Si les dicen que una calle peatonal lleva diez años cortada, y que la valla que impide el paso está en una estructura apoyada en un Patrimonio de la Humanidad, supongo que les costaría creerlo.
Pero sólo hay que darse un paseo por la Muralla de Lugo para verlo, junto a otro Patrimonio de la Humanidad, la Catedral de Lugo, y en la vía que conecta ambos con un tercero, el Camino Primitivo de Santiago.
Digo diez años aunque juraría que son más. Me parece recordar que esa calle se cortó cuando se hizo la obra del vicerrectorado, algo que va más camino de los veinte años que de los diez, pero bueno, para el caso, patatas.
Podemos coincidir en que la calle en cuestión, a Rúa do Moucho, no es precisamente la calle de la Reina, pero como excusa es más bien pobre. ¿Acaso las calles pueden ser cortadas durante lustros si no son “importantes”? ¿Qué define la importancia de que una vía esté abierta al público?
Ya no hace falta siquiera fijarse en que hay un edificio apuntalado contra la propia Muralla, mientras la administración pone el grito en el cielo cuando alguien pinta su fachada de un color que difiere tres tonos del Pantone aprobado en las normativas, que una vez más se usan para atizar al particular pero que se ignoran cuando afectan a la propia cosa pública.
La casa en cuestión no es municipal, ni autonómica, ni estatal, pero las normas dejan un amplio margen de maniobra (cuando interesa) y aquí la dejadez, esa característica tan tristemente propia de nuestro Lugo, hace que propios y extraños veamos con pasmo como año tras año una calle sigue cortada porque nadie mueve un dedo.
Dicen que hay problemas con la propiedad. Supongo que no han escuchado nunca hablar de la ejecución subsidiaria, una figura por la que la administración puede intervenir y después pasar la factura a la propiedad. Así de sencillo. Desde luego, cualquier cosa menos tener cortada una calle años y más años.
Eso sí, por las campañas de “casco histórico de Lugo, Patrimonio de la Humanidad”, que no sea. Una tomadura de pelo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Derecho a réplica:
Se admiten comentarios, sugerencias y críticas. Sólo se pide cierta dosis de ''sentidiño'' y cortesía.