a pulso esa desconfianza, que se extiende a muchas más áreas que las de contabilización de asistentes.

No me creo lo de las 460.000 personas y mucho menos lo de los diez millones de euros, pero bueno, así venden que hubo más gente aún que en 2009, lo que el sentido común niega.

miércoles, 23 de junio de 2010

Pagar peajes en las autovías

Cuando alguien pregunta la diferencia entre una autopista y una autovía el común de los mortales sabemos que una es de pago y la otra no. No sé qué más diferencias hay, pero en lo que a práctica se refiere, ninguna.

El lucense José Blanco, Ministro de Fomento, acaba de abrir el melón del cobro en autovías, con lo que evidentemente se va a armar la del pulpo. La antes negada y ahora minorada crisis, de la que "hemos pasado lo peor" cada dos o tres meses, afecta a todo y todos. La congelación de las pensiones no es tal, ya que la subida de impuestos, empezando por la del IVA afecta también a los jubilados, con lo que con el mismo dinero podrán comprar menos cosas.

Lugo está comunicado por autovía con los entornos de Madrid y La Coruña. Digo entornos porque para llegar a la capital de España hay que pagar unos 8 euros de peaje del túnel de Guadarrama, y para llegar a La Coruña también se abonan unos euros (menos) por los últimos 16 kilómetros.

Ahora dicen que están en obras, desde tiempos de Marco Aurelio, los tramos de la autovía a Santiago y a Orense. También se supone que está "en marcha" el proyecto de autovía a Sarria y Monforte.

¿Los ciudadanos seguiremos pidiendo ahora autovías? Si hay que pagar peaje, ¿estamos dispuestos o preferimos vías rápidas? En la tesitura de optar por un carril gratuito o dos de pago no tengo muy clara cuál será la reacción popular.

En mi caso lo tengo claro: prefiero la autovía de peaje (es decir, autopista), pero preferiría que Fomento no gastara los cuartos en anuncios a página completa en la prensa y no nos los cobraran al circular por las carreteras que han pagado con nuestro dinero.

martes, 22 de junio de 2010

Propuestas y torpedos

Hoy el periódico recoge que el alcalde Orozco acusa a Jaime Castiñeira (portavoz municipal del PP) de querer entorpecer las obras de la ciudad por motivos políticos. Esto viene a colación porque Castiñeira propuso que, al remodelar la calle San Marcos, se aprovechara para hacer un parking subterráneo, cosa que ha sido muy bien acogida por diversos colectivos de la ciudad.

Ahí está el problema. Que fue bien acogido. Si la idea hubiera partido del propio Orozco no sería un intento de torpedear, sino una "mejor sustancial del proyecto", pero claro, escuece un poco cuando el que hace la propuesta es el del otro lado, y más si encima empieza a recibir apoyos ciudadanos y de asociaciones.

Orozco no está abierto a ideas, aunque sean buenas, si no son suyas. No tengo una estadística sobre ello, pero es probable que sea el único alcalde que rechazó en un pleno que su ciudad contase con un Parador Nacional de Turismo. También se posicionó en contra de pedir que el Arde Lucus fuera declarado Fiesta de Interés Turístico. Hay muchos más temas incomprensibles, pero estos dos me parecen lo bastante simbólicos como para ilustrar el argumento.

El Alcalde confunde su papel institucional con un cortijo. Aunque gobernara con mayoría absoluta, que no la tiene, es de suponer que una democracia y una dictadura tienen más diferencias que la de elegir a la cumbre de la pirámide. Teóricamente debería traducirse en unas actitudes más plurales y en debates de argumentos, no en "no, porque lo dijiste tú antes que yo".

Las medallas que se quieren colgar algunos son legítimas, pero no a costa de arrancárselas a quienes las merecen.

viernes, 18 de junio de 2010

Lógica ilógica

El Bloque está desnortado, sobre todo desde que perdió su mitad de la Xunta. Parece que intentar relajar sus postulados de máximos se le está volviendo en contra electoralmente, con lo que vuelve a sus orígenes, a aquel Bloque que se posicionó contra la construcción de la A6 porque decía que era una "navallada" a Galicia.

Leo atónito el artículo publicado en El Progreso de ayer día 17 y firmado por Antón Bao, en contra de la existencia de las diputaciones provinciales. Me parece una opinión defendible y estoy abierto a ese debate, pero me pasma que quien eso escribe cobre su sueldo todos los meses nada menos que como Vicepresidente de la Diputación Provincial de Lugo. Esto responde al cada vez más acusado Marxismo del BNG, pero no al de Carlos, sino al de Groucho. El señor Bao parece que no quiere que exista el club que le ha admitido como segundo al mando.

Es como mínimo peculiar que quien hace campaña para presidir una institución, aunque se quedara a medio camino, pida que ésta desaparezca. No tendría mucho sentido que Zapatero abogara por el fin del Estado, aunque a veces lo parezca, o que el Rey de España defendiera la República. Feijóo no reclama la disolución de las Comunidades Autónomas, y el Presidente de la Asociación de Productos Reciclados del Automóvil tampoco pide el fin de la Asociación de Productos Reciclados del Automóvil.

Bao afirma que es una cuestión de coherencia el pedir la disolución de las Diputaciones aún cogobernando una de ellas. El diccionario de la RAE nos dice que la primea acepción de "coherencia" es "la conexión, relación o unión de unas cosas con otras". En ese sentido sí es cierto, ya que no hay nada más relacionado con una institución que gobernarla. En cuanto a la segunda acepción del diccionario, "actitud lógica y consecuente con una posición anterior", ya es más discutible.

¿Cómo se puede defender el gran papel que el BNG dice estar haciendo en la Diputación con el argumento de que son instituciones inútiles? El refranero dice que no se puede estar en misa y repicando, y menos aún dar la misa aunque sea como monaguillo y querer derribar la iglesia.

jueves, 17 de junio de 2010

Tenemos rastrillo nuevo en la ciudad

Hace unas semanas Lugo estrenó su flamante nuevo rastrillo de antigüedades. Viene a sustituir el que había en la Plaza de la Soledad, de donde se sacó, según el señor Orozco, porque estorbaba al paso de los lucenses, entre otras razones igual de creíbles.

Todos los que somos aficionados a perder el tiempo en este tipo de mercadillos estamos de acuerdo con que el viejo rastrillo tenía una serie de problemas, derivados sobre todo de la dejadez del Ayuntamiento en el tema del control y la vigilancia.

rastrillo1 Los puestos “informales” vuelven a las andadas. Era uno de los motivos alegados por Orozco para el cambio de normativa.

 

 

 

Ni los precios estaban marcados en la mayor parte de los productos, ni tenían las licencias a la vista, ni se sabía de dónde salían muchas de las cosas vendidas (sobre todo las de los "puestos" de los gitanos).

En cambio ahora las cosas han cambiado mucho, salvo algunos pequeños detalles: Ni los precios están marcados en la mayor parte de los productos, ni tienen las licencias a la vista, ni se sabe de dónde salen muchas de las cosas vendidas (sobre todo las de los "puestos" de los gitanos). Ah, pues no, no han cambado tanto.

Lo único que realmente refleja un cambio es en la ubicación del rastrillo. Antes estorbaba al paso en la Plaza de la Soledad según Orozco. Ahora no estorba, aunque ocupe prácticamente toda la zona transitable de los soportales de la Plaza de España (lo siento, lo de Plaza Mayor me suena fatal) y cuando llueve no quepa la gente ni pueda andar sin mojarse. Encima, como no caben todos los vendedores, algunos se ven separados del pelotón y montan sus puestos en la Plaza del Campo, donde no se comen una rosca los pobres. Tanta modificación de la normativa no ha logrado solucionar los viejos problemas, y ha creado otros nuevos.

También hay un cambio estético: ahora los vendedores lucen unos magníficos manteles con publicidad del Ayuntamiento de Lugo, que parecen haber sido la única razón de todo este trasiego: poder poner el logo, que las elecciones se acercan.

rastrillo2

 

 

 

Los puestos ahora se reparten entre la Plaza de España y la Plaza del Campo, quedándose estos últimos descolgados.

martes, 15 de junio de 2010

El Bloque se echa al Segade

El BNG, que todos percibimos como un partido político único pero que en realidad es un "frente" de varias agrupaciones, acaba de apuñalar democráticamente a Xosé Anxo Lage, a día de hoy portavoz municipal del Bloque en el Ayuntamiento de Lugo.

Era un movimiento bastante previsible, ahora que el Bloque asume como única hipótesis de trabajo la de que Orozco pacte con ellos para poder pisar la suave moqueta del Gobierno Local de Lugo. La breve simpatía mutua que sienten el aún portavoz nacionalista y el aún alcalde de Lugo es pública y notoria, y sin duda es un obstáculo más que importante para un eventual pacto post-electoral.

Lage ha marcado con hierro candente al Gobierno Local durante estos años, en que ha ejercido una dura pero inteligente oposición con una actitud torpedeada muchas veces por sus propias siglas. Haciendo un aparte personal he de decir que es una persona que me cae francamente bien. Está convencido de sus ideas, pero eso no impide que mantenga una conversación más que educada con personas que no comulgan con ellas. Debería ser así, pero no es lo habitual, y menos en formaciones con ocasionales tintes radicales. Lugo lo echará de menos.

Volviendo a la lectura política, es una obviedad que Orozco va a seguir sangrando votos, y más ahora con la que le está cayendo a su partido a nivel nacional y sin el mecenazgo de la Xunta. Esto último afectará aún más al BNG, cuya campaña va a estar orientada exclusivamente a que el PP no gane por mayoría absoluta en el Ayuntamiento de Lugo. Su única oportunidad de controlar alguna concejalía es asociarse con un PSOE debilitado y que previsiblemente quedará segundo tras el PP.

Ahora se hace más patente que Jaime Castiñeira necesitará la mayoría absoluta para gobernar. El Bloque de Bao nunca pactará con el PP, pase lo que pase, aunque tenga que tragar el sapo de llegar a un acuerdo "progresista" con Orozco, al que lleva poniendo verde tres años, como se recoge en las actas de los plenos.

En definitiva, es una muy buena noticia para el PSOE. El BNG de Lugo se echa al monte (Segade) y allí estará esperándole pacientemente el hábil Orozco. Falta saber si también hay votantes entre los pinos y otros árboles nacionalistas.

lunes, 14 de junio de 2010

Los denarios del Arde Lucus

Denario Arde Lucus2 La Cohors Lucensium, responsable del vistoso campamento romano que año a año adorna la Plaza de España de Lugo en el Arde Lucus, ha puesto en circulación 3.000 denarios para la edición 2010. Les auguro poco tiempo en la calle. No son muchas y es un recuerdo original y barato - que en esta época cuenta mucho - de una fiesta popular y exitosa.

Lo que me llama la atención es que esta actividad, junto a todas las demás que Cohors Lucensium y muchos esforzados comerciantes de Lugo están desarrollando, demuestra que los principios del liberalismo se mantienen en pie. La iniciativa privada, aunque muy anestesiada en nuestro país por la cultura de la subvención, sigue probando que es creativa y que, si se le permite, es capaz de poner en marcha casi cualquier proyecto.

Lo privado tiene, además, una gran ventaja sobre la administración y es que su cabeza visible no es un político que tiene que rendirse a los votos y a lo "correcto": su leit motiv es el beneficio. Alcanzar ese beneficio obliga al empresario a buscar lo que el público realmente quiere, no lo que dice querer. En las encuestas todos decimos ser mucho más perfectos de lo que realmente somos y ya sabemos que en política las encuestas pesan más que la ideología o incluso que el sentido común.

Inmersos como estamos en una crisis de la que aún no vemos la salida, es arriesgado defender la iniciativa privada, a la que interesadamente se ha culpado de todos los males, pero no queda otra. El fracaso del comunismo sólo era cuestión de tiempo, aunque nadie en su sano juicio defiende hoy un liberalismo salvaje como tampoco se puede abogar por el intervencionismo puro. Hay que buscar una "entente cordiale" que equilibre el bien común teóricamente defendido por el Estado y la libertad individual o la iniciativa privada, que ha demostrado ser la que crea riqueza.

Volviendo a donde empecé, que es un ejemplo muy válido, los denarios romanos tendrán un éxito asegurado. ¿Tendrían el mismo si dependiera del Ayuntamiento la organización del chiringuito? Probablemente no, y encima la campaña publicitaria que los difundiera nos costaría más a los lucenses que fabricar las monedas, que seguro que salían carísimas.

jueves, 10 de junio de 2010

La reverencia

Nuestro Presidente del Gobierno visitó ayer al Papa, con el que mantuvo una audiencia privada a puerta cerrada. ¿De qué hablarían? ¿De la retirada de los crucifijos? ¿Del dudoso futuro de la Iglesia en los centros educativos públicos? ¿De la retirada estratégica del Ejército de las procesiones religiosas? ¿De la nueva ley del aborto?

Personalmente siempre he defendido una separación clara entre Iglesia y Estado, pero creo que si fuera PresidenReverenciate del Gobierno y tomara esas medidas no me iría a ver al Papa para hacerme una foto con él en el Vaticano. Otra cosa es que cuando Benedicto XVI venga a España en Noviembre el Gobierno vaya a recibirlo a Santiago, por respeto a los millones de católicos que hay en nuestro país, y como Jefe de Estado que es. De hecho lo suyo sería que viniera a recibirlo El Rey Don Juan Carlos.

Lo que sorprende es que quien ha demostrado un breve respeto mediático por la Iglesia vaya a rendir pleitesía a domicilio, y se despida de su interlocutor con una reverencia. Eso revela que, a pesar de lo que dice, Zapatero no cree que el Papa sea un Jefe de Estado más. No lo veo haciendo reverencias a Sarkozy, Merkel o a Obama, aunque hacia este último ganas no le faltarán. 

No me parece mal la reverencia, pero me parece incoherente, aunque quizás peco de iluso al esperar algo diferente de nuestro actual Presidente del Gobierno.

miércoles, 9 de junio de 2010

La placa

Auxilia Lugo lleva ya tiempo reclamando un ascensor para que las personas con problemas de movilidad puedan subir a la Muralla Romana de Lugo. Se propone para su ubicación la de los jardines de la Diputación Provincial, donde el presidente de esta entidad ya se ha apuntado a decir que apoya la iniciativa.

Vamos a ignorar por un momento la agresión física y estética que supondría que a un monumento cuasi-bimilenario le planten un probable espanto de acero y cristal; la historia no nos permite ser optimistas respecto al buen gusto de nuestros administradores en este sentido.

Aún no teniendo en cuenta ese importante aspecto, hay que preguntarse hasta qué punto es práctico poner un ascensor en esa ubicación. Lugo es una ciudad en que estamos acostumbrados a que todo esté a mano. La calle San Marcos está céntrica, pero para llegar a los jardines hay que dar un rodeo que a una persona que esté en silla de ruedas o ande con dificultad le puede suponer un problema.

Hay una solución mucho más sencilla, que es aprovechar uno de los múltiples edificios abandonados o ruinosos que están adosados a la Muralla. La Plaza del Campo Castillo cuenta con varios candidatos a albergar este ascensor, que estaría céntrico y quedaría oculto por el propio edificio. De paso se podría alojar también una oficina de turismo que permita eliminar de una vez el adefesio enquistado frente a la estación de autobuses, esa caseta metálica que siempre nos hace pensar que hay obras en la zona. Quizás esa sea su función.

Sin embargo, dudo mucho que alguien tenga esto en cuenta, porque su principal problema es la placa: No tiene visibilidad. Aquí gustan las obras vistosas, a las que se puede poner una placa bien grande con los nombres de los firmantes, y que llamen la atención, aunque sean poco prácticas o no cumplan su función. Pero lo importante es la placa.

martes, 8 de junio de 2010

Ciudadanos y votantes

El fracaso de la huelga del sector público recogido en la portada de hoy de La Voz de Galicia, viene a confirmar un runrún que desde hace ya tiempo el CIS refleja en sus encuestas: tras una etapa de cese temporal de la convivencia, ya podemos hablar de divorcio entre la sociedad y sus llamados representantes a todos los niveles.

El español medio está harto de tantos políticos que sólo abren la boca para decir obviedades, eso sí, sin salirse del carril de lo políticamente correcto, de sindicalistas que llevan años anestesiados y que ahora retoman la pancarta porque ven peligrar sus subvenciones o sus sueldos, hasta de los presidentes de asociaciones que llevan décadas manejando lo común como si fuera su cortijo.

Comprensible hartazo que desde hace años se ha buscado a pulso. El peligro es que éste es el típico momento en que surge un salvapatrias, una figura con un discurso hueco pero lleno de sentido común y al que el pueblo se aferra como a un clavo ardiendo, pero que no suele ser más que un espejismo que acaba organizando campos de exterminio o afirmando que el pollo crea homosexuales.

Es difícil, en una situación como la actual, romper una lanza a favor de los muchos políticos, sindicalistas y presidentes de asociación honrados que hay, porque haberlos haylos. Existe una vocación de servicio público real, personas que se esfuerzan en intentar ayudar a la gente o hacer cosas positivas, pero éstos no llenan los titulares, o al menos los tipos de letra no son tan grandes, y por desgracia no suelen ser tampoco, con honrosas excepciones, los que sus organizaciones eligen para cabezas de cartel.

España lleva treinta años de Constitución. No son muchos, y ahora estamos en ese momento en que todas las jóvenes democracias se consolidan o se convierten en una república bananera. Pasados los tiempos del idealismo que se generó con la nueva libertad y que dio grandes figuras en los 80, caímos en el dulce pasotismo intelectual que se conformaba con consignas y subvenciones, sin ser conscientes de que es importante rascar un poquito más.

Es el momento de ser subjetivos, de que tomemos conciencia de nuestra importancia individual en lugar de encajarnos en algún colectivo de los existentes, aunque para ello tengamos que pagar el precio de luchar en primera línea y no esperar a que "alguien" lo haga. La Democracia con mayúsculas necesita ciudadanos, no únicamente votantes.