El Ayuntamiento obliga a los placeros a un horario inasumible

53,5 horas semanales de jornada laboral (más el tiempo de limpieza de los puestos que eso hay que hacerlo FUERA de la jornada). Eso es lo que la ordenanza de plazas y mercados obliga a hacer a los placeros tal y como se les acaba de "recordar" en una circular. Menos mal que gobierna la izquierda de origen sindicalista que si no...

Estos días se distribuyó en la Plaza de Abastos una circular en que se avisa de que entrará en funcionamiento un sistema de videovigilancia y aprovechan para “recordar” a los industriales que desarrollan allí su actividad que el horario mínimo de atención al público en los puestos recogido en la ordenanza es de 8 a 14:30 y de 17 a 20 entre lunes y viernes y los sábados de 8:30 a 14:30.

Artículo 8.1 de la ordenanza. Uno no sabe si están vendiendo o haciendo pirámides.

El problema es que parece que nadie se ha parado a sumar cuántas horas de trabajo implica eso. Son 53,5 a la semana, un 133% de la jornada máxima regulada en el Estatuto de los Trabajadores, que la limita a 40 horas semanales. A esto hay que añadir el tiempo de limpieza de los puestos que, según la misma ordenanza, hay que hacerlo fuera del horario de atención al público así que si suponemos media hora diaria (que no es mucho) calculen ustedes 3 horas más semanales. La conciliación familiar y el más elemental sentido común obligan a cualquiera a entender que no es viable esa pretensión que parece querer obligar a la gente a no tener vida más allá de su puesto de trabajo. ¡Menos mal que nos gobierna la izquierda, sensible con el trabajador!

“Pues que contraten gente” podrá decir alguno. Sí, sería buena idea, el problema es que no sólo no es viable económicamente en la mayoría de los casos, sino que además no resolvería la cuestión ya que la propia ordenanza obliga a los placeros a prestar el servicio de forma personal.

Artículo 24 de la ordenanza.

Los placeros llevan años pidiendo que se modifiquen varios puntos de la ordenanza que regula su actividad, ya que, aunque es relativamente reciente (de 2011), jamás ha reflejado la realidad de la situación de esos espacios.

Si hacemos una revisión de otras plazas de abastos vemos que funcionan de mañana en su conjunto, y si bien es normal que se permita la apertura de los establecimientos que lo consideren oportuno fuera de un horario mínimo obligatorio, es disparatado pretender que los industriales permanezcan en sus puestos 53,5 horas, un 133% de la jornada laboral legal, por una mera cuestión decorativa, ajena a sus propios intereses. Unas sesenta horas si sumamos además la limpieza de los puestos...

La limpieza se hará fuera del horario de atención al público. Sumen...

Cabe una comparativa con los horarios de otras plazas de abastos de éxito como son las de Coruña (horario de 8:00 a 15:30), Pontevedra (8:00 a 15:00) o Santiago (8:00 a 15:00).

En defensa del Gobierno Local cabe decir que ayer mismo se afirmaba que la circular no pretendía recalcar ese horario sino trasladar el del funcionamiento de las cámaras de vigilancia. El problema es que llueve sobre mojado porque no es la primera vez que se ha trasladado la intención de la concejalía que lleva el tema de hacer abrir por la tare a los placeros, y además no es que tenga mucho sentido hacer hincapié en el horario de la ordenanza si las cámaras van a estar encendidas de 7 a 21. De ahí probablemente la suspicacia de los afectados.

Si se dejaran de tocar las narices con esto y se dedicaran a impulsar la plaza y el mercado con medidas tan de puro sentido común como  tener una web actualizada (sigue sin estar al día salvo, por supuesto, para la autopropaganda partidista de rigor) en que se puedan hacer compras online. Si no fuera por la iniciativa de la empresa Kibus, sería imposible hacer compras en ese recinto desde casa, pero afortunadamente la eficacia privada suele suplir la incompetencia pública. Hay que decir que desde Lugo Monumental, la asociación que tengo el honor de gestionar, se ofreció gestionar gratuitamente esa web, pero ni se nos ha contestado.

Y así seguimos, diciendo que queremos promocionar la Plaza y el Mercado pero machacando a los industriales para que hagan un horario disparatado que supera en 13,5 horas a la semana (unas 20 si añadimos el tiempo de limpieza de los puestos) el máximo legal que fija el Estatuto de los Trabajadores. El clásico espíritu de “sostenella y no enmendalla”.

Quizás algún día…