jueves, 24 de abril de 2025

Unos recomendables Paseos por Lugo

Una presentación de un libro siempre es un acto de fe.
Afortunadamente la gente ha respondido una vez más y no saben lo que se agradece.

Presentar un libro siempre es arriesgado. He visto escritores consagrados, incluso importantes a nivel autonómico o nacional, que estaban prácticamente solos en una presentación a la que acudían un puñado de personas. No es una imagen infrecuente ver cinco o seis personas en un evento de este tipo.

Por eso es tan importante para un editor o para un autor ver un buen aforo atendiendo a la puesta de largo de una obra, y eso es lo que pasó ayer en la vieja cárcel, donde, gracias a su préstamo por parte del Ayuntamiento de Lugo, tuvimos el placer de presentar “Apuntes de mis paseos por Lugo”, una obra de recopilación de los artículos que el profesor Emilio Valadé del Río acaba de publicar con el modesto sello editorial Ediciones Desdelugo, que tengo el placer de gestionar.

Si pudiera dedicarme profesionalmente a este tema, no duden que lo haría, porque realmente es algo hermoso ver en librerías y bibliotecas un pedazo del alma de un lucense como Emilio. Es la quinta vez que edito un libro y la experiencia sigue siendo igual de enriquecedora que con los otros cuatro, ya que cada uno tenía algo que lo hacía muy especial.

Pero como les decía, el acto de ayer fue maravilloso. Tuvimos la suerte de que Emilio se olvidase en casa las tarjetas que había preparado para la presentación, ya que esa circunstancia nos permitió escuchar sus reflexiones puras, improvisadas y sinceras, hablando de las muchas cosas que le apasionan de Lugo y también de las, pocas, que le disgustan como puede ser la desaparición de árboles y zonas verdes en favor de plazas duras de piedra y hormigón. Emilio es de esas personas que es capaz de ver detalles y hacer reflexiones sobre un lugar que todos creemos conocer perfectamente pero del que no nos hemos fijado realmente, y pone el acento en esta o aquella característica que, una vez nos la dice, no podemos evitar ver cuando volvemos a ese lugar. Es un Maestro con todas la letras.

Julio Reboredo, Cheta, tuvo la gentileza de leer su prólogo para así autocensurarse en la cuestión de los tiempos, lo que nos ayudó a que la sesión no se alargase demasiado. Es una de esas personas que sabe tanto y le apasiona tanto lo que sabe de Lugo que si no se pone un límite es capaz de dar una interesantísima conferencia sobre cualquier aspecto de la historia de la ciudad.

Cerró el acto Alfonso Riveiro, director de El Progreso, el diario donde Emilio lleva un lustro publicando estos artículos de los que ahora se editó esta selección. Me sentí especialmente agradecido por sus palabras sobre la importancia de la palabra escrita, del papel, del tacto y el olor a libro nuevo. Por supuesto que el libro electrónico es más práctico y tiene grandes ventajas, claro que sí, sobre todo cuando viajas y te llevas en 200 gramos una biblioteca entera… pero el cariño y el encanto del papel no lo iguala ningún chisme digital.

Agradezco enormemente al público asistente su generosidad al venir a la presentación. Muchas caras conocidas de las que no voy a hacer una relación porque me podría olvidar de alguien y eso me dolería. Sólo voy a mencionar a dos que son Paco Nieto, que es la primera persona en leer los artículos de Emilio antes de su publicación para darle su opinión, y Sergi Ollé, que es el autor de las ilustraciones que encabezan cada capítulo del libro.

Por último, una vez más, dar las gracias a Miluca y Laura por su apoyo, a Quique y Andrea por su ayuda en la presentación y, cómo no, a Marcos por estar siempre ahí y apoyar todo cuanto hago.

Tienen disponible el libro de Emilio en las principales librerías de Lugo y, por si están fuera de la ciudad, en www.ediciones.desdelugo.es.

miércoles, 23 de abril de 2025

Hoy se presenta ''Apuntes de mis paseos por Lugo'', de Emilio Valadé del Río

Para celebrar el día del libro, nada mejor que presentar uno.

¿Qué mejor forma de celebrar hoy el día del libro que presentando uno? Esta tarde a las 20:30 en el patio central de la Vieja Cárcel, en la Plaza de la Constitución de Lugo se da a conocer una obra titulada “Apuntes de mis paseos por Lugo” del profesor Emilio Valadé del Río.

Este libro reúne una selección de los artículos que el profesor Valadé ha publicado en diario El Progreso y que reflejan no sólo una sensibilidad y una capacidad de observación fuera de lo común al detalle, sino un profundo amor a Lugo que, en ocasiones, recoge el dolor por actuaciones difíciles de asumir desde su perspectiva cultivada y viajada.

Agrupados en 9 bloques, estos artículos nos llaman la atención sobre diferentes aspectos de Lugo que en ocasiones pasan desapercibidos y sobre los que el autor fija una mirada que contagia curiosidad e interesantes reflexiones.

No es una guía para turistas (que, por cierto, hay que plantearse seriamente) sino un análisis en profundidad de detalles, lugares, edificios y rincones que despiertan en nosotros curiosidad cuando nos fijamos… aunque lo hagamos muy poco. Pero para eso está Emilio, para llamar nuestra atención sobre este fondo en el que hacemos nuestra vida día a día sin reparar en algunas peculiaridades que son dignas de observar.

A la presentación de hoy nos acompañarán también Julio Reboredo, prologuista del libro, y Alfonso Riveiro, director de El Progreso, donde Emilio lleva publicando estos artículos desde hace años.

Es el quinto libro que tengo el placer de editar bajo el sello de Ediciones Desdelugo, y tengo que decir que estoy muy orgulloso de la calidad del resultado. El tacto de la cubierta, el agradable tono del papel y los detalles de la edición han sido mimados y creo que han creado un conjunto más que atractivo.

Como es el día del libro lo tendrán disponible allí con el tradicional descuento del 10% que se hace en esta fecha, por lo que su precio será de 13,50 €.

Recuerden, hoy a las 20:30 en el patio central de la vieja cárcel. ¡Allí les esperamos!


martes, 22 de abril de 2025

Las sandalias del pescador


La muerte del Papa abre telediarios y periódicos, y no vamos a ser menos en este modesto blog que se dedica a tratar temas de Lugo pero que a veces, sólo a veces, se mete en cuestiones ajenas a lo que son asuntos exclusivos de nuestra ciudad… sobre todo cuando hay días que no sabes de qué escribir y la actualidad te acosa en cada rincón.

La economía marca el mundo y todas sus organizaciones, también la Iglesia Católica, que funciona como una gran empresa que vende fe y entradas al Paraíso, aunque también a muchos de sus templos que, curiosamente, arreglamos con fondos públicos cuando tienen goteras. En Lugo, sin ir más lejos, desde hace algún tiempo se cobra entrada para las visitas turísticas a pesar de que se estén haciendo en este momento reparaciones en su entorno que pagamos con nuestros impuestos. Un desequilibrio evidente.

Volviendo a la actualidad tras la muerte del Papa Francisco, la ficción en ocasiones nos marca muchísimo, y cuando pienso en el fallecimiento de la cabeza de la Iglesia y la elección de su sucesor no acudo a libros de historia o a sesudos estudios, sino a una novela llevada magistralmente al cine en 1968: Las sandalias del pescador. Si no han visto la película se la recomiendo, sorprendentemente más que la novela que me pareció menos atractiva, lo que creo que sólo me ha pasado con ésta y con El nombre de la rosa.

En la película Anthony Quinn encarna a Kiril Lakota, un obispo católico ucraniano encarcelado en un campo de trabajo de la URSS, que es liberado por mediación del Vaticano y acude a la llamada del Papa quien, por sorpresa, lo nombra cardenal. Al poco tiempo el Papa muere y, en un giro difícil de creer, el cónclave elige un papa ruso que intenta mediar entre las tensiones de potencias nucleares como China, URSS y occidente.

Tras reunirse con ellos y ser acusado por el líder chino de no arriesgar nada en su lucha por el entendimiento, el Papa electo acude a su ceremonia de coronación y, para pasmo de todos los asistentes, se quita la tiara y pronuncia un discurso inmortal:

Soy el custodio de los bienes espirituales y materiales de la Iglesia.

En nombre del Espíritu enajeno todo el oro y piedras preciosas de los relicarios, y en primer lugar las que adornan mi tiara, para aliviar a nuestros hermanos hambrientos. Y si en virtud de esta hipoteca la Iglesia tiene que pordiosear como los mendigos, sea en buena hora. Yo no desmentiré esa hipoteca y por ningún concepto la reduciré.

Y ahora, invito a los magnates del mundo y a todos los acomodados a compartir su abundancia con aquellos que nada poseen.

Hablando ayer con un amigo me decía que hay una frase muy corrida de que “con lo que hay en los Museos Vaticanos se podría quitar el hambre del mundo”. Eso puede resultar más o menos falso ya que si se vendiera todo lo que allí hay probablemente sería difícil encontrar compradores para semejante patrimonio… pero para el oro y las joyas sí hay siempre quien quiera comprar.

La Iglesia tiene un patrimonio muy difícil de evaluar, fruto de siglos y más siglos de donaciones y de privilegios económicos. El Papa ficticio de Las sandalias del pescador no renunciaba a los templos o los monasterios, pero sí al oro y las piedras preciosas que no tienen absolutamente nada que ver con el culto y que, sumadas, podrían aliviar enormemente los problemas de gran parte de la humanidad y dar credibilidad a su última frase: “Y ahora, invito a los magnates del mundo y a todos los acomodados a compartir su abundancia con aquellos que nada poseen”. Después de hacer eso y no de predicar una cosa y hacer la contraria…

Quizás esa sea una de las grandes tareas pendientes de la Iglesia, pero en esta ficción la cosa va mucho más allá. Ambientada en "la actualidad" de finales de los 60 el Papa trata temas como el perdón en la infidelidad, la soledad en el poder absoluto del Papa o la dificultad de buscar esa vida sencilla que el Papa Francisco también parecía desear y que es imposible en un puesto como ese.

Una película inolvidable e imprescindible, y quizás una guía de futuro para un cambio en la Iglesia que realmente abra las puertas para que los domingos los templos no estén cada vez más vacíos.

lunes, 21 de abril de 2025

Un ''bonito'' recuerdo

¡Qué hermosa imagen para llevarte de recuerdo de Lugo!

Que las normas están para cumplirlas es un mantra que los responsables políticos utilizan… para que las cumplan los demás. Ellos creen que están por encima del bien y del mal y consideran que tienen el privilegio, cuando no la bula, de saltarse leyes, reglamentos u ordenanzas para hacer lo que les venga en gana.

Eso explica, por ejemplo, que siga instalado en la Vieja Cárcel una bandera de Palestina, que en Museo Provincial ondee en solitario la bandera gallega, o que en la fachada del Ayuntamiento haya una pancarta contra la planta de biogas de Coeses. ¿Para qué vamos cumplir con las leyes si podemos imponer nuestros criterios particulares usando los votos como excusa? ¿Qué será lo próximo?

La normativa indica claramente que no se pueden poner en edificios públicos más banderas que las legalmente establecidas y que han de estar en determinado orden y lugar: local, autonómica, nacional, la de la Unión Europea y algunas en casos particulares como puede ser la provincial en la Diputación. No se permite que la bandera gallega ondee en solitario como está en el jardín del Museo Provincial, pero no pasa nada porque escudan su arbitrario incumpliento en una ideología no avalada por las urnas si no es con la complicidad de otros partidos.

Pero los criterios políticos están por encima de las leyes que el resto de los mortales hemos de obedecer y por eso tenemos la bandera de Palestina, un lugar donde los homosexuales son colgados de grúas y las mujeres están subyugadas a la voluntad de los hombres (padres, hermanos y maridos), o un cartel contra una planta de biogas que ya ha sido denegada y el expediente archivado por la administración autonómica. 

Me imagino que los que apoyan este disparate saldrán con las frases rimbombantes de costumbre: "pues sí, es un hermoso recuerdo de un pueblo luchando por la limpieza de sus aguas" y esas cosas. El problema es que la planta está denegada y el expediente cerrado. ¿Se puede abrir otro? Claro que sí, pero entonces pongan otra vez la pancarta o, lo que es mejor aún, que el Ayuntamiento, que no olviden que es el que da la licencia, la deniegue.

En todo caso, incluso pudiendo coincidir con alguna reivindicación (me veo venir también un "tú estás a favor de la planta de biogas", ignorando lo que están leyendo), no viene ahora a cuento porque la ley no distingue entre objetivos, es llamativo que la foto que se llevan los turistas de la sede de la administración local de nuestro Lugo, incluya una pancarta ilegal contra un tema a día de hoy inexistente. Bonito recuerdo.

viernes, 11 de abril de 2025

Una oportunidad para corregir 20 años de errores

 

Quiroga Ballesteros se está deteriorando mucho más rápido de lo que se esperaba, que ya es decir.

Aunque ya había escrito un artículo sobre el triste futuro de Quiroga Ballesteros tengo que reconocer que hasta a mí me ha sorprendido la rapidez con que se está deteriorando el pavimento de esa calle. Las losas son enormes, mucho más que en Rúanova o en San Marcos, y se ve que eso acelera el deterioro, que además es incluso más notorio que en las otras dos calles y los desperfectos más evidentes.

La calle, que parece una carrera de obstáculos en que los vehículos se ven obligados a invadir la parte de los peatones para evitar conos y piedras levantadas, está ya muy dañada y tiene unas cuantas losas rotas que presentan un estado lamentable pero, lo que es peor, hay otras que por mal asentadas bailan cuando pasas por encima incluso a pie, y es fácil dar con tus narices en el suelo.

A pesar de todas estas circunstancias negativas siempre hay posibilidad de que una mala noticia suponga una oportunidad para el futuro. ¿Qué pasaría si cuando se repavimente Quiroga Ballesteros se aprovechara para corregir el error básico de diseño de esa calle? ¿Por qué no usar esta crisis para cambiar el tipo de suelo y poner uno que permita el paso de los vehículos necesarios sin romperse por todas partes?

Un solado más sencillo, tipo hormigón… no soy técnico, no sé qué materiales se usan pero me refiero al suelo que se ha puesto en Camiño Real, por ejemplo… Las ventajas son múltiples.

Por un lado se abandona la absurda idea de que jamás podrán pasar por ahí vehículos pesados. Un camión de gasoil de una comunidad de propietarios, una grúa para una rehabilitación de un edificio… son ejemplos obvios de necesidades de paso que no pueden generar una rotura de un solado sólo por hacer su trabajo.

Por otra parte, podrían volver a usarse esas calles para restaurar un muy necesario servicio de autobuses urbanos. Que una calle sea peatonal no implica que no se pueda dar un servicio de transporte público, algo que sería importante sobre todo para centros como la Plaza de Abastos y el Mercado.

Incluso podríamos hablar de peatonalizaciones por horarios y fechas. No es descabellado y de hecho se hace en muchas ciudades, donde dependiendo de la franja temporal la zona es o no peatonal y eso ayuda a conjugar las necesidades de reparto y acceso con vehículos y también el disfrute del peatón.

Las posibilidades son muchas. Evidentemente supone una enmienda a la totalidad de las políticas llevadas hasta ahora por Orozco, Lara y Paula, y reconocer que se equivocaron en todas y cada una de las obras que han hecho en el centro en los últimos 20 años, como algunos advertimos desde el primer momento. Pero es que la realidad es tozuda y que metieron la pata lo sabemos todos, sólo falta que se den los pasos para revertir ese error.

Peatonalización, sí, claro que sí… pero bien hecha.

jueves, 10 de abril de 2025

¿Por qué nos siguen acosando por teléfono a pesar de las normas?

En una de esas guerras entre asociaciones “sin ánimo de lucro” pero que perciben cientos de miles, si no millones, de euros de nuestros impuestos, Facua denuncia que la Asociación que gestiona la lista Robinson ha sido víctima de un robo de datos que cifran en los correspondientes a unos 600.000 usuarios. Preocupante, porque se supone que esa lista es, precisamente, para evitar que tus datos circulen por el mundo adelante.

La lista Robinson es un sistema de suscripción voluntaria para evitar que te llamen o te manden publicidad no deseada. Yo mismo estoy dado de alta, aunque su única virtud es que cuando me llama un ser humano y no una grabación, al mencionar que estoy dado de alto cuelgan inmediatamente (sin despedirse, por cierto) y no te insisten machaconamente: “¿pero de verdad no está interesado en ahorrar en su recibo de la luz?”.

El tema de las llamadas al móvil para temas publicitarios, o a saber para qué, es una historia que se repite. A pesar de los reiterados anuncios del gobierno de que iban a terminar con estas prácticas la cosa sigue exactamente igual, o incluso peor.

No hacen más que llegarnos llamadas de números que el teléfono ya nos dice que pueden ser un fraude, aunque no es la primera vez que se equivoca y al coger la llamada es algo que realmente sí te interesa, no porque sea publicidad, sino porque es de una institución o de algo que es importante pero se identifica erróneamente como spam.

¿Para qué sirven esas llamadas en que cuando descuelgas no te hablan y se cortan? Pueden tener tres objetivos: el primero es saber si el número está operativo, lo que se comprueba con llamadas automáticas que ninguna persona real realiza, sino un ordenador. El segundo es obtener información de si descuelgas incluso aunque tu teléfono te avise de que puede ser un fraude, con lo que pasas a un listado de “este es tonto, llámalo” (aunque no seas tonto). El tercero, el más peligroso de todos, es grabarte diciendo algo como “Sí”, que mucha gente usa para responder al teléfono, lo que pueden usar para meter en una grabación en que autorizas el uso de tus datos o la contratación de un servicio.

La tecnología es maravillosa pero como no la controlemos van a acabar por volvernos a todos tarumba. Tanto ordenador llamando por teléfono, tanta llamada fantasma, tanta publicidad no deseada… el día menos pensado dejaremos los teléfonos y nos comunicaremos otra vez por carta.


miércoles, 9 de abril de 2025

Este Centro está muy vivo

Una de las últimas iniciativas llevadas a cabo, un exitoso outlet

Las noticias sobre la defunción del casco histórico de Lugo son tremendamente exageradas, e incluso puede que interesadas.  Eso de que “en el centro ya no queda nada”, es una de las cantinelas que se escuchan desde hace una temporada en la ciudad, por lo que la Asociación Lugo Monumental que tengo el honor de gestionar ha elaborado un censo para rebatir esa impresión con datos reales.

Los datos han resultado sorprendentes incluso para la percepción que había dentro de la Asociación, ya que ningún miembro de la misma contestó correctamente a una encuesta previa que se había llevado a cabo para saber qué ideas previas teníamos todos. De hecho nadie acertó ni dentro ni fuera de la Asociación. 

En el casco histórico de la ciudad hay, actualmente 569 bajos con actividad. Se han tomado únicamente los locales a pie de calle para no “inflar” los datos, ya que la percepción es la que se suele tener al ver locales con acceso directo a la vía pública, por lo que no se han incluido los muchos entresuelos y pisos con actividades de todo tipo: gestorías, peluquerías, academias…

Sin embargo, incluso con esa limitación, el censo refleja unos datos incontestables que indican que la economía de la ciudad pivota en el casco histórico, donde además la mayoría de las firmas son pequeñas empresas locales, lo que da un valor añadido al recinto amurallado.

Mientras que en la mayoría de las ciudades españolas los cascos históricos están copados por cadenas, en Lugo son una pequeña parte frente al gran número de empresas locales que pueblan las calles del centro, algo que en ocasiones no valoramos pero que tiene una importancia vital.

El pequeño empresario es muchísimo más beneficioso para las ciudades que las grandes cadenas, puesto que los ingresos generados repercuten directamente en las localidades que albergan a esas PYMES, que además pagan sus impuestos y crean riqueza en la ciudad. La calidad del empleo también suele ser mayor, puesto que el pequeño establecimiento se basa en la confianza personal y la relación directa con el cliente.

En el casco histórico de Lugo hay un total de 569 actividades empresariales en bajos, de las cuales 310 son comercios, 127 establecimientos de hostelería y 132 empresas de servicios y otras actividades.

Por sectores:

  • En Hostelería cabe destacar que el mayor número de sus 127 locales son restaurantes (33), seguidos por pubs (29), bares (27) y cafeterías (26).
  • El sector Servicios (132 locales) está encabezado por los de estética (18), peluquería (16), bancos (13) y les siguen otros muchos servicios que sólo están disponibles en el casco histórico en tal abundancia.
  • Por último, el principal sector económico es el del Comercio con 310 locales, encabezados por el sector de la moda (104), Alimentación (55) o Joyería (18).

Una cosa que me ha llamado la atención es que ayer, tras publicarse los datos, los comentarios en redes sociales eran acusar a la Asociación de mentir. Se ve que prefieren sus impresiones falsas que los datos reales, sobre todo porque es una bobada de acusación, ya que el listado se ha publicado y cualquiera puede comprobarlo (en www.lugomonumental.es tienen toda la información). Si bien es cierto que en un listado tan largo puede haber algún error (normalmente a la baja, algún local que no se incluyó, porque los que están se repasaron la semana pasada) sería una cuestión puramente anecdótica entre los 569 establecimientos abiertos.

Es evidente que una parte importante del casco histórico, la afectada por las obras, está pasando un momento complicado, pero eso no implica que otras partes de la zona no estén viviendo una buena etapa.

Cuando finalicen los trabajos de Montevideo y Santo Domingo, que el Ayuntamiento ha fechado a mediados de mayo y de junio respectivamente, el empuje de esa zona sea importante y que se superen los problemas causados por esa larguísima “travesía por el desierto”, y que los números mejoren todavía más.

martes, 8 de abril de 2025

La estrategia del matón funciona para USA, Rusia y Sargadelos

El juego es el mismo, sólo cambian el tablero y los jugadores

Salvando las distancias, veo un paralelismo bastante evidente en las estrategias que están utilizando Vladimir Putin, Donald Trump y Segismundo García para lograr sus objetivos. Los dos primeros están en ello, y el tercero ya ha conseguido cosas que de otra forma no habría obtenido.

Putin invadió Ucrania, supuestamente para “desnazificar” el país, pero realmente para quedarse territorios que siempre quiso. Tras muchas declaraciones a favor de los invadidos, el mundo va camino de rendirse a un triste desenlace: el que invade gana porque es fuerte y los demás no tenemos forma de pararle los pies, sobre todo desde que Estados Unidos se ha sumado a la lista de cómplices del nuevo zar, lo que parece un guion de película mala, aunque sea la dura realidad.

Trump y García por su parte han protagonizado una especie de terrorismo económico, cada uno en su escala. Trump tiene acojonado al planeta entero con sus aranceles (de los que deja fuera a países de tradición tan afín a los Estados Unidos como Rusia, Corea del Norte o Cuba) y su mensaje contradictorio de que no va a negociar pero que escuchará qué le ofrecen. García ha logrado, con su amenaza de cerrar una fábrica tan significativa como Sargadelos, que la Xunta pacte con él “flexibilizar dentro de la ley” los requisitos para cumplir con las normativas en su factoría y que le “ayuden”, lo que sospecho que se traducirá en subvenciones. Con dos cojones, hablando mal y pronto.

A Segismundo García por el momento la jugada le ha salido de fábula, a Trump y a Putin ya se verá, aunque sospecho que a la larga los estadounidenses saldrán más beneficiados que perjudicados porque hasta los que han perdido grandes fortunas las recuperarán con intereses en el “país de las oportunidades”, y los rusos podrán pasearse por Crimea, Sebatopol y demás territorios ocupados sin usar pasaporte.

Esta política de matón de barrio, del “todo el mundo va a lo suyo menos yo que voy a lo mío” es un reflejo exagerado de lo que los alemanes llamaban Realpolitik y que se basa en los intereses y el pragmatismo en lugar de la ideología y los principios. Lo popularizó Groucho Marx con su “estos son mis principios, y si no le gustan, tengo otros”.

En la escala local, en el caso de nuestra fábrica de Cervo, la conclusión es la misma: la amenaza es una estrategia efectiva. Yo mismo dediqué un artículo a la pena que me daba la pérdida de Sargadelos, y como este modesto blog, todos los medios de comunicación de Galicia se volcaron en poner de actualidad el riesgo de perder una marca tan simbólica como esa. Le hemos hecho entre todos el trabajo al señor García, que se ha plantado en la Xunta de Galicia, a puerta cerrada, y se ha reunido de tú a tú para poner sus condiciones para cumplir la ley, algo que las pequeñas empresas y los autónomos no pueden elegir porque una vez más se cumple lo de ser débil con el fuerte y fuerte con el débil.

Si usted tiene un pequeño negocio y le hacen una inspección que detecta irregularidades no va a tener la oportunidad de que le “flexibilicen” nada y mucho menos de que le “ayuden” a cumplir las normas. Las va a cumplir sí o sí porque la alternativa serán fuertes multas y quizá medidas más duras todavía. Pero si tiene poder la norma se suaviza.

¿Es un error de la Xunta proceder de esta manera? Sí, pero no porque se colabore con el señor García para que su empresa funcione, sino porque no se le da esa oportunidad de negociar a todos los demás en su situación. El problema no está en aplicar la ley de la forma menos gravosa en este caso, está en no hacerlo en todos los demás.

La otra alternativa de la Xunta era ponerse igual de chulos que Segismundo García y abocar al cierre de Sargadelos, si es que su propietario cumplía su órdago, y eso nos tendría a todos diciendo que “tendrían que haber hecho algo”. El problema, repito, no está ahí, han hecho lo que tenían que hacer siempre que se mantengan dentro del margen legal, está en que no tengan ese interés, ese cuidado y ese cariño con las demás empresas pequeñitas a las que se les aplica la norma a rajatabla aunque suponga su desaparición, porque no sale en portada en la prensa.

El mundo en que vivimos se traduce en que los matones de barrio ganan las peleas, en el sálvese quien pueda. Creíamos que estábamos en una sociedad civilizada, donde las invasiones y la fuerza bruta quedaban relegadas a países supuestamente atrasados y tercermundistas a los que no se prestaba atención porque no nos interesaban lo bastante. También lo pensaban los europeos de los años 40, que incluso veían que Alemania sólo se recuperaba de un tratado abusivo, aunque la cosa acabó como acabó.

La historia está ahí para aprender de ella, pero se ve que no le hacemos el caso que debiéramos.

lunes, 7 de abril de 2025

Kiki

El club de golf de Lugo, una de las aficiones de Kiki

No suelo leer las esquelas, aunque por mi edad ya me va tocando prestarles atención, ya que lamentablemente empieza a aparecer gente que, sin tener un contacto diario ni habitual, me importa y de la que siento mucho enterarme más tarde de lo debido. Me pasó con la madre de un amigo hace algún tiempo y me pasó la semana pasada con el fallecimiento de Kiki, que era como todo el mundo conocía a Francisca García Guijarro.

Cuando teníamos el Verruga había clientes habituales que te caían bien y otros que te costaba aguantar porque de todo hay en la viña del señor, pero sin duda todos teníamos favoritos. Creo que si tengo que hacer un listado, cosa harto peligrosa porque habrá quien se quede fuera, la encabezarían personas concretas como Alfonso Bao, y familias como los Martínez o los Serrano.

La familia Serrano es gente sana, simpática, cercana y familiar, y ahora están pasando por un duro momento con la pérdida de la matriarca de la saga, Kiki. Nuestro cariño y nuestro recuerdo para Rafael, su marido, y sus hijas Cristina, Marta y Luisa.

Kiki era una persona extraordinaria, como lo es toda la familia que creó. Siempre con una sonrisa, siempre con una buena palabra y siempre de buen humor. Incluso cuando tuvo algunos sustos de salud los llevó con entereza y transmitiendo optimismo y esa alegría contagiosa que conseguía trasladar con aquellos ojos llenos de luz.

Espero que allá donde vaya tenga grandes campos de golf en los que jugar y siga siendo la persona alegre y risueña que siempre recordaré como una de las personas más sinceramente cariñosas que he tenido el honor de conocer.

viernes, 4 de abril de 2025

Comenzar con buen pie

Creo que es la primera vez que veo en Lugo una carga y descarga profesional. Hacía mucha falta.

Durante años desde la asociación que tengo el honor de presidir, Lugo Monumental, hemos estado reclamando al Ayuntamiento que asumiera que la casuística del reparto en el casco histórico no es la misma en todos los casos. Comparar, por ejemplo, un camión que reparte tanques de cerveza, o uno que lleva palés de productos a una gran empresa no es lo mismo que el servicio que hace la paquetería, que no sólo reparte compras de Amazon, sino que también recoge los envíos que las pequeñas tiendas del casco histórico manda por hacer ventas online.

La diferencia no está solamente en el volumen de la carga, sino en los horarios necesarios. Evidentemente se puede establecer un reparto para grandes mercancías más o menos acotado, y podríamos debatir en qué horario sería adecuado. ¿A las 8 es muy temprano y a las 12 muy tarde? ¿Da tiempo a hacerlo en menos horario? Eso hay que estudiarlo con mucha más calma de lo que se hacen las cosas habitualmente en la administración, que es lenta pero curiosamente no pausada.

Pero para la paquetería el horario es totalmente distinto. Es necesario tener un abanico más amplio de recogida y reparto si queremos que nuestras tiendas sean competitivas a la hora de mandar sus productos fuera de la ciudad y de recibir de los proveedores sus envíos, porque de lo contrario se les perjudica seriamente.

Las obras del casco histórico eliminaron todas las zonas de carga y descarga de paquetería menos una, la de Campo Castillo, que obviamente es insuficiente para toda la zona. Esto hizo que los profesionales del reparto acudieran a nosotros, que nos dirigimos al Ayuntamiento de inmediato, dada la gravedad del tema, aunque con pocas esperanzas si les soy sincero por experiencias previas. Pues nos equivocamos, fue justo al contrario.

En primer lugar, ya nos recibieron en Secretaría del Alcalde con una sonrisa y una amabilidad que hacía tiempo que no veíamos. Tomaron nota del problema y a las dos horas escasas nos llamaron para ver si por la tarde podíamos vernos con personal municipal en la Plaza del Ferrol. Por supuesto podíamos.

Para nuestra sorpresa la reunión fue con un técnico y el propio Alcalde, que no sólo escuchó nuestros argumentos sino que les dio respuesta inmediata: sí.

Podrá parecerles un tema menor, pero no lo es. Es un cambio de actitud, una apuesta por la colaboración, que nunca habíamos recibido porque si bien con Lara Méndez y Paula Alvarellos comenzamos con buenas palabras, los hechos nunca avalaron esas iniciales intenciones en positivo. Ahora sí.

Soy crítico con las administraciones y seguiré siéndolo, pero ojalá esto siga así y me dejen sin argumentos porque querrá decir que se hacen las cosas bien, e incluso cuando no estemos de acuerdo seguro que se explicarán las cosas de forma que sean razonables.

Empiezan con buen pie.

jueves, 3 de abril de 2025

Que no desaparezca Sargadelos, por favor

Sargadelos es parte de muchos de nosotros. Más allá de una marca, es un icono de Galicia

Sargadelos es una marca comercial, sí, pero también una obra de arte que ha logrado perdurar a través de los años y de los vaivenes de la economía y, lo más importante, ha conseguido ser identificada como algo tan gallego como el pulpo o la fachada del Obradoiro. Pocas empresas tienen un capital semejante, que ahora amenazan con extinguir… aunque dudo mucho que lo hagan.

Ayer todos nos alarmamos por el anuncio de que cerraba Sargadelos. Hoy nos dicen que no, que por ahora hay un cierre de la fábrica de Cervo no oficializado ya que, a pesar de que algunos pregonan lo contrario, la empresa no puede bajar la persiana por las buenas de un día para otro. Si el propietario principal de Sargadelos se quejaba de la burocracia, verá que hasta para cesar la actividad de la factoría lucense hay un trámite y un procedimiento que cumplir.

No puedo dejar de estar de acuerdo con Segismundo García en el exceso de burocracia, papeleo, cortapisas y cargas financieras y documentales que sufren las empresas. Para tener un pequeño comercio o un bar de barrio necesitas un armario de tamaño XXL para guardar los papeles y si pensábamos que la administración digital iba a acabar con eso nos equivocábamos, porque si es más fácil obtener un documento (supuestamente) en vez de 3 te piden 30 con lo que estamos en la misma, si no peor.

Los procedimientos administrativos que tiene que completar cualquier pequeña empresa son una carrera de obstáculos inconcebible, y procesos como la famosa “comunicación previa”, que parecía que por fin aclaraban el panorama ante la lentitud administrativa, se han vuelto en contra del sufrido emprendedor, al que la falta de respuesta no le produce silencio administrativo sino un “ya veremos cuando nos venga en gana” que se traduce en una inseguridad jurídica de padre y muy señor mío.

Pero todo esto, siendo cierto, no justifica el berrinche del señor García, a quien se le han notificado deficiencias que ponen en riesgo la salud de los trabajadores. Eso no hay liberal que lo defienda, porque el liberalismo no es hacer lo que te venga en gana, sino entender que tus derechos terminan donde empiezan los de los demás y viceversa. Vamos, que ni Adam Smith defendería que un empresario puede hacer enfermar a sus empleados.

Más allá del fondo personalista del asunto, me quedo con la tristeza que me produce la posibilidad de que Sargadelos deje de trabajar.

Muchos de mis recuerdos son de Sargadelos. La vajilla que me dio mi abuela, las piezas que me regaló mi madre, el juego de té que Sara nos completó por nuestra boda o el de café de mis cuñados Miguel y Marifé, el de Carles y Jorge, la bombonera de mi cuñada Ana, la que le regaló Fraga a mi abuela Emilia, el zorro que era de mi abuelo Luis o las palomas que fueron el premio de los artículos del Belén de Begonte… son tesoros para mí. Cumplen su función, porque usamos esas cosas (no comprendo una vajilla que sólo sea de exposición) pero cada vez que cojo un plato o una taza en la mano pienso en las personas que me las dieron.

Como yo, muchas personas de Galicia han depositado en Sargadelos parte de su cariño y de sus recuerdos y sería una desgracia para todos que la fábrica cerrase, no porque no vende (es justo al contrario) sino por un déficit en la gestión.

Confiemos en que esto sólo sea un bache, y que pronto recuperemos la normalidad en una cerámica que es mucho más que una empresa.


miércoles, 2 de abril de 2025

Miguel Fernández ficha a Olga Louzao (la vida te da sorpresas, sorpresas te da la vida...)

Miguel Fernández y Olga Louzao. Fotos: El Progreso y El Diario de Pontevedra respectivamente

Ni en un millón de años se me habría ocurrido pensar que Miguel Fernández habría elegido como jefa de gabinete para su alcaldía a Olga Louzao. No porque dude de la valía de Olga, a la que quiero felicitar por su nueva responsabilidad, o de la bondad de la jugada, sino porque directamente no se me pasaría por la cabeza, sin más. Menos aún habría pensado que ella aceptaría, a pesar de que una amiga llevaba años diciéndome que las filas socialistas eran su hábitat natural. El tiempo le dio la razón.

Es una muy buena maniobra para el Alcalde, quien si pretendía dar un golpe de efecto lo ha logrado con creces. Logra “centrarse” al fichar para su cargo de máxima confianza a una persona que durante una década, desde la bancada de la oposición, criticó con dureza y argumentos a los gobiernos de los que el propio Miguel formó parte, y puede interpretarse como el comienzo de una enmienda a la totalidad de lo hecho por Lara Méndez y Paula Alvarellos, lo que, francamente, puede ser bueno para Lugo si se cortan los disparates hechos en los últimos años.

Tengo mis serias dudas de que lo bueno que es esto para Miguel como Alcalde lo sea para Olga. Toda la coherencia de la que hizo gala durante esta década cae por la base. Aquello de que dejaba la política por el fracaso de Ciudadanos y que no se veía bajo otras siglas, lo de las críticas a quienes, según ella, no representaban a los ciudadanos y a los partidos dominantes que habían secuestrado las instituciones… se ha venido abajo con el anuncio de que pasa a ser la mano derecha de un alcalde socialista, cabeza del "bigoberno" (palabras de la propia Louzao), usando una puerta giratoria que le hace dar una media vuelta difícil de explicar para quienes creíamos en su discurso. No hablamos de una afiliada más sino de la exdirigente del partido naranja a nivel autonómico, una figura importante de la casa.

No me entiendan mal. Le tengo mucho aprecio a Olga, sus propuestas siempre me parecieron de sentido común y muy razonables, y la admiré más aún cuando resistió los cantos de sirena de siglas políticas para unirse a listas ajenas en 2023, ante el declive más que obvio de Ciudadanos. La cuestión es que el actual movimiento, que en mi opinión es un paso en falso en lo que respecta a su credibilidad personal, nos puede hacer dudar de si aquella resistencia sólo fue la esperanza de conseguir ser el concejal número 13 con su propia lista y tener la llave del Gobierno, lo que la convertiría en una persona con un poder tremendo.

¿Pensaría lo mismo si Elena Candia fuera alcaldesa y la fichase como jefa de gabinete o estaría diciendo lo generosas que fueron ambas al aparcar sus diferencias? Pues es posible que fuera lo segundo, porque hay un matiz importante: Elena no ha sido Alcaldesa de Lugo y su partido no gobierna en la ciudad desde el siglo pasado, así que Olga no ha estado diez años machacándola desde la oposición, salvo por la animadversión personal que siente por Candia y que ha trasladado manifiesta y reiteradamente. Sí ha hecho eso, dar leña sin cesar, con el PSOE de Orozco y Lara Méndez (que también es el de Miguel Fernández), con lo que es más difícil entender por qué ahora se une a quienes criticaba fundamentadamente y sin piedad.

Hay también un aspecto interno que puede hacer la puñeta a Miguel, pero no como Alcalde. Como les decía al principio institucionalmente es un buen golpe de efecto, pero no sé yo hasta qué punto dentro del PSOE sentará bien que se diga públicamente que “los mejores” están fuera de la casa. Poner de jefa de gabinete, la mano derecha del Alcalde y persona de su máxima confianza, a la portavoz de Ciudadanos y "rescatar" a otras personas de ese partido (de los que no discuto la valía, no me entiendan mal, al revés) puede caer mal dentro de las filas socialistas igual que los simpatizantes del casi desaparecido partido naranja no entendieron que Olga pusiera de asesor a un destacado miembro del BNG, aunque también es verdad que a la hora de votar el afiliado medio es muy disciplinado y coge la papeleta, aunque sea con cierto disgusto. Salvo los de Ciudadanos, que huyeron en bandada.

Veremos ahora qué sale de todo esto. Estoy convencido de que Miguel y Olga trabajarán por intentar hacer lo que creen mejor para Lugo, aunque eso suponga deshacer cosas que se llevaron a cabo en años recientes. Sólo falta saber si lo conseguirán, porque tendrán que vencer la resistencia interna a desdecir a sus antecesores en los cargos que ocupan.

Espero que por el bien de Lugo lo hagan muy bien y les deseo la mejor de las suertes y muchos aciertos, porque nos va a todos mucho en ello.

martes, 1 de abril de 2025

Prevarica tú, que yo no quiero

 

La Federación de Vecinos hizo ayer un aquelarre para demandar a la Xunta de Galicia que deniegue la planta de biogás de Coeses.

Aquí hay dos cuestiones particularmente llamativas. La primera es que se hace ese llamamiento el mismo día en que el DOG publica la denegación de la evaluación ambiental de la planta de biogás de Coeses - AQUÍ EL ENLACE (no sé si les suena el tema, es el mismo del párrafo anterior). Es decir que “exigen” algo que ya está hecho.

Bien es cierto que la denegación no termina el procedimiento administrativo, ya que hay un mes para alegar y después queda la vía judicial, pero es evidente que el ánimo de la administración autonómica no es la autorización a cualquier precio (por mucho que las campañas políticas digan otra cosa) sino cumplir las normativas y redactar los informes de acuerdo a la realidad, que es lo que se ha hecho y por lo que no se ha aprobado el expediente.

Las alegaciones podrán lograr que ser revise el expediente, pero no que se cambien unos informes que ya están emitidos y que son negativos. No cambian de signo por mucho que se proteste. La alegación podría colar en el caso de que hubiera un error en los mismos, o que fueran discutibles en sus conclusiones, pero no lo son. De hecho son tajantes.

Pero la segunda cuestión es más llamativa todavía. Entre los muchos informes previos que dan pie al que finalmente aprobó la Xunta hay no uno, sino dos, emitidos por el Ayuntamiento de Lugo, en los que NO se oponen a la planta de Coeses. Escurren el bulto y dicen que eso no es cosa suya, lo que choca frontalmente con lo que públicamente gritan, pancarta y bocadillo mediante. Piden a la Xunta en público, como partido político y como administración, que deniegue un proyecto al que no se oponen oficialmente. No me digan que no es curioso.

En resumen, lo que la Federación de Vecinos está pidiendo a la Xunta de Galicia es “prevarica tú que yo no quiero”. Que se oponga a la planta de Coeses no porque sea ambientalmente negativa (que es lo que ha hecho, con la ley por delante) sino porque los vecinos no la quieren (recordemos que la planta se planifica en unos terrenos de los que los propietarios son los propios vecinos) pero no se menciona al Ayuntamiento ni se le pide que se oponga en los informes emitidos. Ahí no se pide la prevaricación, sino que se mira para otro lado.

Una nota final, me ha llamado la atención que ni la Sociedade Galega de Historia Natural ni la Federación Ecoloxista Galega hayan emitido el informe que se les solicitó.

La política es una cosa maravillosa cuando no se convierte en una guerra de siglas ni de partidos, y no infectan con subvenciones la voluntad de las personas. Aquí tienen un ejemplo de lo contrario.