martes, 14 de agosto de 2018

¡Gracias Joaquín!

Inauguración de la peatonalizacióin del casco histórico tras las obras

El Progreso de ayer domingo recogía a doble página un gran reportaje sobre la efeméride de los 20 años de la peatonalización del casco histórico, acción llevada a cabo por Joaquín García Díez en su único pero increíblemente productivo mandato como alcalde. Es de agradecer que el diario de Lugo y su provincia tenga buena memoria y recuerde el gran cambio que supuso para todos aquella titánica y difícil decisión, sin la que hoy nuestra ciudad no sería lo que es.

La objetividad es una gran cosa para escribir sobre alguien pero también algo difícilmente alcanzable. Filias y fobias nos influyen a todos a la hora de escribir, y cuanto más conocemos a la persona más nos marca la opinión que tenemos sobre ella. Cuando cristalizó aquella ambiciosa y revolucionaria idea no conocía a Joaquín más que como alcalde de nuestra ciudad y aún así ya no habría sido objetivo con él porque siempre fui consciente de que fue quien nos dio alas para soñar un Lugo mejor y aumentó nuestro orgullo para recodar que no tenemos nada que envidiar a otras urbes de nuestro entorno. Hoy día tengo el honor de contarlo entre mis amigos y de haber trabajado con él, lo que me da una perspectiva bastante completa de su persona, y eso no hace más que aumentar mi admiración, respeto y cariño, lo que aleja más aún cualquier presunción de objetividad que pudiera restarme.

Sin embargo, no hace falta ser objetivo para reconocer que Joaquín marcó un antes y un después para Lugo. Su alcaldía supuso retirar el tráfico de lugares donde hoy nos parece una barbaridad que alguna vez lo hubiera. Campo Castillo, Reina, Plaza de España, Progreso… son a día de hoy zonas que las personas han podido recuperar gracias a la valentía de quien se enfrentó al statu quo y llevó adelante su proyecto, protegido de las muchas y duras críticas únicamente con una armadura de buenos argumentos y una inquebrantable convicción. Fue inolvidable la enorme reunión que mantuvo con cientos de personas del casco histórico en la vieja cafetería Monterrey, donde dio la cara antes de iniciar las obras y estuvo contestando preguntas a una audiencia inicialmente hostil a la que poco a poco fue convenciendo con su discurso tranquilo pero firme.

La visión global de Lugo que tiene Joaquín no la hemos visto en ningún otro alcalde desde que dejó el cargo. No solo se encargó de convertir el casco histórico en un verdadero centro peatonal sino que se preocupó por las antiguas travesías que cruzaban Lugo, hoy avenidas reformadas gracias a su trabajo, y de las zonas verdes como el parque del Miño, también creado en su mandato, y eso sin mencionar su “locura” de luchar por la declaración de la Muralla como Patrimonio de la Humanidad, algo por lo que peleó con una energía arrolladora y que felizmente logramos “entre todos”.

Lugo tiene una gran deuda con el alcalde Joaquín García Díez que, lamentablemente, pagará dentro de espero que muchos años cuando él no pueda recibir en persona los sin duda merecidos elogios, por la absurda idea de que no se puede dedicar una calle a una persona viva. Al menos que este modesto pero sincero homenaje sirva para recordar lo muchísimo que se puede hacer por Lugo en cuatro años si se tiene coraje, convicción y, lo más importante de todo, si se quiere a esta ciudad.

¡Gracias, Joaquín!

Inauguración del Parque del Miño el 7 de mayo de 1999
Artículo publicado en El Progreso del 13 de Agosto de 2018 

1 comentario:

  1. Para ser objetivos muy bien no lo debió de hacer para estar tan sólo 4 años en el cargo, mientras que otros estuvieron 16 años :)

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