El Ayuntamiento va a actuar sobre San Fernando. Teóricamente por responsabilidad aunque aseguran que el edificio ya no es responsabilidad, suya. En la práctica porque son los titulares y, como tales, tienen que comerse el marrón si pasa algo.
Fíjense cómo debe de estar la administración de pobretona que estamos desandando el camino que desde los años 80 se siguió con absurda energía. Si antes toda administración pública que se preciara daba bofetadas a quien fuera para conseguir competencias sobre cualquier cosa, ahora pretenden enajenarlas a un ritmo aún más acelerado, porque el presupuesto no da para más.
La historia del Cuartel de San Fernando es conocida por todos. De instalación militar ha pasado a solar abandonado con la peculiaridad de tener encima un edificio cuya protección se ha convertido en un problema para meterle la piqueta, por suerte para todos. De tirar hermosos edificios en Lugo sabemos bastante, y baste abrir algún libro como el editado por el Colegio de Arquitectos, creo que a finales de los 80 o primeros de los 90, que se llamaba “Sempre en Lugo” y que pone de mala uva a cualquiera porque compara lugares de la ciudad con fotos de su estado hace 60 o 70 años y salimos perdiendo en todas las imágenes.
Lo asombroso en este caso es que el Ayuntamiento asegura que ese edificio es de la Xunta y la Xunta que es del Ayuntamiento. En teoría la cosa está bastante clara: el Ayuntamiento hizo una cesión a la Xunta en el año 2008 pero la administración autonómica aún no lo aceptó, con lo que técnicamente sigue siendo de titularidad municipal. Obsérvese que en el 2008 había un “gobierno amigo” en la Xunta, que tampoco se hizo cargo de aceptar la cesión, porque sabían que era un ladrillazo presupuestario.
En cualquier caso la cuestión es clara, vayan ustedes a consultar el Catastro y el Registro de la propiedad, que es donde se sabe de quién es un bien, y verán que sigue figurando a nombre del Ayuntamiento, con lo que es la institución municipal la que se come el marrón. Supongamos que una piedra de San Fernando se cae y le da a alguien en la cabeza. ¿A quién se metería en el juzgado? Al titular. ¿Quién es el titular? El Ayuntamiento de Lugo a día de hoy. Todo lo demás son figuras teóricas de humo.
Para darle más claridad al tema, si ahora la UNESCO o Amancio Ortega (seguramente este último tiene más capacidad económica) quisiera comprar el edificio para hacer ahí una sede sobre la Muralla (es un ejemplo) el receptor de la pasta sería el Ayuntamiento de Lugo, que es el propietario. Supongo que en ese caso habría un juicio entre ambas administraciones reclamando la propiedad.
Y la prueba está en que el Ayuntamiento, que sabe esto perfectamente, va a gastar dinero en hacer obras de urgencia en el cuartel. ¿Alguien se cree que lo haría si no tuviera la responsabilidad? Porque puestos a meter pasta en obras urgentes les puedo decir de carrerilla por lo menos tres o cuatro sitios donde su actuación es acuciante: la casa en ruinas de la calle Castelao, el edificio abandonado de Santo Domingo que cada poco tiempo siembra la calle de cristales, justo frente a éste la casa apuntalada frente a la parada de taxis… Si será por edificios en ruinas en Lugo…
Pero con el más absoluto descaro, en la pasada campaña de las autonómicas dos diputados del PSOE se hicieron la foto de rigor “reclamando” a la Xunta obras de urgencia en el edificio. No sé cómo razona la mente política, pero hasta donde yo sé si una cosa es propiedad de alguien es ese alguien quien debe tenerlo en estado de revista al menos hasta su cesión formal.
Mientras tanto, la dejadez del Ayuntamiento frente a este tema permite que el edificios se caiga en pedazos, mientras se gasta 10 millones de euros que no tenemos en hacer un Museo Interactivo que van a ver cuatro gatos y un montón de niños de colegios (cuando cobren entrada veremos cuánta gente va si ahora ya van pocos).
Y Lugo sigue viendo deteriorarse ese edificio, en pleno centro, para mayor gloria de nuestros gestores.
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