miércoles, 20 de noviembre de 2024

Quiroga Ballesteros, el futuro que nos espera en el resto del centro

Quiroga Ballesteros, una yincana de vallas y pivotes

Que la calle Quiroga Ballesteros esté llena de losas rotas no es novedad. Finalizada hace algo más de tres años, esta obra es un ejemplo de lo que nos espera en el resto del casco histórico.

A día de hoy es una calle por la que no pasa el tráfico. Ni hay apenas garajes (creo que sólo queda uno y de poca capacidad) ni camiones de obra, ni nada por el estilo. Y sin embargo el trazado de la calle es una yincana de vallas y pivotes que señalizan los peligros de caminar por esa vía.

En noviembre de 2022 tuvimos por primera vez noticia de que se pensaba “peatonalizar” lo que faltaba del recinto amurallado y en esa misma reunión, a la que sólo se nos convocó a cuatro personas, pregunté directamente por el tipo de suelos poniendo como ejemplo la calle Quiroga Ballesteros. Se me respondió que no me preocupase, que las losas estaban diseñadas para aguantar el tráfico.

Dos años después vemos que esto no es cierto por dos motivos: el primero es que se limita el tonelaje de los vehículos, con lo que no “aguantan” el tráfico sino algún tráfico, y el segundo es que en la Plaza del Ferrol ya se están haciendo reparaciones a los dos meses de abrir esa calle al tráfico.

Es obvio que van a tener que poner separaciones o balizas entre las partes pensadas para soportar "algún” tráfico y las puramente peatonales, lo que no sólo da al traste con la idea de la plataforma única, sino que hace que todo el proyecto carezca de sentido ya que para eso nos quedábamos con las aceras que había antes que son menos molestas y más claras a la hora de delimitar espacios.

Quiroga Ballesteros es el laboratorio en que podemos ver el futuro que nos espera, y lamentablemente es un futuro lleno de reparaciones, sustituciones y baches.

martes, 19 de noviembre de 2024

La magia es ilusión

Los magos Rafa y Dani Polo, y la carta que llevo conmigo y que aún me pasma

Me gusta la magia. Los magos me parecen la piedra angular de muchísimas obras literarias y sin Merlín y Morgana, Flagg, Dumbledore y Harry Potter, el Doctor Strange o Gandalf y Saruman las historias no sólo serían más flojas, sino que directamente algunas serían soberanos tostones.

Más allá de la literatura y el cine la magia como espectáculo me pasma. Me resulta totalmente incomprensible y no hay nada que me moleste más que un mago al que se le ven los trucos (una trampilla mal tapada, una carta que asoma por donde no debe…) porque rompe totalmente la ilusión de querer ser engañados en el buen sentido.

Afortunadamente el viernes tuvimos dos grandísimos artistas a los que no les pasa eso y que por mucho que me rompa la cabeza no sé cómo demonios hacen las cosas. Tampoco es que lo intente por dos motivos: el primero es que me gusta disfrutar del engaño y el segundo es que, aunque lo quisiera, no lo adivinaría. Hablando con el Mago Rafa me decía que la gente complicaba mucho sus teorías sobre los trucos y que suelen ser más simples de lo que pensamos. Incluso añadía algo como “ojalá fuera capaz de hacer las cosas que la gente cree que hacemos”, aunque creo que le quita importancia a una habilidad que es realmente única.

Como les decía en la gala del viernes tuvimos a dos magos: el propio Rafa y a Dani Polo. Rafa hizo un espectáculo como es habitual en él: aparentemente sencillo, pero sólo aparentemente. De tirar una bola de papel para que quien saliera al escenario con él fuera alguien que no podía prever, y hacerle elegir una carta al azar que después sería la que estaba escrita en esa bola, a que otra persona escogida entre la gente eligiera un periódico (del día) entre cuatro opciones y una página dentro de ese periódico para que después apareciese una mitad en una cartera entre el público… cosas que por mucho que lo pienses no consigues entender.

Das por sentado que en algún momento te hacen elegir la carta que ellos han seleccionado o que consiguen sugestionarte para que el periódico y la página sea la que habían decidido ellos previamente, aunque no se entiende cómo.

Por su parte Dani Polo hizo algo que nos dejó a todos boquiabiertos, sobre todo porque el truco lo hicimos nosotros, cada uno en su asiento, y que entiendo que es imposible, pero no lo es porque pasó.

Después de coger cada persona del público cuatro cartas que te daban al entrar, las rompimos a la mitad, nos guardamos un trozo en el bolsillo, las barajamos, intercambiamos un trozo con la persona de al lado (si querías, así que unos lo hicieron y otros no), fuimos descartando trozos hasta quedarnos con uno… y encajaba con el que teníamos en el bolsillo. Aún guardo las dos mitades de mi carta porque si no es magia, que alguien me lo demuestre. Me faltó pedirle a Dani que me las firmase y aún las llevo encima con la esperanza de poder pedírselo en algún momento.

Verán, somos conscientes de que estos espectáculos tienen que tener un truco, pero a veces uno quiere caer en la tentación de pensar que no, que es magia real, con esa ilusión que perdimos a hacernos adultos y que recuperamos por un rato sentados en una butaca en penumbra. El niño que nos queda dentro, la inocencia, la credulidad se intentan abrir camino porque suponen esperanza. Que no todo es blanco o negro, físico y mesurable, sino que hay algo más de lo que podemos sacar de una probeta y una cinta métrica.

La magia es maravillosa y Rafa y Dani Polo lo son. Enhorabuena.

lunes, 18 de noviembre de 2024

Gracias por una noche de solidaridad, música y magia

¡Gracias a todos!

Una vez más toca dar las gracias, porque la gente es increíble y cuando se une por una buena causa surge una magia en los escenarios que no es fácil de igualar. El viernes se celebró la gala “Calmando Tormentas”, en que se recaudaron fondos para los afectados por la Dana de Levante que se les harán llegar a través de Cruz Roja, y aunque siendo totalmente sincero me habría gustado que hubiera más gente, mediar el Gustavo Freire en Lugo con tan poca antelación y teniendo en cuenta los grandísimos conciertos que había en la ciudad ese día (con el Festival de Jazz a la cabeza) no fue mala cosa.

Por orden de intervención en la gala, para ser objetivo, quiero dar las gracias más efusivas a los artistas David Taboada y Jairo, al Mago Rafa (que además fue quien tuvo la iniciativa de llevar a cabo este espectáculo y quien llevó el grueso del peso de la organización), a Iria Estévez y a la Penúltima Sabinera, en una gala conducida por el ilusionistas Dani Polo que además hizo un varios números de los que les hablaré mañana porque han pasado tres días y de uno en concreto aún tengo la boca abierta (sin desmerecer los demás ni la inexplicable magia de Rafa).

Todo esto no habría sido posible sin la desinteresada colaboración de varias empresas, que hicieron su trabajo sin cobrar para que toda la recaudación, hasta el último euro, se destine a Cruz Roja, y que son La Cosa Gráfica, Escóitame Produccións, TT Box, Buzoneos del Norte e Imprimate monográficos. También agradecemos al Área de Cultura del Ayuntamiento de Lugo que nos haya cedido gratuitamente el Auditorio para esta gala.

Y por supuesto gracias al público, a la gente que vino al auditorio y a la que no pudo venir pero que aún así hizo una donación a la fila cero.

Durante esta semana haremos públicas las cuentas de la gala, las donaciones a la fila cero y se entregarán los fondos a Cruz Roja, pero no podía dejar pasar ni un solo día sin dar las gracias a todos y cada uno de los que han participado en la gala y decirles que… ¡sois muy grandes!

Muchas gracias a todos.

viernes, 15 de noviembre de 2024

Hoy, gala benéfica por Levante (y aclaremos por qué a través de Cruz Roja)

 

Esta noche a las 21:00 en el Auditorio Gustavo Freire habrá, como ya sabrán (sobre todo si leen este blog) una gala de artistas lucenses. Músicos y magos, técnicos, diseñadores, impresores, hasta la empresa de seguridad que llevará el control de accesos, ofrecerán su esfuerzo de forma totalmente desinteresada, así que absolutamente todo lo recaudado, hasta el último céntimo, se destinará sin ningún tipo de comisiones, descuentos ni nada de nada a los afectados por la Dana de Valencia a través de Cruz Roja española.

Precisamente hoy les quiero hablar de esta organización, que está sufriendo una campaña de acoso y descrédito que es muy complicado desmontar por dos motivos: el primero y más importante es que los bulos son más fáciles de extender que de rebatir… y el segundo es que la Cruz Roja, como cualquier otra organización humana, está formada por personas y como tales son falibles e incluso en algunos casos, puede que corruptas.

Esto último hace que personas cuyo criterio valoro me hayan dicho que es un error destinar los fondos de la gala a Cruz Roja, algo que me ha sorprendido y que me ha hecho pensar mucho en este tema. Precisamente porque las personas que me dijeron esto son gente con la cabeza amueblada y no unos exaltados, creo que es importante darle una vuelta al tema y aclarar por qué destinamos ese dinero a Cruz Roja.

Empecemos por el final. ¿Puede alguno de nosotros negar que gente de Cruz Roja, vinculada a Cruz Roja, o trabajando en Cruz Roja se haya aprovechado de las desgracias ajenas para hacer caja y lucrarse personalmente? Por supuesto que no podemos. Cabrones los hay en todas partes, y podemos recordar como un exdirector de la Guardia Civil se apropió de fondos reservados o de dinero de los huérfanos del cuerpo, por poner un ejemplo.

Pero que haya desgraciados que se aprovechan de estas cosas no puede ser la excusa para despreciar a una organización entera. Sería como decir que no queremos pagar impuestos porque hay corruptos en todas las administraciones, o que todos los sindicalistas son unos “comegambas” o que los partidos políticos son mafias porque en todos hay chorizos. Pues no, me niego a tragar con eso.

Hay gente decente en el PSOE, en el PP, en Ciudadanos, en el BNG, en Podemos, en Vox, en Sumar, en Coalición Canaria… y hasta me atrevo a decir que en Bildu. Gente que cree sinceramente que hay caminos diferentes y que ni son ladrones, ni fascistas, ni terroristas, aunque tengan compañeros de filas de cuya decencia podemos dudar con bastante fundamento. Pues lo mismo pasa con las demás organizaciones de un tamaño tan colosal.

Verán, no se puede ser un talibán en ningún sentido. Decir que Cruz Roja es una organización mafiosa que se dedica a recaudar dinero para después no hacer nada “por los españoles” pero sí “por los que vienen en patera” es una simpleza como un castillo, que atufa a ultraderecha por todas partes. La Cruz Roja ayuda al débil, al desamparado, y como comprenderán la gente que viene en patera sí es un destinatario objetivo de sus atenciones, como es natural. Les gustará o no que vengan, pero una vez están aquí, ¿qué hacemos? ¿los dejamos morir en las playas? ¿los tiramos al mar y que se ahoguen? Las soluciones simplistas como “que vuelvan a Marruecos” no dejan de ser eso, simplezas.

Por supuesto que hay una parte de aprovechados, incluso entre las presuntas víctimas, que se sirven de la caridad social para no dar un palo al agua y vivir del cuento, es innegable, pero de nuevo hay que preguntarse por la alternativa ¿dejamos tirado a todo el mundo por si acaso no nos necesitan de verdad?

Es más grave la experiencia directa de algunas personas, amigas mías, que han visto personalmente cosas que no les han gustado en estas organizaciones, incluida Cruz Roja. No pongo en duda su palabra ni su experiencia, sólo faltaba, pero una vez más nos planteamos qué caminos alternativos tenemos. ¿Nos vamos a Valencia con el dinero de la gala y lo repartimos por las calles? ¿Confiamos en un “influencer” por el hecho de ser buen comunicador y que ya veremos qué hace con la pasta? ¿Lo ingresamos a una administración pública que ya se nutre de nuestros impuestos directamente?...

Les voy a ser muy sincero: nuestra responsabilidad es ayudar, y la de las demás organizaciones es canalizar esa ayuda y hacerla llegar a quienes lo necesitan.

Comparto con los críticos que hay una preocupante falta de control y transparencia en todas estas cosas. Aún recuerdo los visones que el bueno de Emilio, de la Peletería Jañez, regaló a una organización de Lugo y de los que nunca más se supo. Todos tenemos anécdotas y algunas muy graves, pero nuestro papel ahora es echar una mano.

Cruz Roja es una organización internacional, que ha estado presente en todos los conflictos armados desde finales del siglo XIX y al que recurrimos cuando la necesitamos. Pues ahora nos necesitan a nosotros, y si hay que reforzar los controles, la transparencia y las auditorías (que yo creo que sí), que se refuercen, porque a todos nos ayudará a saber que hacemos lo correcto.

Termino recordándoles que hoy artistas y empresas lucenses ofrecen su trabajo de forma desinteresada para ayudar a las víctimas de la DANA. Anímense ustedes a acudir y a llenar el auditorio para lograrlo.

Tienen toda la información del evento en www.lugomonumental.es

jueves, 14 de noviembre de 2024

Un foro de encuentro entre Galicia y Castilla León

Foto de familia del Foro Ancares. Confiemos en que sea el primer paso de muchos más
 

Un encuentro denominado Foro Ancares, organizado por los periódicos El Progreso y El Diario de León y que tuvo lugar estos días en Ponferrada, analizó los graves problemas comunes que afectan a las comunidades autónomas de Galicia y Castilla León.

Es curioso ver que realmente las deficiencias son similares, y que los lazos tradicionales que unen ciudades como Ponferrada y Lugo (en mi caso los lazos más estrechos) se reafirman al observar que las similitudes entre ambas ciudades son mucho mayores que las que pueda haber, por ejemplo, entre Lugo y Vigo.

Las deficientes comunicaciones, acentuando el aislamiento ferroviario, son las principales reivindicaciones de Galicia y Castilla León, lo que se comprende todavía más si nos fijamos en Lugo y Ponferrada. Orense, por ejemplo, unido al arco atlántico por trenes decentes, tiene menos de qué quejarse. En una reunión relativamente reciente en que había representantes de toda Galicia los de la ciudad de las Burgas protestaban porque los pasajeros del AVE se mojaban al bajarse del tren porque sus marquesinas eran algo estrechas…

Estos foros son relevantes porque ponen en común carencias que a veces pensamos que son únicamente nuestras pero que comparten en otras zonas, y como se suele decir, la unión hace la fuerza.

La unión de los dos periódicos ha logrado que el encuentro sea al más alto nivel, con los presidentes Rueda y Mañueco sentados a una misma mesa en el castillo de Ponferrada, un lugar significativo.

El reto ahora es ir uniendo a más comunidades a este encuentro. Por ejemplo, Asturias también sufre problemas similares y sería bueno que se sumase para que no se vea como una cosa de territorios gobernados por el PP.

En todo caso, es un primer paso importantísimo y hay que felicitar a los organizadores porque han conseguido crear un foro que puede dar mucho de sí. Ahora toca continuarlo.

miércoles, 13 de noviembre de 2024

Indefensión ante la política

Eternas obras en el centro. Foto: COPE Lugo

Es curioso que uno de los proyectos que más ha endeudado a la ciudad e hipotecado su futuro, además de haber alterado el casco histórico durante mucho tiempo (y lo que falta) se haya decidido sin la menor participación de nadie más que el gobierno local.

El llamado “corazón verde”, que está transformando el centro en un páramo de fría piedra gris, se aprobó sin contar con nadie. Nadie lo pidió ni había ninguna necesidad de hacerlo, ya que la excusa que se puso, la aprobación de una Zona de Bajas Emisiones, no tiene nada que ver con las obras ya que Lugo cumplía los requisitos legales para la ZBE sin hacer nada de nada.

La primera reunión que creo que se celebró con gente externa al proyecto fue en el llamado edificio de nuevas tecnologías (detrás del Ayuntamiento) y se nos invitó al presidente de la Federación de Comercio, al de la asociación de Hostelería, al de la asociación de la Tinería y a un servidor como representante de Lugo Monumental. Fue en noviembre según mis notas… y los proyectos están visados de meses antes, con lo que difícilmente era una reunión que tuviera otro carácter que no fuera meramente informativo.

Los proyectos eran un disparate, como se demostró con su análisis posterior, y su “huella medioambiental” consistía en quitar árboles del casco histórico (como los que estaban delante del Mixto), pavimentar todo el centro de fría y dura piedra gris, o meter un carril más por Santo Domingo, que se llevaba por delante la zona verde y los árboles que están frente al convento de las Agustinas, algo que se logró evitar gracias a la presión social y a un incremento de más de 300.000 euros del presupuesto que pagaremos ustedes y yo directamente porque eso no entra en la subvención de la Unión Europea.

Ni un minuto de reflexión, ni un segundo de debate, ni una posibilidad de aportaciones por parte de nadie. Yo me lo guiso y ustedes se lo comen, es el mantra de este proyecto fraccionado en tres partes por razones que todavía no alcanzo a comprender pero que seguro que tienen algún motivo ajeno al interés público. Quizá evitar algún tipo de control o trámite.

¿Qué nos queda a los ciudadanos? Sufrir y callar. No tenemos posibilidad de recurso legal alguno ni más derecho que el de la pataleta, porque la partitocracia revestida de democracia que nos han endilgado es la que manda y no hay ningún atisbo de contrapeso ni de contrapoder, sobre todo desde que vemos que las páginas de los periódicos están llenas de anuncios de las administraciones públicas, lo que tiene las consecuencias que todos podemos imaginar. Por cierto, a ver si me pongo a contar los anuncios a dos páginas de la Diputación en los últimos dos meses, porque es un escándalo (otra vez).

Quizás una obra de este calado debería haber tenido antes un trámite de información pública, una exposición a los ciudadanos, una posibilidad de hacer aportaciones... Pero no, se hace y punto, aunque haya que modificar los proyectos y gastar casi 700.000 euros (315.736,00 en Santo Domingo y otros 358.002,00 en Bolaño-Montevideo) en corregir disparates.

martes, 12 de noviembre de 2024

La Plaza del Ferrol se rompe

No, no es San Marcos, es la recientemente terminada Plaza del Ferrol...

Hace más de un mes, concretamente el día 4 de octubre, en una reunión que tuvimos desde Lugo Monumental, la asociación que me honra presidir, se propuso la apertura peatonal de la calle Amor Meilán, cuyo firme lleva terminado desde agosto pero que está vallada por razones totalmente incomprensibles. Comprendo que no quieran que pase el tráfico (bueno, lo comprendo a medias, que se supone que su futuro es ese) pero es absurdo no abrirla para que los transeúntes puedan evitar ir por Bolaño Rivadeneira, pasando entre máquinas y calles levantadas, o por San Froilán, por donde pasan un montón de coches en este “Lugo peatonal” que nos venden.

Pero ya ven lo que es la vida, hoy han anunciado que se abre al tráfico rodado esa misma calle, esa que tuvieron cerrada a los peatones tres meses sin motivo alguno. El motivo es que tienen que reparar las ya muchas losas levantadas y rotas de la Plaza del Ferrol, obra recientemente terminada pero que ya está dando problemas.

La realidad es tozuda. Pretender que las losas de gran tamaño son las indicadas para una zona de tráfico rodado es estar abocados a reparaciones durante años y más años. Incluso en Quiroga Ballesteros, que está cerrado al tráfico, las roturas de losas y el “bamboleo” son el pan nuestro de cada día.

Por la contra, tienen ejemplos más que sobrados del éxito del modesto y efectivo adoquín. En la Plaza de la Soledad, por ejemplo, vemos cómo las losas de tamaño medio (no son muy grandes) están rotas en su práctica totalidad… pero todos los adoquines están perfectos. Han aguantado años porque es muy difícil que se rompan, e incluso en la vecina calle Armañá, donde desde hace años descargan camiones de gran tonelaje transportando bebidas, el adoquinado resiste o necesita unos muy mínimos ajustes.

Lo han hecho bien, por ejemplo, en el tramo peatonal de Camiño Real. Ahí se pusieron pequeños adoquines que ni siquiera son de piedra, y no han dado problema alguno a pesar de que hay bastantes vehículos porque hay un aparcamiento público allí mismo.

Lo que resulta preocupante es que una calle terminada hace unos pocos meses ya esté rota. ¿Qué futuro nos espera? Por ahora ha colado que lo repare la empresa instaladora, algo que es más que discutible porque tal vez el problema no esté en la colocación de las piedras (que sí es responsabilidad de la adjudicataria) sino del diseño y el uso, que es una cuestión municipal ya que fue el Ayuntamiento quien diseñó el desaguisado.

En fin, que empezamos pronto con roturas y reparaciones. Esto va a ser un quebradero de cabeza evidente, pero que no van a corregir… porque no les da la gana.