miércoles, 27 de agosto de 2025

Lugo ¿ciudad inteligente con contadores de agua tontos?

Lugo presumía en el año 2017 de la obtención de más de 4 millones de euros para hacer una “ciudad inteligente”, una “smart city”, que incluía un 60% de financiación del Estado para hacer cosas maravillosas como la gestión inteligente de aparcamientos en superficie o la modernización de las lecturas de contadores de agua. Casi diez años después, ni lo uno, ni lo otro. Lugo siendo una ciudad “tonta” a estos efectos.

Lo de la obligación del cambio de contadores se sabe desde hace al menos 5 años. En 2020 se aprobó la normativa que establecía un plazo máximo que vence el 24 de octubre de este año para cambiar los contadores que tuvieran más de 12 años de antigüedad. La Ley de Metrología establece multas de hasta 5.000 euros por no realizar dicho cambio, que habrá que ver quién pagaría llegado el caso. Como siempre, dejamos todo para última hora.

Otras ciudades, como Elche por poner un ejemplo, pidieron fondos del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia de la Unión Europea, financiado con los fondos Next Generation, consiguiendo que los 3,2 millones de euros del coste de digitalizar todos los contadores de agua se pagasen con 2,1 millones de la Unión Europea y 1,1 de la empresa mixta que gestiona el agua. En Lugo se han gastado esos fondos en las mal llamadas Caldas, el carril bici, la casita de madera que no vale para nada y la peatonalización llena de coches del casco histórico. Cuestión de prioridades.

La diferencia de gestión es la clave. Mientras en unos ayuntamientos han utilizado las subvenciones europeas para resolver problemas en otros se han gastado en crearlos, como ha sido el caso de Lugo, donde nos han metido en una hipoteca en piedras que seguiremos pagando hasta que se gaste otra fortuna en quitar losas para meter un suelo que resista el paso del inevitable tráfico que hay en una ciudad con cuatro grandes aparcamientos públicos en su zona “peatonal”. Y en poner verde, ya que estamos.

Pero no hay consecuencia alguna, porque la principal responsable de este desaguisado huyó a Santiago a parapetarse en el Parlamento de Galicia y sólo pasa por aquí para hacerse fotos de campaña y decir que la Xunta es mala, que para eso cobra (y mucho).

No hay responsabilidades en las cagadas públicas. Ni las hubo en la aberración del Gaiás, un proyecto que venía de tiempos de vacas gordas pero que aún así era un disparate en aspectos como traer las piedras de Brasil (algo que hizo el bipartito, por cierto, porque tuvieron desacuerdos con las empresas contratistas iniciales que eran gallegas), ni en la triste y absurda gestión del Cuartel de San Fernando, ni en el fracaso del centro de nuevas energías del Ceao (que ahora quieren convertir en aparcamiento…), ni en los mencionados disparates de Caldas, carril bicil o edificio de madera, ni en la que se prevé una nueva burrada con dinero público: convertir la fábrica de la luz en un centro de gastronomía.

Aquí no pasa nada. El dinero público no es de nadie y el sufrido ciudadano no tiene más remedio que sentarse atónito a ver lo que hacen con sus votos y cómo los transforman en subidas de impuestos para pagar caprichitos y chorradas varias, mientras los contadores del agua de Lugo siguen siendo tontos. Tan tontos como quienes toman decisiones que nos hacen la puñeta a todos.

martes, 26 de agosto de 2025

El 25 aniversario de la declaración de la Muralla amenaza con ser un acto de partido

La Muralla que debía unirnos pero se usa como arma política.

No sé si la frase es suya, pero se atribuye al visionario George Orwell aquello de que “la historia la escriben los vencedores”, porque la recogió en una columna publicada a mediados de los años 40. Le pega mucho, con esa visión triste, terrible y lamentablemente acertada que tenía del futuro.

En mi primer día de vacaciones me encontré con una publicación oficial del Ayuntamiento de Lugo en redes sociales que me hizo recordar esa frase. En la foto se veía al Alcalde de la ciudad, Miguel Fernández, acompañado por José Ramón Gómez Besteiro y Lara Méndez, hablando de que se iban a preparar actos por el 25 aniversario de la declaración de la Muralla como Patrimonio de la Humanidad. Sí, yo tampoco sé qué pintaban en la foto Besteiro y Lara, pero allí estaban.

El Alcalde, que como tal sí está muy bien que salga en esta foto, acompañado de dos personas que tuvieron lo mismo que ver que Bob Esponja con el reconocimiento de la UNESCO.

Pero la presencia en la imagen de dos personas que tuvieron la misma implicación que el Kaiser Guillermo en la declaración como patrimonio de la Muralla no es lo grave, lo terrible es el texto que acompaña al publirreportaje:

Ojo a la cuestión. Lo importante para celebrar el 25 aniversario de ese hito no es destacar el trabajo realizado por el equipo redactor del proyecto que culminó con un reconocimiento mundial, ni, por supuesto, la incansable tarea llevada a cabo por el entonces alcalde, Joaquín García Díez, que logró recabar los apoyos de Manuel Fraga y de la Casa Real para alcanzar el objetivo. No, no, lo destacable es “el trabajo realizado por los sucesivos gobiernos socialistas”. Con dos cojones, permítanme la grosería. Ni Orozco se atrevió a tanto, ya que usaba aquella fórmula tan sutil de "esto lo hemos logrado entre todos", que así nadie le rechistaba.

Que la cuenta oficial de una administración pública se refiera a un partido político es algo tan tristemente habitual que a mucha gente le pasa desapercibido, pero no es aceptable. Que en el aniversario del reconocimiento de la Muralla por la UNESCO se desvíe la atención hacia quienes no movieron un dedo para lograrlo, es un insulto. Como cada vez que insisten en atribuir a Basadre la invención del Arde Lucus, algo que me juego la cabeza a que van a poner el año que viene en todas partes por el 25 aniversario de la fiesta. Así se escribe la historia.

Entiendo que les escueza que Joaquín fuera quien hizo todo el trabajo por la Muralla, pero deberían aprender de él porque siempre ha dicho que la iniciativa no fue suya sino de la oposición. No recuerdo ahora mismo si fue una propuesta del BNG o de Carlos Dafonte 1, pero sí que es cierto que la idea de pugnar por el reconocimiento partió de un partido que no estaba en el gobierno. La diferencia es que en lugar de actuar como se haría hoy, ridiculizando la propuesta y votando en contra, el entonces alcalde, a pesar de ser el único que tuvo mayoría absoluta y podía hacer lo que quisiera, aceptó entusiasta la idea y se implicó de una forma brutal.

Joaquín cuenta anécdotas del trabajo que se hizo como que cuando fue a un foro internacional con diapositivas de la Muralla (de aquella es lo que había) le preguntaban si era un montaje porque pensaban que no podía existir ese monumento, tal era el grado de desconocimiento. También relata que un alto cargo de otra administración le preguntaba por qué estaba tan implicado con el reconocimiento de la UNESCO “si eso no trae subvenciones”. Ya ven el panorama al que se enfrentaba… aunque lo hizo con éxito.

La política cutre de partidos llevada a las administraciones no sólo es una aberración, sino que es una torpeza. Joaquín está jubilado, así que reconocer su labor no tendría nada de malo. Al contrario, sería un acto de justicia que le daría al Alcalde un barniz de objetividad y de elegancia, que se le podría pegar de García Díez. También podría aprender de su antecesora, la fallecida Paula Alvarellos, que el año pasado acudió a un homenaje que se le organizó a Joaquín y reconoció en su discurso sus muchos logros. En el mundo en que vivimos fue un gran esfuerzo por parte de Paula ir a aquella comida, y precisamente por ese tipo de acciones es por lo que todos la recordamos con cariño y respeto.

En todo caso, veremos qué organizan para noviembre, pero visto lo visto me temo que va a ser un acto de partido, no de ciudad.

No hay forma de que se hagan las cosas con sentidiño.


1 NOTA: Me indican que la propuesta formal en el Pleno Municipal la hizo Branca Rodríguez Pazos, del BNG, y que Cándido Sánchez Castiñeira también lo presentó en el Parlamento de Galicia desde Coalición Galega. Que conste ;)

lunes, 25 de agosto de 2025

Un ¿demandado? monumento a Paula Alvarellos

A la izquierda, la ubicación elegida para el monumento, sustituyendo esa fuente del Parque Rosalía
Foto: El Progreso

Volvemos de las vacaciones y vamos a empezar a retomar la actividad hablando de un tema polémico, que por cuestiones derivadas de la naturaleza humana son los que más nos gustan a todos.

La semana pasada el gobierno local anunció que iban a construir un monumento a Paula Alvarellos, nuestra anterior alcaldesa, fallecida este año, y justifican la decisión por la “demanda social” que hay para tal dedicatoria. No sé muy bien quién lo ha pedido, pero francamente, no lo veo.

No me entiendan mal, creo que Paula era una persona dinámica y muy trabajadora. Tenía una buena relación con ella y tuvimos varios encuentros a solas en que dejaba ver la persona tras el cargo y nos entendíamos razonablemente bien a pesar de las críticas que, como es lo suyo, le dirigía. Creo que heredó un papelón terrible de su antecesora, y que hizo todo lo que pudo para reconducir las cosas dentro de lo que podía, que no era mucho porque los contratos y los proyectos no son fáciles de reformar. Por ejemplo, en Santo Domingo logró ampliar la zona verde modificando el proyecto original que se cargaba los árboles y metía un carril por allí, aceptando el punto de vista que muchas organizaciones como Adega, el Colegio de Arquitectos y Lugo Monumental expusieron y defendieron. Con otras cosas como las Caldas o el carril bici no pudo hacer nada porque ya estaban ahí, pero sinceramente creo que intentó hacerlo bien. Quizá no eligió bien a personas de su equipo (las que podía elegir, que otras también las “heredó”), pero ella tenía disposición y actitud.

La muerte de Paula fue traumática por muchos motivos: por ser sorprendente, por las circunstancias (en un acto público), por su juventud… Nadie se lo esperaba y nos dejó a todos durante mucho tiempo descolocadísimos.

Sin embargo, y a pesar de lo dicho y el gran respeto que siento por su memoria, no entiendo el tema del monumento. Paula sólo pudo estar poco más de un año en la Alcaldía y durante este tiempo no pudo desarrollar gran cosa porque la administración es lenta y acepta mal los cambios.

Si su fallecimiento hubiera sido a causa de su actividad me parecería razonable, como un bombero que fallece rescatando a una persona de un incendio o un policía al que matan evitando un atraco. Se podría argumentar que la presión del cargo colaboró con el infarto que nos la quitó, pero es difícil de asumir esa explicación porque por esa regla de tres a cualquier persona que fallezca tras ejercer un cargo de responsabilidad se le podría aplicar la misma lógica.

Orozco, que fue alcalde quince años, no tiene ni placa, ni calle ni monumento. No soy yo su mayor fan ni mucho menos, pero creo que de hacer un monumento a un alcalde lo merece más él o, por supuesto, Tomás Notario, Vicente Quiroga o, sobre todo, Joaquín García Díez. Sin embargo viven, y en esta extraña sociedad nuestra es un demérito insalvable para hacerles homenajes.

La política es una realidad paralela en que se da más importancia a los colegas de profesión que al resto. No me cabe en la cabeza, por ejemplo, que Conchita Teijeiro tenga una estatua por iniciativa privada en la sede de ASPNAIS pero que no tenga un reconocimiento público que, lamentablemente, también llegaría tarde aunque aún viva.

Hace unas semanas en este mismo blog criticaba la medalla de Galicia otorgada a la Princesa de Asturias, no porque tenga nada contra la monarquía o contra la moza, sino porque no me parecía que tuviera sentido ese peloteo a quien no ha hecho nada meritorio para recibirlo salvo ser heredera de la Corona. El caso de Paula es algo diferente, porque sí hizo su trabajo, pero no sé si se le otorga por la labor realizada o simplemente por haber fallecido.

Estamos en una surrealista dinámica que confunde los conceptos de “desgracia” y “mérito”. Paula falleció como Alcaldesa y eso fue un terrible acontecimiento que nos creó un trauma colectivo, pero no le otorga automáticamente la categoría de “monumentable”, e insisto, con todo el cariño y el respeto que le tengo, me parece una cuestión más política que otra cosa.

La unánime tristeza por la muerte de Paula se empaña ahora con esta iniciativa, que abre el debate de "¿por qué se hace esto?", algo que no venía al caso y que, realmente, no aporta nada positivo para nadie.

viernes, 1 de agosto de 2025

¿Tiene sentido la tasa turística?

Lograr que la masa apoye una subida de impuestos es sencillo si se plantea acertadamente

Una de las formas más clásicas de conseguir que alguien responda lo que queremos es la forma de plantear la pregunta. Es prácticamente irrelevante el tema e incluso también las convicciones de la persona a la que se dirigen las preguntas, porque si se hace bien el planteamiento un altísimo porcentaje de la población responderá lo que el que las formula desea, con lo que el resultado es predecible y manipulable. Por eso soy poco partidario de las encuestas, porque no te cuentan el proceso sino únicamente un resultado que es fácilmente finalista.

Ahora mismo está sobre la mesa el tema de las tasas turísticas. Un nuevo impuesto que se disfraza de “compensación” para la ciudad destino del turismo de masas pero que se consulta a los locales, con lo que la respuesta más probable es que se posicionen a favor de cobrarla porque ellos no la van a pagar… en su ciudad. Es como Trump y sus arenceles, como los pagan los demás, a él se la sopla y la mayoría de sus ciudadanos aplauden con las orejas porque no ven las consecuencias de esos movimientos.

Coruña y Santiago acaban de implantar una tasa turística y Vigo está en ello. Seguramente son las tres  grandes ciudades con más turismo de Galicia y es muy golosa la tentación de poner un impuesto que sus votantes no van a sufrir directamente, con lo que no tiene repercusión en las urnas. Quizá sea al revés, lo venden como "los de fuera te pagan".

He leído un debate en que se plantea para Lugo y claro, la respuesta más habitual es “si lo pagan en otros sitios por qué no aquí”, que es más o menos la aplicación de aquello que nos decían de pequeños: “¿y si tus amigos se tiran por un puente tú también lo haces?”, con lo que el argumento no es tal.

No me entiendan mal, creo que esa tasa tiene cierta lógica en determinados casos. Por ejemplo,  en municipios como Foz, Barreiros, Miño, Sanxenxo… que aumentan espectacularmente sus poblaciones en época estival, podría tener una justificación real cobrar esa tasa. Estamos hablando de ayuntamientos pequeños que tienen una presión desproporcionada en la demanda de servicios, lo que no ocurre en las grandes ciudades. Santiago, por ejemplo, sustituye los estudiantes por turistas, por lo que la demanda de servicios probablemente sea similar, aunque ahí sí que cogido con pinzas porque puede que sea la única ciudad en que es justificable la tasa si bien con mucha incertidumbre.

El problema surge cuando quieres filtrar. Si, por ejemplo, mi hermana que vive en Madrid quiere venir a su ciudad de origen a pasar la Navidad y, por lo que sea, quiere reservar en un hotel, ¿es una turista? Pues legalmente sí, así que pagará esa tasa por venir a su Lugo con su familia. Igual que los profesionales que viajen y duerman fuera, o los que vengan al HULA a acompañar a sus familiares. Le llaman “tasa turística”, pero realmente es un impuesto más, que se suma al IVA y demás que ya pagan los que vienen en cualquier cosa que adquieran, coman o usen. Una subida de impuestos disfrazada de “ecotasa”, que todo lo que sea verde vende.

Pero el debate no nos lo plantean diciendo: “¿le parece a usted bien tener que pagar una tasa cuando pernocta en cualquier ciudad que no sea la suya?”. Dicho así la cosa cambia, ¿a que sí? Porque no es lo mismo cobrar a otros que pagar uno.

Es como el tema de que nos cobren por entrar en la Catedral de Lugo, cuyas restauraciones y mantenimiento ya pagamos generosamente los ciudadanos a través de nuestros impuestos, o por subir a la Muralla. Siempre que añadan la coletilla de “pero los residentes en Lugo estarían exentos” ya se ganan el apoyo popular, porque así la fiesta la pagan otros, que es lo que realmente interesa. Mientras pague el pato un tercero, que cobren hasta por respirar.

Tal vez el debate debería ser diferente. Tal vez deberíamos hablar de que las tasas sólo fueran legales en poblaciones en que el turismo exige un esfuerzo adicional al ordinario, y prohibir por ley que las instituciones y monumentos que sostenemos con nuestros impuestos nos cobren entrada, tales como museos, catedrales, iglesias y monumentos similares. ¿O acaso creen ustedes que los lucenses somos los que sufragamos el mantenimiento de la Muralla? Pues no.

Igual de mal que me parece que me quieran cobrar por ver la Catedral de Sevilla, el Museo del Prado, el Alcázar de Segovia o la Alhambra de Granada puesto que ya los estamos sosteniendo día a día, me parece mal que quieran cobrar a los de fuera por subir a la Muralla o pasear por nuestras calles.

Pero ya ven, la masa, en modo lemming, justifica la creación de más impuestos… en lugar de exigir que se gestionen bien los que ya pagamos abundantemente.

jueves, 31 de julio de 2025

Tomé hace el ridículo y Candia gana sin siquiera estar presente

Tomé, a la derecha, en el pleno en que hizo el ridículo más espantoso
Foto: El Progreso

Cuando una persona preside una institución sin tener mayoría absoluta, lo hace en virtud de un pacto para que los que no ganaron sumen más que los otros para, así, fabricar lo que las urnas no les dieron. Es perfectamente legal, e incluso legítimo, y así se gobierna desde hace años en Lugo, tanto en el Ayuntamiento como en la Diputación.

El problema de este sistema es que no estamos bajo un gobierno, sino bajo dos, que en ocasiones no sólo no están bien coordinados, sino que se contradicen abiertamente, creando duplicidades y enfrentamientos que son poco adecuados y que incluso van contra los intereses de la ciudadanía, que paga dos veces el pato de ese reparto de tartas. Ambas partes intentan esconder como pueden sus diferencias, como es natural, ya que la imagen que hay que proyectar es la de colegueo y buen rollo para que no se acabe el chollo, ya que hay mucha gente que depende de esta situación… pero a veces las cosas no salen como están previstas.

El PSOE provincial, dirigido por el señor Tomé, tuvo la ocurrencia de llevar a pleno una iniciativa para “exigir” a Elena Candia que dejara todos sus cargos por el archivo de una causa penal que, aseguran, ella inició con un “anónimo”. Ya traté en su día lo falso de que un escrito, con nombres y DNIs, se pueda considerar un anónimo. Otra cosa es que llegase anónimamente al grupo del PP, pero una vez en sus manos Candia tenía no sólo la obligación moral sino la legal de trasladarlo a fiscalía.

De hecho, la propuesta del PSOE ignora completamente que el Fiscal sí apreció indicios de delito, por lo que abrió una investigación y lo presentó en el juzgado, y Su Señoría también coincidió con ese criterio, por lo que hubo un juicio. Pero no se pide la dimisión del Fiscal (que, como dijo Pedro Sánchez, todos sabemos de quién depende) ni la renuncia de quien abrió la causa penal, sino la de Elena Candia. ¿Por qué? La respuesta es obvia: le tienen pánico.

Pero lo más ridículo de todo esto es que Tomé cometió un error de cálculo fatal: o no consultó previamente con el BNG la iniciativa o no la ató lo suficiente, porque los nacionalistas se abstuvieron y dejaron solo a un PSOE que tiene menos diputados que el PP, por lo que la iniciativa no salió adelante, haciendo el Presidente el ridículo más espantoso posible.

Ha logrado, con este pequeño teatrillo, que se vea que está más solo que la una, e incluso tuvo suerte porque si hubiera sido en la sesión anterior ni siquiera tendría mayoría con el BNG porque tres de sus diputados le dejaron plantado, aunque ya arreglaron eso tal y como refleja el BOP, dándoles más pasta a los “ausentados” para tapar la vía de agua interna que tienen montada. Lo de pagar con fondos públicos las adhesiones dentro del partido es de coña, pero, al igual que los pactos de fuerzas minoritarias, perfectamente legal.

De hecho, ha reforzado a Candia, quien daba por sentado (como todos) que la propuesta saldría adelante y, aunque no tiene el menor valor legal, sería un titular no muy agradable. Pero las circunstancias han dado la vuelta a la tortilla y ahora quien se debería poner colorado (si es que tiene capacidad para ello) es el Presidente de la Diputación, que ha conseguido el dudoso logro de perder una votación contra alguien que ni siquiera estaba presente.

Utilizar a las instituciones para hacer guerra política está feo, pero hay algo todavía peor: intentarlo y no lograrlo, porque no sólo es feo, es ridículo.

miércoles, 30 de julio de 2025

¿Qué se puede decir más que GRACIAS?

¿Qué se puede decir más que GRACIAS?

Ayer el “Milagro” de San Vicente fue un éxito absoluto, un año más. Cada vez más personas se acercan a la fuente, y de forma ordenada cogen su vaso de vino y dejan sitio a otros, lo que demuestra que no todo es esa zona negra que a veces creemos que es el triste resumen de nuestra sociedad.

  • Gracias a Viliga, la bodega que nos regala el Coto do Frade, el vino que se pone año tras año en la fuente y que está muy bueno, tal y como se demuestra en que los vasos quedan vacíos.
  • Gracias a Miguel, el Alcalde, a Rubén, Teniente de Alcalde y a Elena, portavoz del PP, por haber venido a poner el vino y a divertirse con nosotros.
  • Gracias al Ayuntamiento por dejarnos la fuente, ponernos vallas y contenedores y a Cultura por el estupendo grupo musical (Son de Lugh) que animó la velada y que supone una diferencia importante en la fiesta.
  • Gracias al Orixe do Campo por su colaboración en varias cosas, pero sobre todo por esa perpetua disposición a echar una mano en todo lo que haga falta.
  • Gracias a los colaboradores, a Alfonso, Ramón, Quique, Toñi, Susana, Inés, Alba, Andrea, Patricia, Puri, Antonio, Damián y Pepa. Sin vosotros no se habría podido hacer.
  • Gracias a los 166 asociados de Lugo Monumental. Sin vosotros sería imposible que estas cosas se celebrasen.
  • Gracias al público, que se ha portado ejemplarmente, que ha dejado los vasos en los contenedores y que ha aguardado pacientemente su fila hasta que se agotó el vino.
  • Y gracias, siempre, a Marcos, por tu paciencia y soporte.

Espero no haberme dejado a nadie.... si es el caso, mis disculpas.

Nos vemos el 29 de julio de 2026 en una nueva edición, esperemos, del “Milagro” de San Vicente en que manó vino la fuente.


 


martes, 29 de julio de 2025

Hoy vuelve el ''Milagro'' de San Vicente en que manó vino la fuente

 

De nuevo Lugo Monumental ayudará un año más a San Vicente a hacer manar vino de la fuente barroca de la Plaza del Campo, y será hoy martes día 29 de Julio a las 20:00. Salvo excepciones muy contadas, cada año el día de Santa Marta, patrona de la Hostelería, se celebra esta fiesta cada vez más popular.

Esta divertida tradición hace que, gracias al patrocinio de Viliga (Vinos y Licores de Galicia) el público disfrute gratuitamente del vino que mana la monumental fuente barroca de San Vicente de la Plaza del Campo de Lugo, del siglo XVIII, donde se repartirán miles de vasos a los asistentes.

Con la colaboración del Ayuntamiento de Lugo habrá un grupo que pondrá la animación al evento y que después seguirá haciendo de pasacalles en la zona con lo que la diversión está asegurada más allá del propio “milagro”.


El mecanismo:

El mecanismo empleado para hacer el “Milagro” es relativamente sencillo y cuenta con tres grandes bidones en que se deposita el vino, que a través de tubos alimentarios sale por los tres caños de la fuente barroca de San Vicente.

Hay que destacar que el vino no toca la fuente en ningún momento lo que repercute tanto en un uso garantista del monumento, como en la perfecta higiene del evento, algo que la Asociación cuida meticulosamente.

Magnífica foto del "Milagro" hecha por Jesús Burgo

Premios de Lugo Monumental:

Como es tradicional, en este acto se entregarán con una muy sencilla ceremonia, los premios de la Asociación Lugo Monumental:

  • Toda una vida en la hostelería: Café del Centro

El café del Centro está situado en la plaza Mayor nº 9, en una casa cuyo arquitecto fue Manuel Bellido quien también diseñó el edificio del Círculo de las Artes. Lleva allí desde el año 1903, fundado por la familia Vila, bajo el nombre de Café Moderno, llamado así por los avances tecnológicos de la época, al contar con doble luz eléctrica y de acetileno y modernidad de registradoras y cafeteras, como destaca el famoso escritor Ánxel Fole en su libro Cartafolio lucense. Desde el verano de 1920, tras una gran reforma, se llama Café del Centro, nombre que mantiene hasta hoy.

En el año 1945 hay constancia de que tomaba café Araceli y Juan Pujol, matrimonio de espías que hicieron cambiar el rumbo de Europa al engañar a Hitler haciéndole creer que el desembarco era en el estrecho de Cale y fue en Normandia, lo que cambió el curso de la guerra.

En el café del centro se ruedan tres películas, La vieja música, El rey del rio y Hitler Garbo y Araceli.

Es uno de los establecimientos con más solera de la ciudad, y sin duda un punto de referencia tanto para locales como para turistas.

 

  • Comercio singular: Confecciones García

Confecciones García es un comercio familiar que lleva 70 años compartiendo vivencias con sus clientes en el centro de la ciudad amurallada. Fue fundada en 1955 por Constantino García y Felicitas Andión en la transitada calle San Pedro de Lugo. Son ya tres generaciones las que han crecido, junto con el negocio, hasta nuestros días.

Es la mercería más antigua de la provincia de Lugo y una de las que tienen más historia en España.

La política de empresa siempre ha sido trabajar con artículos de calidad, priorizando la fabricación nacional y gallega, vendiéndolos a un precio inmejorable.

La cercanía en el trato de sus empleadas con los clientes también es uno de sus puntos fuertes, por eso, aunque incluso tienen página web, siempre dan esa posibilidad de contactar con ellos para cualquier orientación en alguno de los artículos que se encuentran en su tienda on-line.

 

  • Socio de honor: Al Peatón Desconocido

Lugo Monumental elige ocasionalmente un socio de honor, que no es anual sino cuando hay circunstancias que lo hacen oportuno.

En esta ocasión se ha designado al Peatón Desconocido como socio de honor, en agradecimiento a todos los lucenses que durante las largas obras siguieron acudiendo al casco histórico y manteniendo los locales del centro a flote a pesar de las grandes dificultades e incluso los accidentes.

 

  • También habrá un galardón “sorpresa”, que se revelará durante el evento.

¡No se lo pierdan!

lunes, 28 de julio de 2025

Lugo, ciudad de pequeño comercio

La Sombrerería da Costa de Lugo, más de 100 años al servicio de sus clientes.
Foto: La Voz de Galicia

Hay una película, Demolition Man, en que en un futuro distópico todos los restaurantes son Pizza Hut, única que había sobrevivido a una «guerra de franquicias». Nos reíamos… pero ya no tanto. Si la ciudad de Lugo destaca por algo comercialmente es por la enorme variedad, cantidad y calidad de pequeños comercios que no sólo sobreviven, sino que afloran día a día.

Sí, es cierto, discutibles actuaciones públicas, todopoderosas cadenas y áreas comerciales supusieron un duro golpe que las plataformas online han acentuado, pero aun así ahí están muchos de nuestros vecinos con sus negocios, resistiendo contra viento y marea.

Es falsa esa frase de que «en el centro no queda nada», como demostró el censo realizado por Lugo Monumental: 569 establecimientos con actividad sólo dentro de Murallas. La inmensa mayoría pequeños comercios y hostelería, lo que hace que Lugo destaque, aunque muchas veces los de aquí no nos demos cuenta. Y no sólo en el centro, los barrios también tienen mucha vida comercial que ojalá permanezca.

El alma de las ciudades la crean sus habitantes, monumentos, costumbres… y sus pequeños locales, los que son diferentes de cualquier otro sitio y que no hay más que ahí. Cada euro gastado en el pequeño comercio redunda en empleos locales, impuestos locales…

No se trata de hacer campaña o de dar pena, se trata de usar el sentido común y evitar que algún día todos los restaurantes sean Pizza Hut.

Artículo publicado en La Voz de Galicia del día 27 de julio de 2025

miércoles, 23 de julio de 2025

Un futuro muy negro

La polarización es el pan nuestro de cada día, y la inseguridad ayuda a que la gente se vaya, cada vez más, a los extremos.

Lugo es una ciudad tranquila, o eso nos dicen.

Hay un tío que está por la calle con un altavoz portátil a toda pastilla y que habla solo en voz bastante alta y que, como lo mires más de dos segundos, empieza a meterse contigo. Recientemente tuvo un episodio agresivo en una tienda del centro, donde entró, no quería salir, y asustó tanto a la empleada que ésta sigue de baja porque está aterrorizada con volver a su puesto. Ayer mismo tuve yo un encontronazo con él. Iba con mi perro por la Plaza de España y se empezó a meter conmigo. Evidentemente lo suyo es seguir sin hacerle caso, pero no todos los días uno está igual y me encaré porque me tiene harto. Estoy hasta la coronilla de tener que tolerar que un supuesto chalado me insulte cuando le sale de las narices sin poder decir ni pío. La cosa acabó en nada, pero a saber qué podría haber pasado porque este tío no tiene nada que perder salvo que lo metan en un lugar donde tiene tele gratis y comida caliente… durante poquito tiempo, claro, que seguro que también es “vulnerable”. No se puede hacer nada porque el hombre “es así y además es peligroso”, así que no pasa nada, él a lo suyo y no le digas nada que te puedes meter en un lío.

Una chica con un niño pequeño y embarazada se dedica a entrar a robar en tiendas. Está más que identificada y se sabe perfectamente quién es. Hay vídeos suyos cogiendo dinero de las cajas registradoras con toda la tranquilidad del mundo, grabaciones nítidas en que se le ve la cara perfectamente, y pruebas de que robó en otros establecimientos. No se puede hacer nada porque es “vulnerable”, así que no pasa nada, ella a lo suyo y no le digas nada que te puedes meter en un lío.

Un tío relativamente joven se dedica a mover los contenedores de sitio por toda la ciudad. Un periódico le dedicó dos páginas de entrevista por recoger colillas (lo que es caer en gracia, ¿eh?) y, envalentonado, ha pasado a ir gritándole al que se cruza e insultando a quien el viene en gana. No se puede hacer nada porque “está mal de la cabeza”, así que no pasa nada, él a lo suyo y no le digas nada que te puedes meter en un lío.

Ahora se ha puesto de moda entre los chavales liarse a bofetada limpia… entre amigos. Rollo “club de la lucha”, en que aplican tácticas como el “mataleón”, que es algo tan divertido como estrangular a tu amigo hasta hacerle perder el sentido. No se puede hacer nada porque “son cosas de jóvenes”, así que no pasa nada, ellos a lo suyo y no les digas nada que te puedes meter en un lío.

Y así todo.

Lo que antes eran frikis que te daban lástima porque veías que realmente son personas que no están bien (“cucú de la cabeza” se ve que se dice ahora) y pensabas que eran merecedores de ayuda se están convirtiendo en amenazas para la gente “normal”. ¿Y a qué le llamo gente “normal”? Pues en este contexto a la que va por la calle sin acojonar a aquellos con los que se cruza y que no tienes que esquivar para evitar “meterte en un lío”.

Reconozco que me molesta particularmente que estas personas, en muchas ocasiones agresivas, hacen lo que les viene en gana sin ningún tipo de consecuencia. No sólo es que no puedas decirles nada, es que si llamas a la policía por casos de robos, intimidación o similar se limitan a “identificar” al mangante, que se va de rositas, sin mayor problema. El que seguramente lo tenga serás tú.

Ver a quienes madrugan todos los días para levantar la persiana de su negocio, o a quienes hacen su vida normal sin meterse con nadie llevando a sus hijos al cole o al parque, atemorizados por si a uno de estos elementos le da por elegirlos y alterar su normalidad diaria sin saber cómo va a acabar la cosa, no ayuda.

Ya no entro siquiera en el tema de las ayudas a los mangantes, de la gente que abandona su puesto de trabajo porque, literalmente, cobra lo mismo sin hacer nada o se coge bajas fingidas porque sabe que lo peor que le puede pasar es que le despidan a la vuelta, con una jugosa indemnización, y se vaya al paro a vivir de los impuestos de los demás (casos reales, nada de "fake news" ni leches). Es la promoción descarada del apesebramiento a costa del que cotiza.

Tampoco voy a entrar en otros temas como el de una sociedad cuyas normas permiten que una persona que ha luchado toda su vida para tener una vivienda (o que la ha heredado, me da igual, que ahora parece que la herencia es un crimen) se encuentre con que se le mete gente en casa y no puede hacer absolutamente nada aunque vendan, roben o quemen sus pertenencias y recuerdos. La amenaza del "juzgado" no vale de nada con quienes no tienen nada que perder pero el daño real a quienes soportan esas situaciones sólo aumenta la tensión y la sensación, que sentimos muchos, de que esto se está convirtiendo (o se ha convertido ya) en una casa de putas.

¿Y cuál es la consecuencia de todo esto? Que la gente se echa en manos de los ultras. Pasó con Podemos, que diagnosticó bien la situación aunque dio recetas erróneas, y está pasando con Vox, que hace exactamente igual pero desde el otro extremo del panorama. De hecho, sorprendentemente, hay un trasvase de votos bastante considerable de unos a otros, porque no se trata de que sean ultraizquierda o ultraderecha, se trata de que son extremos y la gente es lo que va buscando porque los “moderados” y “tradicionales” no les están ayudando.

¿Cómo pretenden ustedes que reaccione quien se ve en la más absoluta indefensión cuando tenga que elegir papeleta? Pues muchos se verán tentados a coger la de quienes le prometen “orden”, ya que los otros que antes decían cosas razonables pero sin la amenaza de montar campos de concentración a las afueras de las ciudades ahora se la cogen con papel de fumar para evitar que les tachen de “fascistas”. Y así se ganan unas elecciones.

El problema es que los extremos, ¡oh sorpresa!, son extremistas por definición, y las cosas acaban como acaban. El ciudadano medio se está polarizando cada vez más porque eso es lo que nos están empujando a hacer, con nuestra complicidad. Los discursos moderados no venden, y quien abre los telediarios es el que dice la burrada más grande.

Si les soy sincero estoy muy preocupado. Por la situación que tenemos pero también por los cantos de sirena de los que la van a “solucionar”, porque históricamente las recetas tendían claramente a una “solución final”.

¿Y qué podemos hacer? Eso es lo más triste de todo, que no lo sé. Muchos sentimos impotencia. La de no vernos representados por partidos que se han convertido en nidos de ladrones y puteros, que dicen hoy blanco y mañana negro según su conveniencia oportunista de cada momento y que cifran su éxito a que el otro la cague todavía más para ver si por eliminación les toca pisar moqueta.

Hubo intentos probablemente nobles de crear alternativas, como UPyD o Ciudadanos pero fueron cayendo y sus líderes están cómodamente alojados en la “vieja política” que antes tanto criticaban y de la que ahora son sus principales valedores.

Repito: ¿qué se puede hacer? Poco. Esperar a los acontecimientos y, si son religiosos, rezar a su dios para que esto no acabe como todo apunta a que va a acabar: mal.

Sí, hoy el artículo me ha salido negro, pero es que es el color del que veo el futuro.

martes, 22 de julio de 2025

La ''playa fluvial'': argumentos y excusas

Una duda que me asalta: ¿es correcto empezar las obras si, como dice el Ayuntamiento, aún no tenían permiso para la playa?... Foto: La Voz de Galicia

Para el común de los mortales la diferencia entre un argumento y una excusa es que el argumento es que usan “los míos” y una excusa lo que aplican “los otros”. La pobreza de la interpretación es tan grave como las consecuencias de aplicar las gafas de color a lo que leemos, y aunque todos lo hacemos en mayor o menor medida, la cosa está en ser razonables en la medida de lo posible.

La “playa fluvial” de Lugo no se verá este año a pesar de que ya se habían empezado “las obras”. Pongo todo entre comillas porque qué quieren que les diga, llamar “playa” a una puñetera plataforma de cinco por dos metros, en una ciudad de 100.000 habitantes me suena más a ridículo que a acción de gobierno. Igual que considerar “obra” poner unos tablones rematados con un cacho de césped artificial puesto de aquella manera.

El problema de hoy en día es que ya no se bareman los argumentos de unos u otros sino que se cree ciegamente lo que dicen de un lado porque son los que toca defender, y se ignoran los del otro. En este caso nos encontramos con dos posturas enfrentadas:

El Ayuntamiento afirma que renuncia a la “zona de baño” (no me sale ponerlo sin comillas, me resulta tan surrealista que no puedo) por las trabas administrativas que le impone la Xunta de Galicia. Afirman que se pidieron “en tiempo y forma” los permisos necesarios y que ahora la Xunta emite un nuevo informe con “múltiples solicitudes” para impedir que la rampa se abra hasta septiembre… vamos, como el año pasado.

Por su parte, la Xunta indica que ayer, el mismo día en que el Ayuntamiento renunciaba públicamente a esta “zona de baño”, concedieron la licencia para abrirla.

Esto último parece ser suficiente argumento en contra de la postura municipal, ya que si se concede la licencia el 21 de julio no cabe pensar que no puede estar “hasta septiembre”. Pero más allá de ese tema, ya que ayer tampoco es que fuera una fecha muy adecuada para abrir el acceso al río, hay que ver el cronograma de solicitudes y la intervención de diferentes administraciones, ya que incluso los municipios son víctimas de la maraña burocrática que nos impone tanta administración superpuesta.

Veamos la línea temporal, hasta donde podemos conocerla por lo publicado por la Xunta (si desconfían, recuerden que en otras ocasiones el Ayuntamiento negó las afirmaciones de la administración autonómica y salieron escaldados porque se demostró documentalmente que la Xunta tenía razón).

  • El 21 de mayo la Confederación Hidrográfica pide a Patrimonio Natural de la Xunta que informe sobre la instalación de la rampa. El 28, es decir, en una semana, se informa favorablemente pero poniendo ciertas condiciones por los mejillones de río (especie protegida) que habría que trasladar como pasó el año anterior. 
  • El 30 de junio la Confederación resuelve favorablemente la instalación de la rampa del 15 de junio (obsérvese que la resolución es de 15 días más tarde) y el 15 de septiembre, pero condicionado a que Patrimonio natural autorice el traslado de los mejillones.
  • El  7 de julio (una semana después de la resolución de la Confederación) la empresa Biosfera, en nombre del Ayuntamiento (obsérvese que no lo hace la administración sino que han privatizado la gestión de este tema) pide hacer una prospección para ver los mejillones que hay, lo que se autoriza el 8 de julio (al día siguiente), se ejecuta, y se informa el día 14.
  • El 17 de julio la empresa solicita autorización para trasladar los mejillones, pero no acreditaban actuar en nombre del ayuntamiento, lo que se les requiere el mismo día y aportan la documentación el 18 de julio, viernes. El lunes 21 se autoriza el traslado… y el ayuntamiento renuncia.

Es decir, los “retrasos” de la Xunta son los siguientes: 5 días hábiles para el informe inicial, 5 días hábiles para autorizar, ejecutar e informar sobre la existencia de los mejillones, y 1 día hábil para autorizar el traslado. 11 días de tramitación.

Si tenemos en cuenta que la Confederación Hidrográfica tardó 23 días hábiles en autorizar la instalación de la rampa una vez recibidos los informes pertinentes, vemos que supera por más del doble los tiempos de la administración autonómica pero el Ayuntamiento interpreta que la Xunta es la que dilata los plazos.

¿Tendrá algo que ver que la Confederación depende del Estado, y el Gobierno es “amigo”? Despejen ustedes esta dificilísima incógnita.

Todo esto suena a excusa. Incluso me atrevería a decir que es un alivio para el Ayuntamiento poder echar la culpa a la Xunta para deshacerse de una foto ridícula como la del año pasado con el “Palomares” cutre que se tuvieron que marcar para poner la rampa ya iniciado septiembre, que esa es otra. En 2024 inaugurar la tontería esa a primeros de septiembre les parecía un “éxito”. Ponerla a funcionar ahora a finales de julio, es “inaceptable”.

Evidentemente aquí hay argumentos y excusas. Juzguen ustedes.

lunes, 21 de julio de 2025

Una Medalla de Galicia que no es mérito sino peloteo

No comprendo los méritos para recibir esta medalla... Foto: El Correo Gallego

El peloteo es algo que no sólo no me gusta, sino que me resulta directamente molesto, quizá porque mi manía de decir lo que pienso hace que sea incompatible conmigo. Eso hace que algunas personas “importantes” se sientan incómodas cuando hablamos de temas en los que no estamos de acuerdo, aunque con honrosas excepciones que no voy a mencionar aquí para no caer en ese enjabonamiento que estoy criticando.

Las Medallas de Galicia son el más alto honor que nuestra comunidad autónoma puede otorgar a alguien, en reconocimiento a sus méritos al servicio de Galicia. Da igual que se trate de un tema social, económico o cultural (aunque esto último tiene su propia distinción, la medalla Castelao), se valora y premia un servicio a esta tierra.

Antes había varias categorías: oro, plata y bronce, y mi abuela Emilia recibió la de bronce en 1998 en reconocimiento a su trabajo levantando de la nada un pequeño restaurante, el Verruga, que se convirtió en un icono de la ciudad de Lugo y aún me atrevería a decir que de Galicia. Décadas batallando como una leona y esforzándose como titular de un negocio en una época en que las mujeres normalmente no eran empresarias acreditan sus méritos como representante de una generación de luchadoras que abrieron camino para las demás.

Ante este panorama uno ha de preguntarse: ¿qué méritos tiene la Princesa Leonor para recibir esta distinción? ¿Qué ha hecho que sea tan importante para Galicia como para que se le otorgue nuestro principal reconocimiento? ¿Empezamos una nueva carrera de peloteo preventivo para que, cuando herede la Corona, se acuerde de lo majos que somos por aquí?

No soy republicano, ni de lejos. Tampoco es que sea un monárquico acérrimo, pero no tengo nada contra nuestro sistema político en ese sentido. Si yo pudiera cambiar la Constitución no barrería a la Familia Real, ya que me parece más práctico tenerlos ahí que a un presidente de república (conociéndonos a los españoles, principalmente). Cambiaría las circunscripciones electorales y las reduciría por debajo de la provincia, pero dejaría la monarquía parlamentaria ahí como algo histórico que puede ser beneficioso en este país.

Así que mi extrañeza e incluso oposición a la concesión de la Medalla de Galicia a la Princesa no se debe a una ideología republicana, sino simplemente a valorar la distinción como lo que se supone que es: el reconocimiento a las personas que han hecho algo meritorio por Galicia.

La medalla se ha dado a la Princesa tal vez como una esperanza de futuro, pero francamente me parece insultante para todas aquellas personas que sí han hecho mucho por Galicia y que no la han recibido. Si bien casi siempre hay gente que merece más las distinciones que aquellos a los que se le otorgan, al menos la comparación debería ser mínimamente sostenible. En este caso no lo es.

Las carreras para poner a institutos, calles, barcos y cualquier otra cosa nombres de personas que no han hecho otra cosa que nacer en el lugar adecuado me parecen un disparate. Otra cosa es que hagan cosas buenas y luego te salgan rana, como pasó con el emérito, al que este país le perdonaba que fuera un picha brava porque lo veíamos como un rasgo campechano de quien colaboró activamente con la Transición, pero que perdió toda credibilidad cuando nos enteramos de que se dedicaba a matar elefantes y a meter mano a la caja (hay que decir que presuntamente, que como no se le puede juzgar no hay sentencia que le condene). 

El peloteo es malo. Ahora todos los ayuntamientos, diputaciones, fundaciones y clubes de todo pelaje se empeñan en ocultar que le habían dado sus máximas distinciones a Franco, o insisten en que “les obligaban”. No se lo creen ni ellos. No les digo que no hubiera algún caso suelto pero este país es muy de ensalzar a la gente para después disfrutar viendo cómo se despeña. En aquel momento tocaba peloteo, aunque ahora queda feo, y podemos destacar casos tan sangrantes como el del F.C. Barcelona que no sólo le dio una medalla a Franco, sino tres: en 1951, en 1971 y en 1974, y aunque en 2019 “se la quitaron” la historia está ahí para vergüenza de los que van de alternativos por el mundo.

Oscar Puente recibió la V de vecino en Lugo, hecho que se comenta por sí mismo porque sus únicos méritos hasta el momento han sido… ninguno. Pero hay que hacer la pelota al partido que paga las subvenciones de la asociación, que en la calle hace mucho frío.

Es el peligro de las distinciones prematuras (bueno, en el caso del Barcelona y Franco no tan prematuras). A Obama se le dio el premio Nobel de la paz a los pocos meses de llegar a la Casa Blanca y ya ven, ostenta el triste récord de ser el único presidente de la historia de Estados Unidos que pasó sus ocho años de mandato en guerra y que no sólo mantuvo las que heredó, sino que atacó a otros países como Libia, Pakistán, Somalia y Yemen. No sé, a mí algo no me encaja.

Cuidado con las medallas y distinciones, porque se te pueden volver en contra con una facilidad pasmosa y lo importante cuando las das es, si se demuestra que el premiado no es quien parecía, que al menos tuvieras argumentos para otorgarla más allá de hacer la rosca. En el caso de la Princesa Leonor, no se me ocurre ni uno.

Si fuera yo, sólo otorgaría las Medallas de Galicia por acuerdo mayoritario del Parlamento de Galicia, con la participación de todos los grupos y voto favorable de una mayoría muy reforzada (más que la absoluta). Así sí serían "de Galicia", y si no se da todos los años, tampoco pasa nada.

jueves, 17 de julio de 2025

Siete años perdidos en la trasera de San Fernando

Durante 7 años las plantas han sido las únicas usuarias de este magnífico espacio en pleno centro.
 

El Museo de la Romanización de San Fernando, a este paso, no se hará jamás. La Xunta ha puesto sobre la mesa medio millón de euros para los dos que hacen falta para reformar el tejado y las fachadas (que el propietario del edificio, el Ayuntamiento de Lugo, dejó deteriorar por tener el edificio abandonado) y así poder optar a fondos europeos para hacer el MVRO.

Sin embargo, a pesar de que llevan dando vueltas a este tema durante lustros, incluso décadas, se podía haber aprovechado alguno de los espacios para algo que no sea afear nuestra ciudad. Les hablo concretamente de la gran extensión en la trasera del Cuartel, que en el futuro será (supuestamente) la fachada principal del Museo.

Esa gran explanada podría haber albergado durante todos estos años un parque infantil, unas canchas de baloncesto o de pádel… cualquier cosa que llene la zona de vida y evite que los niños tengan que jugar a la pelota en medio de San Marcos, con el peligro que entraña allí el paso de los coches (sí, pasan coches, pocos, pero pasan) y el dar un balonazo a alguien que simplemente pasee por la zona, además del riesgo de descalabrarse contra alguna de las muchas piedras absurdas que hay en medio de la plaza.

Esa propuesta se hizo en el año 2018 y la respuesta fue que no se iba a ejecutar porque sería tirar el dinero, ya que la instalación del Museo en el cuartel era “inminente”. Siete años después la “inminencia” ya ven la que es.

Tenemos ahí un espacio muerto del asco, sucio, que cada cierto tiempo se convierte en una jungla de hierbajos que hay que arrancar, y que se ha reducido a ser un canil no oficial y un pedregal que no se puede usar absolutamente para nada.

Todo porque no quisieron hacer caso a una propuesta que, por una propineja (visto lo que se gastan en otras tonterías) podría haber dado vida a esa zona y aprovechado un espacio que, siete años después, ya habría rentabilizado la inversión sobradamente.

En otros sitios se hacen estas cosas. En Lugo… no.


miércoles, 16 de julio de 2025

Quo vadis, Miguel?

Miguel Fernández, Alcalde de Lugo. Foto: www.lugoxa.com

Cuando comienza el curso escolar hay cierta ilusión con ver a los amigos, estrenar los libros que, cuando éramos niños, forrábamos para que durasen más (¿se sigue haciendo eso o es muy vintage?), empezar a usar esos lápices nuevecitos con olor a madera colocados en el estuche (esto sí estoy seguro que es muy viejuno)…

Esas ganas de hacer las cosas bien se mantenían todo el año en el caso de los más aplicados pero en el común de los demás se iban apagando lentamente porque la rutina es lo que tiene, que te apetece cada vez menos repetir todos los días las mismas cosas.

Si se trata de cursos posteriores en el mismo centro esa ilusión es menor. No es igual empezar en un cole o un instituto nuevo que volver al que ya conocías de años anteriores.

Pues en Lugo tenemos alcalde nuevo y se nota que tiene ganas de hacer las cosas bien… lo que también les pasaba a sus antecesores. Otra cosa es que pueda mantener esa ilusión y las buenas intenciones durante todo su mandato, porque la experiencia nos dice que no siempre ha sido así.

Miguel Fernández parece un buen tipo. Es amable, tranquilo, educado, sabe escuchar y parece fiable. La semana pasada tuvimos una reunión con él desde la asociación Lugo Monumental, que tengo el honor de presidir, y, aunque este blog es mío y no de la asociación, comprenderán que tampoco pasa nada por comentar lo que me pareció su actitud en ese tiempo que estuvimos con él.

La maldición de Miguel es la misma que sufrieron Lara y Paula: heredaron una administración complicada, con unos problemas tremendos y encima no se podían quejar porque los antecesores eran “de los suyos”. Bien es cierto que si Lara recibió un municipio económicamente saneado y con desafíos razonables, Paula se comió el marrón de lidiar con unas obras que era imposible ejecutar bien, con la caja vacía, y con bobadas anunciadas como lo de la fábrica de la luz, que no hay por dónde cogerlo.

A Miguel le ha tocado lidiar con menos problemas. Llegó con las obras prácticamente finalizadas, la subida de impuestos a los lucenses ya aprobadas por sus antecesores, y aunque tiene marrones que comerse (como aprobar la ordenanza de la ZBE y la de terrazas, solucionar la puñetera playa fluvial o seguir con la estupidez de proyecto de la fábrica de la luz) lo tiene más o menos sencillo en comparación a lo que se enfrentó Paula Alvarellos.

Me da la impresión de que es consciente de las muchas cosas que se han hecho mal durante estos años y que las quiere cambiar. Algunas no puede, claro, porque por ejemplo las horrorosas obras del casco histórico no se pueden volver a levantar aunque creo que sí tiene la intención de darles “retoques”. También se ve que quiere hacer cambios en las relaciones con colectivos como el Colegio de Arquitectos o asociaciones críticas como pueda ser la nuestra. Eso es bueno. Escuchar a quien no está de acuerdo con uno es el camino, no sólo para abrirse a nuevas posibilidades, sino para matizar nuestras posturas porque casi nadie tiene razón siempre.

Evidentemente Miguel tampoco es que sea nuevo. Lleva de concejal muchos años y de portavoz de su partido muchos de ellos. Las críticas a lo hecho no dejan de ser autocríticas, porque él también votó a favor de los disparates que se han hecho, y eso hay que recordarlo. No parece razonable usar la defensa de "yo estaba allí y a puerta cerrada ya les dije que eran locuras pero nadie me hacía caso", porque no deja quedar a nadie muy bien.

Tampoco podemos olvidar que está bastante solo. Tiene siete concejales de su partido, de los cuales al menos tres, quizá cuatro, no están operativos o no cuentan con su confianza (por razones de enfermedad o por enemistades personales manifiestas y profundas) y tampoco es que cuente con un gran apoyo de “la otra parte” del Gobierno, aunque intenten vender la moto de que las relaciones van estupendamente. No es cierto.

Así que ahora veremos qué hace Miguel. Si la corrección de rumbo se queda en intenciones o si realmente va a llevar a cabo una enmienda a la totalidad de la herencia de Lara, algo que ya empezó a hacer Paula aunque las desgraciadas circunstancias no le permitieron continuar.


martes, 15 de julio de 2025

¿Por qué no hay bofetadas por los puestos de la Plaza de Abastos y el Mercado de Quiroga Ballesteros?

La Plaza de Abastos no tuvo ningún interesado en los 15 puestos vacíos que se ofertaron. Habrá que preguntarse el motivo... Foto: La Voz de Galicia
 

Como era previsible, ha sido un fracaso la licitación de los puestos que se han ofertado en la Plaza de Abastos y el Mercado de Quiroga Ballesteros. Nadie ha optado a ninguno de los 15 puestos que hay disponibles en la Plaza y sólo dos personas han presentado oferta para tres de los 7 del Mercado (un empresario solicitó dos), que se dedican en exclusiva a hostelería algo muy necesario porque, como todos sabemos, en Lugo lo que faltan son bares.

La gestión de la Plaza y el Mercado no puede ser más desastrosa. Se hace totalmente a espaldas de los placeros y no sólo es que no cuenten con ellos, es que la tendencia es a torpedear a los que no son gratos a la concejala responsable (esto último es una forma de hablar), como ocurre con el bar que hay en la Plaza al que se le retiraron las mesas en la Pandemia y siguen sin reponerse porque a la señora concejala no le sale de las narices, por ser finos.

Los políticos buscan la foto, la innovación para parecer modernos y ser “pioneros”, que es algo que está más que sobrevalorado. Han orientado, por capricho de la concejala nacionalista que lleva el tema, el Mercado exclusivamente a hostelería, pero no han modificado los horarios de apertura del espacio por lo que la contradicción es obvia: tener un local de hostelería que cierra por las tardes a las 20 y que el fin de semana no puede trabajar más que el sábado a mediodía es la receta para el fracaso más absoluto.

Sin embargo, nuestros dirigentes son totalmente impermeables a las críticas razonadas y al sentido común y les apuesto dinero a que saldrán a decir que su modelo es el acertado porque los únicos que han pujado por puestos son hosteleros. Como si dos iniciativas para 22 puestos tuviera algún tipo de aspecto positivo.

La Plaza y el mercado se están hundiendo gracias a la brillante gestión de quienes tienen la responsabilidad de sacarlos adelante. Han demostrado que su tendencia dictatorial al “ordeno y mando” es la receta del más absoluto fracaso, y el problema es que se están cargando unos espacios que en Lugo funcionaban solos, sin que la administración se meta donde no sabe.

Orozco hizo un túnel entre el aparcamiento de Santo Domingo y la Plaza, algo que es está muy bien en una ciudad como la nuestra, en que los inviernos son largos y la lluvia es habitual… pero claro, si ese aparcamiento (propiedad del Ayuntamiento, por cierto) es el más caro de la provincia es complicado que sea un lugar habitual en que estacionar para hacer la compra.

Es una pena que aquellas campañas de la federación de vecinos exigiendo precios razonables para el aparcamiento del HULA no se hagan extensivas a estos estacionamientos, pero claro, no olvidemos nunca que el color de la administración es inversamente proporcional a la firmeza de las reivindicaciones de los apesebrados que dependen de las subvenciones.

En fin, que con un poco de suerte n les dará tiempo a destrozar totalmente Plaza y Mercado, e incluso puede que consigan hacer algo con las subvenciones de la Xunta de Galicia que han pedido para lograr el título de “mercado excelente”, aunque será muy difícil que lo hagan si, como hasta ahora, su labor va por el camino de la confrontación con los placeros.

lunes, 14 de julio de 2025

El futuro del casco histórico

Santo Domingo tras la reforma

Tras dos años de obras y muchos millones de euros gastados la pregunta parece sencilla: ¿está el centro mejor que antes de empezar con todo este sarao? Pues simplificando la respuesta, sí. También sólo faltaría, ¿no les parece? Pero la verdadera pregunta que nos tendríamos que hacer quizá no sea esa sino si la reforma ha logrado que sea el mejor que podía ser.

¿Se han eliminado todos los coches que se podrían haber suprimido? En número seguramente sí, porque es casi imposible quitar alguno más. Los residentes, clientes de aparcamientos, vehículos de reparto y el largo rosario que ya están ustedes hartos de leer cada cierto tiempo, van a seguir entrando al casco histórico y no van a dejar de hacerlo, como es lógico.

Lo que seguramente no se ha logrado es alcanzar un diseño de los recorridos que los reduzcan al menor trayecto posible, como ocurre en el caso de la Plaza del Ferrol, donde los clientes del aparcamiento tienen que dar una vuelta absurda a la plaza para entrar, y dar más vuelta por otras calles para salir, cuando había una solución que implicaría un recorrido de menos de 100 metros entre murallas.

¿Y qué pasa con lo verde? Sí, la intervención de Paula Alvarellos, que recogió el sentir de las protestas sociales, amplió la zona verde en la parte baja de Santo Domingo, pero eso no impide que se note una sensación de “piedra y más piedra” en la parte alta de esa plaza, en San Fernando o en Montevideo, donde se ha optado por pequeñas jardineras sin césped en lugar de áreas verdes que sí darían algo más de naturaleza a la zona.

El Ayuntamiento insiste en decir que se han aumentado las zonas verdes, pero hasta que los árboles crezcan va a ser difícil que la gente se lo crea. Seguramente tienen razón numéricamente, y siempre que cuenten como zona verde las cosas esas que han metido en las calles, pero la supresión de los rosales de San Fernando, el tejo junto a la Iglesia de San Froilán y los enormes árboles que había frente al instituto mixto van a ser difíciles de revertir durante un largo tiempo.

¿Qué futuro le espera a la zona? Esa es la gran pregunta que todos nos hacemos. Personalmente, a pesar de ser un gran crítico de todo lo que se ha hecho y cómo se ha hecho, soy optimista. El casco histórico no deja de ser lo que es, el centro de la ciudad, y como en todas partes eso tiene un plus de importancia porque es a dónde se dirigen los visitantes y la zona que más fuerza tiene comercialmente, incluso a pesar de los graves problemas que todavía tiene la zona.

Se ven locales en obras, y edificios en reparación. Los “brotes verdes” que tanto ansiábamos parece que empiezan a asomar y el futuro tal vez no sea brillante, pero tampoco es oscuro como hasta hace unos meses.

Ahora toca intentar ser positivos, echar una mano para corregir los muchos desafíos a los que nos enfrentamos y ver qué se puede hacer con el horrendo resultado que ha habido en algunas zonas y el favorable de otras.

Es el momento de mirar al futuro… aunque eso no implique hacer borrón y cuenta nueva, porque esa no es una opción inteligente.


viernes, 11 de julio de 2025

Prosiguen con la búsqueda de Isaura

Descripción y fotos de Isaura, la mujer desaparecida, difundidas por la familia
 

Ayer a las 17:00 salió un dispositivo de búsqueda con unos 180 voluntarios y drones para intentar encontrar a Isaura, la señora de 85 años que falta de su casa desde el martes por la tarde. Hoy ese dispositivo se reactivará a las 10 de la mañana ya que lamentablemente no la encontraron hasta el momento.

Voluntarios y policía en el dispositivo de búsqueda de ayer. Foto: El Progreso

La última noticia que se tiene de ella es una grabación de una frutería de la Avenida de la Coruña, que no es la zona por donde habitualmente sale a caminar ya que vive en Fingoy y su área habitual de paseo es ese barrio, Montirón y el centro.

La imagen captada nos permite asegurar que cuando desapareció vestía pantalón oscuro, calzado claro, una camisa clara, un jersey rosa oscuro y un gran gorro color crema.

Es una mujer enjuta, de 1,40 de altura, un peso de unos 40 kilos y el pelo canoso.

Si la ven por favor llamen inmediatamente a los teléfonos de contacto 626990619 o 617779815, a la policía (091 o 092) o a emergencias (112).

Se preguntará por qué tengo tanto interés en este tema, si la conozco o a alguien de su familia. Pues no. No sé nada ni de Isaura ni, hasta donde yo sé, conozco a nadie de su entorno, pero no me quiero ni imaginar por lo que están pasando sus familiares y lo mal que lo puede estar pasando Isaura, que seguramente se ha desorientado y a saber por dónde se metió.

De verdad que ojalá aparezca y que esté bien, porque todos estamos sintiendo esta búsqueda como propia.

Si se quieren anotar para el dispositivo de búsqueda llamen al 982147739, ya que hay que apuntarse previamente para que no sea un caos.

¡Mucha suerte!

miércoles, 9 de julio de 2025

Lamentable estado del parque de Paradai (y no hablemos de los ''huertos'')

¿Huerto o selva?

Hace algo más de tres años, en febrero de 2022, publicaba un artículo sobre los huertos urbanos que la Diputación tiene en el parque de Paradai. Lamentaba su abandono y el triste estado que presentaban.

Tras todo este tiempo la situación, lejos de mejorar, ha empeorado notablemente y no sólo están abandonados los famosos huertos, que costaron un ojo de la cara (como todo lo público, que con el dinero de todos es fácil despilfarrar), sino que todo el parque está a monte en pleno mes de julio.

Cuando hice el anterior artículo la caseta de mantenimiento estaba cerrada, ahora está clausurada con unos tablones, supongo que para evitar que la ocupen o cualquier barbaridad. Las parcelas de los huertos estaban dejadas, ahora están con unas silvas que superan la altura de la valla con mucho. El parque estaba más o menos cuidado, ahora está como si fuera pleno      monte…

La importancia de lo público no sólo radica en construir como locos, ampliar y meter dinero en más y más cosas, hay que tener en cuenta el futuro y el mantenimiento de lo que se hace, porque de lo contrario lo único que logramos es despilfarrar recursos públicos.

Unas vecinas que estaban por allí me dijeron que desde la Pandemia los huertos se dejaron a su suerte y la Diputación decidió hacer otros en un lugar diferente… pero aunque hubiera un buen motivo para llevar a cabo ese cambio (que tal vez habría sido más adecuado si trasladasen las casetas que dejaron abandonadas), eso no justifica el descuido del parque.

Ver bancos en los que no te puedes sentar porque la maleza lo impide es un síntoma tan evidente de dejadez y descuido que creo que la cosa no merece mucho más comentario. 









martes, 8 de julio de 2025

Nostalgia

A pesar de su constancia, el tiempo es algo totalmente subjetivo en cuanto a su percepción. Recordamos claramente cosas que sucedieron hace décadas pero no algunas del mes pasado, que se nos escapan porque no fueron lo suficientemente importantes como para fijarse en nuestro cerebro.

En julio de 1985 se estrenaba “Regreso al Futuro”, una de las películas que marcó no sólo la carrera de sus protagonistas sino que supuso el nacimiento de un icono de los años 80 que se mantiene fresco a día de hoy. Salvo por su optimista e irreal visión de un año 2015 en que los coches volarían y los monopatines flotarían, se nos presentaban conceptos como las paradojas temporales o las consecuencias de nuestros actos en lo que nos depararía el porvenir.

El paso del tiempo se refleja en cosas como esta: piensen que entre el estreno de esa película y hoy hay más distancia que entre el fin de la II Guerra Mundial y la salida al cine de “Regreso al Futuro”, lo que nos hace sentir verdaderamente mayores a los que recordamos claramente habernos sentado en el Gran Teatro (en paz descanse) a ver a Marty McFly y a Doc Brown rescatando sus vidas futuras.

Piensen que Los Beatles se separaron en 1970, hace 55 años, o que hace 63 años del accidente de coche que hizo que Julio Iglesias abandonase su carrera en el fútbol en el Real Madrid y, tras una recuperación improbable (no contaban con que volviera a caminar), iniciase una de las carreras más productivas de la historia de la música.

Lo que para algunos son recuerdos muy lejanos para otros son añoranzas de juventud que perciben como cercanas, en esos caprichos de la memoria que convierten las modas en ciclos en los que Alaska pasa del olvido (ojo a la hábil utilización de su nombre) a renovar su éxito como símbolo, una vez más, de una generación que ha pasado de la rebeldía a la nostalgia.

Todo esto explica que, siguiendo aquello de que “cualquier tiempo pasado es mejor” nos resistamos a los cambios. El ser humano es feliz en su zona de confort, aunque de vez en cuando tiene arranques que le llevan a hacer modificaciones en su entorno, y quizá por eso en Lugo hay obras que se reciben con poca simpatía. Pero, por otro lado, afirmar que el cambio por el cambio es bueno tampoco es realista.

¿Dónde está el punto de equilibrio? Esa es justamente la cuestión. Peatonalizar es bueno, totalmente de acuerdo, pero a nadie se le pasa por la cabeza renunciar a los coches y llegar al a peatonalización total, por lo que ha de haber un punto medio que sea el objetivo a lograr. ¿Se ha superado ese punto? Es discutible.

Para unos el centro es demasiado peatonal y para otros siguen pasando demasiados coches. Evidentemente las cosas no parece que se hayan hecho de la mejor forma posible y veremos qué resultado da. Ahora, con lo que nos han hecho, toca intentar ser lo más positivos que podamos y buscar soluciones a los muchos problemas creados… y ver qué pasa con los que los han creado.

En cuanto a la nostalgia, no es necesariamente mala, pero marquemos ciertos límites, y para disfrutar de lo que fue sólo nos falta que Mecano se reúna otra vez para dar conciertos.


lunes, 7 de julio de 2025

Las obras sin terminar y ya están pensando en levantar lo hecho

Santo Domingo, epicentro del proyecto "Corazón Verde" (supongo que se refiere a cómo están poniendo a los responsables)

Una vez (casi casi casi) terminadas las obras de Santo Domingo nos encontramos con que se abre un periodo de consultas… para reformar el resultado. Se ve que el artículo del arquitecto Santiago Catalán el pasado 23 de junio en El Progreso surtió efecto y que para la administración no todas las voces críticas son iguales o, si lo son, unas son más iguales que otras…

Desde Lugo Monumental, la asociación que tengo el honor de presidir, pedimos en marzo de 2023 que se paralizasen los proyectos que estaban sobre la mesa para poder debatirlos públicamente con diversos sectores de la ciudadanía. No se nos hizo caso y de aquellos polvos vienen estos lodos.

La ausencia no sólo de un diálogo público, sino incluso de publicidad de los proyectos, que se aprobaron sin ningún tipo de exposición pública ni nada semejante y ni siquiera están colgados en la web municipal, hizo que cuando los pudimos ver ya fuera tarde. Los proyectos ya estaban visados porque lo que se publicó fue la licitación, y porque la ley les obliga, que si no…

Cuando accedimos nos encontramos con un planteamiento chapucero y absurdo, que tuvo que ser modificado en varias ocasiones por la presión popular encabezada por Lugo Monumental, que junto a otros colectivos como ADEGA, el Colegio de Arquitectos y colectivos vecinales hizo una campaña informativa en Santo Domingo que explicaba que un carril destruiría los árboles de esa plaza. A esto se unió una recogida de firmas y se logró modificar el proyecto, pero con un alto coste económico y en tiempo, lo que se podría haber evitado si no hubieran tenido la soberbia de ir en solitario y meternos en ese berenjenal.

Ahora nos encontramos con que, casi finalizada la pesadilla de las obras, las calles que soportaban tráfico seguirán soportando tráfico (el ejemplo más palmario es Teatro) pero sin la tranquilidad y la seguridad que dan unas aceras que marcan claramente el límite para los vehículos. No creo que tarden mucho en balizar los carriles, con lo que el resultado será tener algo prácticamente igual que antes de las obras, pero mucho más caro.

Por si eso fuera poco, en lugares como Plaza del Ferrol hay un lío importante de prioridades, y cuando la gente cruza la Puerta Falsa se encuentra con un carril en que tienen que pararse a que pasen los coches que acceden al aparcamiento, porque no hay paso de peatones y al final el motor manda.

Pero más allá de esas cuestiones, el resumen de la reforma se puede traducir en que es una oportunidad perdida de convertir el centro en una gran zona verde. Se han enlosado grandes superficies que podían haber tenido césped, se han arrancado árboles (algunos para poner otros canijos a unos palmos de los originales) y se han plantado farolas como si no hubiera un mañana, destacando más el bosque de farolas que el vegetal.

Ahora se nos dice que se están planteando cambiar lo que han hecho, incluso antes de inaugurarlo. Cambiar la absurda base del Águila de Santo Domingo (que es un espanto), poner más verde en San Fernando… es decir, una enmienda a la herencia recibida cuando el testador está aún de cuerpo presente.

Como no tenemos en qué gastar el dinero, vamos a levantar lo que se acaba de terminar. Vamos a tirar más millones y todo por no escuchar otras opiniones que la propia.

Sinceramente, en mi opinión no sólo no debería tocarse nada, sino que deberían ponerse placas que digan quienes son los autores de estas obras, para que la gente tenga conciencia de la responsabilidad de cada cual, incluso aunque hayan escapado de Lugo.