miércoles, 2 de noviembre de 2011

Publicidad engañosa

Uno, que es habitual usuario de vuelos de bajo coste, ya está curado de espanto sobre las cifras de origen del billete y las que realmente salen luego a pagar. Hoy viene en la prensa que gran parte de las reclamaciones que sufren las compañías aéreas, tanto de bajo coste como las otras, es por la diferencia que hay entre lo que dicen y lo que hacen.

Ryanair Les voy a poner un ejemplo. En este momento si uno entra en la web de Ryanair, el buque insignia de las bajo coste, ve que hay una fantástica oferta de vuelos por 9,99 € por trayecto reservando hasta el jueves y volando en diciembre o enero. Eso sí, cuando uno intenta contratar el vuelo se encuentra con que no todo el monte es orégano.

El vuelo Santiago de Compostela – Francfort para ir el 6 de diciembre y volver el 10, por ejemplo, sale en 97,98 € por persona. Esto son 87,99 € más de lo anunciado y, para los que les gusten los porcentajes, un 980% más caro de lo que se imaginaba uno… un 980% así, sin comas ni nada.

¿Me parece mal? No, me parece fatal. El problema, sin embargo, no es el precio final del billete, que oye, cada uno vuela si quiere y si no se va a dar una vuelta en coche a Cantabria, que es muy bonita, o a la Costa de Lugo, más bonita aún. La cuestión, sin embargo, no es el precio, sino la publicidad engañosa. pasar del 10 € a 100 € así, sin anestesia ni nada no es razonable.

Les desgrano el incremento de dónde viene: la tarifa inicial ya sube a 55,98 € de trayectos y tasas, a los que hay que sumar 30 € que te clavan por llevar la maleta y otros 12 € por pagar con tarjeta. Lo de la maleta es opcional, vale, uno puede ir con mochila y apañarse, pero lo del pago con tarjeta es obligado porque no dan otra opción. Lo suyo, entiendo yo, es que una norma les obligara a poner la tarifa que uno tiene que apoquinar al final, sumado lo que no se puede restar. En este caso tasas de aeropuerto y pago con tarjeta. Lo de la maleta vale, insisto en que puede colar como opcional. Si anuncian el vuelo en 67,98 € ida y vuelta tampoco suena tan caro, y sería la verdad.

Pero cuidado, no pasa únicamente con los vuelos de bajo coste. ¿Han ido ustedes a un concesionario a preguntar por un coche con el precio que sale en el anuncio? Hay que sumar matriculación, gastos de nosequé y nosecuanto y al final te sale en 2.000 euros más de lo que sale en la tele como mínimo.

Lo mismo pasa con las rebajas, que te ponen en los escaparates un 50% grande como la vitrina y luego en pequeñito “hasta un”, con lo que entras y resulta que la rebaja es del 10% o el 20% en casi todo salvo en cuatro prendas horribles de hace tres años.

Como liberal creo en la libertad de precios. Cada empresa tiene derecho a tasar sus productos como le dé la real gana. Luego el público decidirá si lo compra o no lo compra. El problema no está en el precio, sino en el engaño para atraer a la clientela, que se encuentra con que lo que les habían prometido no era cierto.

Necesitamos una legislación que obligue a eliminar la letra pequeña, y que haga vinculantes la ofertas tal cual las publicitan, que incluso se meta a los tamaños de las letras y a la velocidad de los pies de anuncio (es físicamente imposible leer las condiciones que ponen en la tele a toda leche cuando anuncian un coche). Ya verían qué rápido veríamos precios realistas en los anuncios. Y el que haga ofertas, que las haga de verdad.

1 comentario:

  1. Lo último lo he visto en la publicidad de los coches eléctricos. Estamos acostumbrados con los coches en agregar al precio la matriculación, transporte e impuestos, pero que en la letra pequeña ponga que la batería no está incluida en el precio, es demasiado. Supongo que se lo copian de los juguetes u otros aparatos electrónicos en el que pone "Pilas no incluidas" pero si miramos por ejemplo http://www.renault-ze.com/es-es/gamme-voitures-electriques-renault-z.e./kangoo-z.e./presentacion-1350.html la batería se alquila por 75 € al mes. ¿Hacemos números y por cuanto te sale el coche contando la vida media del mismo?

    ResponderEliminar

Derecho a réplica:

Se admiten comentarios, sugerencias y críticas. Sólo se pide cierta dosis de ''sentidiño'' y cortesía.