Una escalera para el ''leiraparking''

El acceso más usado al "leiraparking" es lo que es...

El acceso desde el “leiraparking” que el Ayuntamiento de Lugo creó junto al hospital es lo que es: una fábrica de pacientes para el área de traumatología. Al menos te pilla cerca. Si no te tuerces un tobillo en las “fochancas” del propio aparcamiento (eso que se solventaba en un periquete desde la oposición pero que se ve que no es tan sencillo una vez calentando asiento en el Gobierno), siempre tienes la ocasión de descalabrarte bajando cual cabra montesa por un terraplén de inconcebible permanencia.

Ahí siguen las "fochancas" a mayor gloria de la efectividad administrativa

Es un acceso peligroso, improvisado y que no está limitado, pero el sentido común invita a utilizarlo porque es la distancia más corta entre el aparcamiento y el hospital. La solución parece sencilla: un talud escalonado que sirva de escalera de acceso, una actuación de bajo coste, sencilla y compatible con la normativa. Incluso se podría poner un pasamanos similar al que se hizo para los restos arqueológicos que se encontraron en la zona para contribuir a la seguridad de los peatones.

El tema del “leiraparking” es lo que es. Por lo visto las normativas impiden asfaltar (de lo que ya avisó hace muchos años Jaime Castiñeira, antes de que se hiciera la inversión y se metieran en ese jardín) y las continuas reparaciones lo único que hacen es poner un parche provisional hasta la siguiente ocasión en que el continuo trasiego de vehículos deteriora nuevamente la zona. Probablemente la solución sería buscar algún tipo de firme que sea compatible con las normas, cosa que me sorprendería que no exista porque vemos que todo cuanto monumento hay tiene al lado pavimentos que no son de tierra y, si se trata de la calificación urbanística, entiendo que eso desde el Ayuntamiento se debería poder subsanar, aunque aquí toco de oído porque no lo tengo tan claro. Doctores tiene la Iglesia.

Ahora que mucha gente que no pisaba el HULA desde hacía mucho tiene que acudir a ponerse la vacuna, la afluencia es todavía más alta que normalmente, y eso que ya había mucha gente por la zona.

Como nota positiva, les diré que las últimas veces que he tenido que ir (y han sido varias) no he visto ni un solo “gorrilla”. No sé si es que ha aumentado la vigilancia o que están de vacaciones, pero no me ha coincidido ni el primero en las, al menos, cinco veces que he tenido que ir. Ojalá se haya solventado ese tema.

EDITO:

Les pido disculpas por un pequeño ejercicio que he hecho en este artículo y el del día anterior. Ha sido bastante clarificador para mí y confío en que ayude a la reflexión.

Les explico el tema en el artículo del miércoles 30 de junio que pueden ver aquí