Dinero público para la familia de Franco

A pesar de llevar tiempo viendo cosas raras, hay algunas que aún son capaces de captar mi atención. La defensa de lo público a ultranza por parte del PSOE en casos como el de los terrenos del Hospital Xeral frente a su propuesta de levantar torres de pisos en la estación de autobuses es comparable a su postura frente a la familia del dictador Franco.

Cuando el bipartito propuso declarar Bien de Interés Cultural (BIC) el Pazo de Meirás, lo hicieron según ellos para devolvérselo al pueblo porque había sido “robado” por el dictador. Lo que no nos explicaron es que esa declaración se incluirían unos buenos euros para conservar el Pazo, y que su titularidad seguiría siendo de los Franco, aunque, eso sí, tendrían que abrirlo unos días al año para que podamos verlo.

Esa medida me parece absurda, sobre todo partiendo de la base de que los BIC no son un arma arrojadiza, sino un reconocimiento de un valor cultural, como su nombre indica, lo que el Pazo de Meirás no cumple ni siquiera siendo muy generosos. Hay muchos bienes en Galicia que merecerían esa distinción y que no son BIC, como por ejemplo el llamado Puente Romano de Lugo o el Círculo de las Artes, mucho más significativos que un pazo de dudoso gusto y nulo estilo.

No me gusta que se intente reescribir la historia. Una cosa es que se quiten los nombres de Franco o 18 de julio a las calles, que es razonable, y otra que se nieguen pasados peloteos. Si un Ayuntamiento declaró Alcalde Honorífico a Franco, o le regaló un Pazo, ¿a qué viene ahora querer quitárselo? Santa Rita, Rita…

También choca con otro elemento a tener en cuenta y es que el PSOE, a través de Televisión Española, le pagaba 48.000 € a la semana a la nieta de Franco por enseñar cacha en un programa y bailar un poquito. 48.000 € a la semana son 192.000 € al mes, es decir, casi 32 millones de nuestras pesetas a la nieta de Franco (no le conozco otro “mérito” por el que ser conocida) por bailar. Eso sí, luego decimos que el Pazo de Meirás fue un robo y se lo queremos quitar. A lo mejor en unos años le piden que devuelva el dinero porque se lo dieron “obligados”, como el pazo.