El restaurante Verruga cerró sus puertas en diciembre de 2015, pero ayer hubo un pequeño “regreso” puntual al ponerse su expropietaria (y madre de un servidor) al frente de las cocinas de ASPNAIS para hacer a los usuarios del centro un menú del libro “Restaurante Verruga: Historias y recetas”. Se nos ocurrió la idea porque no parecía de sentido común que el volumen colabore con el centro sin que sus propios beneficiarios hayan probado los platos que se recogen en el mismo, ¿no creen?
Hay que decir que para Miluca fue algo sencillo a pesar de los muchísimos comensales que hay en el centro (unos 150) que superan con mucho las 14 mesas que tenía el restaurante, y todo se debe al fantástico equipo de profesionales que hay en las cocinas de la entidad, que hizo todo lo gordo, dejándole a ella el papel de “chef”, revisando y supervisando más que cortando o friendo. ¡Así da gusto!
El menú consistió en paté de cabracho, carne asada de la abuela (Doña Emilia, por supuesto) y natillas, tres de las recetas más sencillas y sabrosas del libro (que pueden conseguir en www.verruga.es) que, como ya sabrán, está prologado por José María Carrascal y colabora económicamente con ASPNAIS.
Desde que cerró el Verruga hubo algunas personas que le propusieron a Miluca alguna aventura hostelera, incluso a nivel particular para alguna celebración o cosas por el estilo, pero siempre se negó en redondo porque está felizmente jubilada y no tiene el más mínimo interés en cambiar su estado laboral. Sin embargo otra cosa es esto, echar una mano a una entidad como ASPNAIS, que ayuda a muchísima gente y de una forma que no imaginan ustedes si no visitan el centro, cosa que les recomiendo.
Después de todo, hay cosas que valen más que el dinero.
Artículo publicado en La Voz de Galicia del 28-04-2017
Buenísima idea!
ResponderEliminarMaría Buela.