Cuando se esconde un éxito hay que preguntarse el motivo

Observen con detenimiento ambas fotos. La de la izquierda es de la web municipal, la de la derecha de El Progreso

A pesar de lo que me gustaría, la cosa esta de trabajar me obliga a madrugar mucho, por lo que leo la prensa a primerísima hora y a veces hasta me veo en la necesidad de cambiar el artículo que tengo programado para ese día porque hay algo que me llama mucho la atención. Hoy es el caso.

Ayer hubo una conferencia que se presumía interesantísima y a la que lamentablemente no pude ir, a cargo de Felipe Arias, sobre las excavaciones arqueológicas en Lugo hasta 1986. Es la primera de una serie a la que confío poder ir en el futuro, ya hablaremos de eso. Comprenderán que si no asistí malamente les puedo hablar de la conferencia en sí misma, pero la cuestión que les traigo es otra.

Fíjense en las dos fotografías que les pongo a continuación. Una, la que está a color, es de la página web municipal del Ayuntamiento de Lugo. La otra es la publicada hoy por El Progreso. El acto es el mismo, el lugar también… pero no así la distribución del público. En la oficial la sala está llena, ocupando prácticamente la totalidad del espacio, en la de El Progreso está abarrotada.

Sacando el hecho de que no me coincide la gente sentada en las butacas, lo que puede explicarse porque la mayoría se cambiaran de asiento por razones que desconozco*, lo que me llama poderosamente la atención es que se ve muchísima más gente en la foto de El Progreso que en la que publica la web oficial del Ayuntamiento. ¿A qué se puede deber esto?

Se podrá decir que la foto municipal se hizo antes de llenarse de todo la sala, y es una posibilidad, pero mi instinto arácnido me dice que no van por ahí los tiros, porque el ayuntamiento, como institución política que lamentablemente es, vende éxitos para cosechar votos y la sala abarrotada debería atraer más que una “solamente” llena.

¿Acaso la foto es de otro día? Sería raro, porque hoy día casi todos los móviles tienen cámaras excelentes (y los que los representantes públicos manejan no son de gama baja precisamente) así que también sorprendería que no pudieran hacer foto el día de autos.

¿Puede ser que quieran esconder algo? Esta teoría tiene una explicación. Ver a la gente sentada en las escaleras se puede interpretar bajo dos prismas, no necesariamente contradictorios entre sí: el de un gran éxito de convocatoria por parte del propio Ayuntamiento y del conferenciante Felipe Arias (del interés de la charla no dudo ni medio segundo) pero también el de la extrañeza porque el público se tuviera que sentar en las escaleras lo que, hasta donde yo sé, no es acorde a la legalidad. ¿Acaso se superó el aforo permitido para la sala? ¿No podían haber trasladado el chiringuito al patio central cubierto en que tantos actos se hacen ahora que se han olvidado ya del MIHL y de todo lo que hacían en el mercado? ¿Qué pasaría si hubiera un problema y se demostrara que había gente de más en la sala? ¿Qué sucedería si fuera un particular el que superase su aforo? Multas, sanciones, denuncias… tenemos para elegir.

Se rumorea, e insisto en que es un rumor no comprobado, que la Vieja Cárcel no tiene seguro de responsabilidad civil porque ninguna compañía quiere asumir los riesgos. De ser cierto es sorprendente que se atrevan a utilizarlo, y más aún si como aparenta la fotografía de la prensa han superado con mucho el aforo permitido para esa sala.

Es una posible, incluso probable explicación de por qué la web municipal “esconde” el abarrote. Porque no se debería haber producido.

* Soy poco partidario de editar los artículos una vez publicados  pero por testimonios de personas que estuvieron se aclara que la foto de El Progreso es de las últimas filas y la del Ayuntamiento está hecha desde la parte delantera, por eso no encaja la gente. De todas formas en la municipal no se ve a nadie sentado en las escaleras de la parte de atrás y tendrían que verse  por el ángulo, así que sí es cierto que están hechas en momentos diferentes.