viernes, 29 de julio de 2022

Hoy a las 20:30 vuelve el ''Milagro'' de San Vicente, en que manó vino la fuente

El "Milagro" de San Vicente en 1969 (foto del Archivo Histórico Provincial) y en 2019

Tras un parón de casi tres años, vuelve el “Milagro” de San Vicente, en que manó vino la fuente.

Quiso la casualidad que en 2019, nuestro último año “normal”, se celebrasen los 50 años de esta curiosa tradición, y que por ese motivo tuviera lugar en San Froilán una segunda edición especial del “Milagro”.


La primera vez que la fuente manó vino fue en el San Froilán de 1969. A iniciativa de Ezequiel García Rodríguez, recaudador de impuestos, se llevó a cabo la idea, aunque el sistema era totalmente distinto. Se echaba el vino en el enganche de esta fuente, que estaba en aquel momento en los jardines del Obispado. Se volvió a realizar este acto, de forma irregular, en los años ochenta y en los noventa, en que hubo tres ediciones seguidas de 1992 a 1994. Sin embargo es difícil mantener las cosas en el tiempo. A pesar de haberse celebrado relativamente pocas veces el imaginario colectivo mantuvo la idea, probablemente por su llamativa estética.

El "Milagro" en 1969 en una preciosa foto del Archivo Histórico Provincial

Fue en el año 2014 cuando desde Lugo Monumental se recuperó esta tradición (tras dos años de intentonas fallidas, todo hay que decirlo) y desde aquella el evento se repite cada 29 de julio, día de Santa Marta, patrona de la hostelería. Tras seis años continuados vinieron dos de parón obligado por la pandemia, pero en esta etapa de recuperación de tradiciones volveremos a disfrutar de una celebración peculiar que tanto gusta a locales y visitantes.

Por supuesto se ha cambiado el sistema a lo largo del tiempo. Si en su origen el vino corría por las cañerías de la fuente, actualmente se utilizan tubos alimentarios y un sistema de circuito cerrado que hace que el vino no entre nunca en contacto con la propia fuente por motivos de seguridad del monumento y, por supuesto, de salubridad e higiene.

El "Milagro" en su edición de 2019

El patrocinio de Viliga (Vinos y Licores Gallegos) hará posible una vez más este acto, y por ello queremos agradecerles su desinteresada colaboración, que hará que se repartan un par de miles de vasos de vino gratuitamente a los asistentes. También la participación del Ayuntamiento de Lugo a través de Alcaldía permitirá disfrutar de una actuación en directo que amenizará la velada, y no es esa su única colaboración, ya que también nos permiten usar la propia fuente y suministran parte de la intendencia (vallas, contendedores...). Cultura por su parte nos ha echado una mano fundamental con el tema de la energía para hacer funcionar el sistema.

Como Lugo Monumental es una asociación modesta en lo económico, y no estamos para dispendios, aprovechamos el acto para entregar los reconocimientos de la Asociación, que son uno en homenaje a toda una vida dedicada a la hostelería, que será entregado póstumamente a Doña Amparo del Río, de la Confitería Conde, otro al comercio singular que recae en La Sucursal, y un tercero, como Socio de Honor, también póstumamente a José Piñeiro del Restaurante Tosar, que lamentablemente también nos dejó hace pocos meses y que fue uno de los más activos y participativos socios de Lugo Monumental.

Hoy viernes 29 a partir de las 20:30 no se lo pierdan, no todos los días uno puede asistir a un “milagro” programado en que las fuentes echan vino.


El cartel de este año, diseñado por Lucía Barrios


jueves, 28 de julio de 2022

Las notas de prensa de la Policía Local como estudio sociológico

Las notas de prensa de la Policía Local como estudio sociológico 

Una de las cosas más entretenidas de la web municipal es el habitual “comunicado de prensa de Policía Local de Lugo”, que es como una especie de diario de cotilleos pero en lenguaje oficial, que siempre es más divertido porque tiene su guasa ver cómo denominan a ciertas cuestiones. No me entiendan mal, me parece que es una buena forma de hacer ver el trabajo que realizan, pero lo malo es que también ser revela el que no se hace.

Por ejemplo, llama poderosamente la atención que durante este mes de julio se hayan llevado a cabo actuaciones de inspección en locales de hostelería en gran parte de la ciudad, levantándose actas por infracciones de todo tipo (desde los que tienen música sin licencia para ello hasta los que han instalado máquinas “comecartos” sin tener autorización, pasando por las violaciones de horarios, caducidad de extintores, excesos de aforos…) pero que quienes han presentado quejas o denuncias contra locales de sus zonas vean que no todos salen en esos comunicados. ¿Quizá no haya ido la patrulla o es que no se ha levantado acta por algún motivo? ¿Tal vez es que sí ha habido propuesta de sanción pero no queda bien en la nota de prensa?

Por otro lado es peliagudo el tema de identificar a los infractores. Se habla de locales en la calle de la Cruz (cosa que después suelen recoger los medios, si es en el casco histórico) y de otras como la calle Tui… el problema es que seguro que con la primera dudan ustedes del local del que hablan y en la segunda se les ha venido uno a la cabeza. Incluso aunque estén equivocados, que todo puede ser, porque en la calle Tui hay más de un local aunque a veces no lo parezca.

La transparencia es algo muy importante, aunque incluso quienes somos adalides de su valor creamos que ha de tener ciertos límites, y más aún si se trata de procesos sancionadores. Como buenos españoles somos muy de colgar sambenitos a las personas y los locales, y basta que alguien cometa un error para que le quede eso como imagen eternamente, cosa que no comparto. También hay que buscar un equilibrio porque tampoco se trata de  ocultar a quien reiterada y gravemente delinque o da la brasa a sus convecinos con música a todo trapo o ruidos callejeros a altas horas.

El gran problema de esto es que normalmente al reincidente le importa un pepino el qué dirán. Quien día tras día provoca el insomnio de sus vecinos (algo que yo sufrí cuando vivía en casa de mis padres por un local de la zona, y que es una maldición como cualquier otra) normalmente lo hace porque le da igual hacerlo. Es como el carterista reincidente, el violador reincidente o el conductor borracho reincidente. Al que reincide le importa un bledo que le señalen, ya sea por carácter o incluso por enfermedad, que también los hay.

En todo caso, les recomiendo que si entran en la web municipal no dejen de visitar las notas de prensa de la Policía Local, con las que al menos han logrado revertir hasta cierto punto la cantinela de que “no hacen nada”. Queda mucho por hacer (por ejemplo, no he visto nunca una nota que hable de sanciones a quienes no recogen las deposiciones de sus perros en la Muralla o en cualquier otro lugar) pero todo se andará.

Aprovecho para felicitar a la Policía Local por su buena comunicación y desearles lo mejor. Trabajan para todos nosotros y eso hay que valorarlo siempre.

miércoles, 27 de julio de 2022

El tiempo perdido en el Garañón (y otros muchos asuntos)

Desde 2009 llevamos dando vueltas al Garañón y, a pesar de las sentencias, ahí sigue

Hacer de la necesidad virtud es el primer mandato de cualquier políticos que se precie. Es irrelevante si los argumentos contradicen posturas anteriores, si se lleva la contraria a lo que se sostuvo durante años, si las declaraciones son totalmente opuestas a lo que se dijo en los juzgados o los periódicos... lo importante es salir de cada atolladero a corto plazo porque el ciudadano (el votante, a estos efectos) tiene la memoria de un pez. Un pez que se haya golpeado la cabeza contra una roca, probablemente.

A menos de un año de las elecciones municipales toca hacerse la foto frente al Garañón anunciando su derribo. Es algo relativamente frecuente, que ya hizo la alcaldesa, Lara Méndez, en varias ocasiones, como en febrero de 2017, cuando anunció que reservaba una partida de 300.000 euros para demoler “cuanto antes” las torres que había autorizado el gobierno de su antecesor, López Orozco. Se ve que no entendemos igual el término “cuanto antes”, porque más de cinco años después las torres siguen en pie.

Con esa facilidad para incrementar las cifras a lo loco (no hay más que recordar el increíble incremento de las obras "necesarias" en el nuevo Auditorio) se nos dice ahora que se triplica el coste y que se reserva casi un millón de euros para el derribo de las torres, ilegalizadas por varias sentencias judiciales - curiosamente ninguna de las cuales menciona el antiguo plan general al que Orozco siempre achacó las torres y que, lo que son las cosas, es el único documento que no se anuló en los juzgados - y a pesar de que el Gobierno local intentó por todos los medios mantenerlas ahí. Presentarse ahora como los adalides de su caída no deja de ser una contradicción más, una pirueta que, estoy seguro, colará como cuela casi todo en este santo país.

La historia es curiosa cuando uno se fija un poco en ella. Incluso sin fijarse demasiado hay cosas que chirrían. En julio del año 2015, es decir, hace una década exactamente, el gobierno municipal decía que estaba “pendiente” de la resolución del TSXG sobre la demolición del Garañón. En enero de 2017, cuando el TSXG falló que eran ilegales tanto las licencias de construcción del edificio como la urbanización de la parcela, se anunciaba que estudiarían recurrir ante el Supremo. Muchas ganas de tirar el edificio no se veían.

Pero toca cambiar de criterio, ya que la realidad es tozuda y los edificios no sólo se amparan en una licencia ilegal, basada en un sospechosísimo convenio firmado un festivo, 31 de diciembre, con el ayuntamiento cerrado y prescindiendo de toda vergüenza porque al día siguiente entraba en vigor una nueva normativa autonómica que reducía la edificación notablemente, sino que encima ahora nos cuentan que ni siquiera se cumplió la licencia dada, algo en que se ve que se han fijado doce años después de comenzar la polémica por este asunto. Mucho no lo habían mirado.

Todos estamos deseando ver desaparecer el Garañón, y el día que caiga es más que probable que la gente olvide de dónde salió todo esto y que aplauda a los mismos responsables de ese disparate que, sea como sea, nos va a costar una buena cantidad de dinero público, incluso aunque se lograra esquivar la posible indemnización multimillonaria al promotor, algo harto discutible y que ya veremos dónde acaba.

Lugo tiene la capacidad innata de estancarse en los mismos temas una y otra vez durante décadas. Mientras otras ciudades avanzan, nosotros seguimos dando vueltas en círculos persiguiéndonos la cola e incluso aunque se consigan algunas supuestas metas (la construcción del nuevo Auditorio, por ejemplo) se buscan los medios de que los temas sigan sin conclusión real (ahí lo tenemos, cogiendo polvo).

Algún día nos daremos cuenta de la de tiempo que hemos perdido.

martes, 26 de julio de 2022

Aguas verdes y copias de estatuas

En estos tiempos de escasez de agua hay medidas que es lógico tomar, como por ejemplo apagar las fuentes públicas ornamentales para reducir el despilfarro de agua. Es algo que el Ayuntamiento de Lugo ha llevado a cabo y es digno de aplauso.

Se les ha olvidado, sin embargo, apagar la fuente de la matrona (la que tiene los leones al pie) frente a los juzgados, en la Plaza de Avilés, y ofrece un aspecto horrendo con el agua totalmente verde, lo que se une a que la copia de la matrona está ya muy oxidada lo que hace dudar de la calidad del material empleado en la imitación.

Porque supongo que lo recordarán, pero tanto la estatua que corona la fuente como los leones que la adornan al pie son copias. Los leones originales, que estuvieron mucho tiempo flanqueando las escaleras de la Plaza de España, están ahora en el MIHL cogiendo polvo (literalmente hablando, la última vez que fui a verlos tenían telarañas) y la matrona… no tengo muy claro dónde está.

La última noticia que hubo sobre ella la publicó El Progreso y era que estaba en los almacenes de una empresa de fundición de Lugo que ya cerró, y que llevaba allí seis años abandonada. De eso han pasado ocho años más así que hace ya 14 años que no tenemos noticia de esa estatua.

¿Dónde está nuestra matrona?



viernes, 22 de julio de 2022

Hay que dar una vuelta al modelo de las casetas del San Froilán

Si algo identifica el San Froilán son las barracas y el pulpo. De hecho es habitual que en la cartelería haya referencia a ambas cosas y raro es el diseño que no incluye al menos un tentáculo por algún lado. Este año con poner uno llega, porque sólo ha habido un postor para montar las tradicionales casetas de la fiesta… y a ver si no renuncia, que no sería de extrañar.

El problema que está afrontando la hostelería (como muchos otros sectores, por supuesto, pero ahora hablamos de éste) no es menor, y estamos empezando a ver las consecuencias, que probablemente no van a ir a mejor. Cuando para 2023 el Ayuntamiento empiece a restringir las terrazas veremos bofetadas para conseguir tomar un café al aire libre porque, como suele pasar en estas cosas, estoy dispuesto a apostar dinero a que pasarán de la total permisividad a la restricción abusiva, y si no, al tiempo.

Pero volvamos al tema de las casetas. Como saben, el precio de las raciones del pulpo está tasado por el Ayuntamiento, que lo mantiene en los 12 euros por ración, haciendo oídos sordos a la espiral inflacionista. Para que se hagan a la idea es lo que costaba en 2016, y no hace falta ser un genio para entender que los costes no son los mismos. Entre 2016 y 2018 subió un 50% y desde aquella la evolución ha sido la que ha sido.

Esto, sumado a muchas otras cuestiones problemáticas como es el incremento del coste de los materiales (lo que disuade a quien quiera animarse a ensamblar una caseta por primera vez), la escasez de mano de obra para todo lo que es el montaje de la instalación y, por supuesto, el grave problema que hay para encontrar personal, es lo que explica que sólo se haya presentado una empresa al concurso para servir el pulpo en las fiestas.

Como este país es como es, estoy seguro de que hay quien se alegra de esto. Les hablaba el otro día de una palabra alemana que describe la alegría por la desgracia ajena: “schadenfreude”, que no deja de ser un reflejo de esa envidia que es tan propia de los españoles. Hay quien siente un vergonzoso disfrute porque al vecino le vaya mal, y, por la contra, un sufrimiento porque a otro le vaya bien, que jamás he podido comprender. Y más si no son conscientes de que el hecho de que haya menos casetas perjudica a las fiestas patronales de Lugo.

Que haya únicamente una de cuatro casetas implica menores ingresos para las arcas públicas. Las grandes sumas que pagan por instalarse se destinan a financiar las fiestas, así que lo de que no se monten las cuatro casetas va a ir a nuestro bolsillo porque los conciertos y demás gastos se pagarán igual, y si no hay ingresos de otro sitio la pasta saldrá de la buchaca pública, que es la nuestra aunque a veces nos hagamos los locos.

Obviamente lo de reducir el gasto en las fiestas si hay una bajada en la recaudación ni se les pasa por la cabeza, y menos aún en el último San Froilán antes de las elecciones municipales en que todo tiene que ser “lo más de lo más”. Equilibrar las cuentas no es una de las especialidades de nuestras administraciones, y aunque en tiempos las fiestas patronales apenas le costaban nada al Ayuntamiento porque se financiaban casi al 100% con los ingresos de barracas, casetas… y las entradas a los conciertos, hoy es impensable. Al que proponga cobrar por ir a ver a los artistas supongo que lo colgarían de un balcón en la Plaza de España para dar ejemplo a los demás que disientan de la nueva religión del “gratis total” que, sin embargo, nos sale carísima.

Personalmente siempre he pensado que las casetas del pulpo tendrían que ser libres tanto en tamaño como en precio y disposición (cumpliendo las normativas, claro está). No comprendo por qué en todas partes se pueden poner unas lonas con bancos corridos (que, por cierto, hasta tienen más encanto para una feria) y aquí se obliga a montar auténticos restaurantes provisionales con unos costes que no sólo han ido dificultando paulatinamente la participación sino que, como vemos, la ha convertido en inviable.

Lo suyo sería que puedan montarse las casetas que quieran, pagando sus metros cuadrados como los demás feriantes, y que cada uno tenga su estilo, sus materiales… y sus precios. Ah, y por supuesto que estén los días de las fiestas en lugar de mangarse ahí mes y pico, otra cosa que nunca he podido comprender.

Seguramente es el momento de dar una vuelta al modelo de las casetas del San Froilán, pero no hace falta ser adivino para prever que no se hará ningún cambio. Y si no hay casetas, pues no las hay. Con echar la culpa a los hosteleros tenemos hecho el discurso público, y colará.

jueves, 21 de julio de 2022

Hay untamiento de Lugo

Reguera, Liñares y Tutor, los tres condenados por amañar el contrato de la ORA

 La corrupción en España es algo tan habitual que incluso socialmente la disculpamos hablando de “picaresca”, como si fuera algo menor y casi un juego de niños en que lo importante es que no se pueda demostrar. Aunque te pillen no hay siquiera más consecuencia pública que una multa (normalmente desproporcionadamente baja) y salir en los periódicos dos o tres días antes de que la cosa quede en el olvido y te tengan que tratar de usted, porque no sea que haya un delito de odio, que es lo próximo que nos tocará por llamar “cabrones” a los asesinos de ETA al paso que vamos. Eso sí, homenajes que no falten que eso no ofende a nadie.

Pero me desvío del tema. Entiendo que ahora que hay condena y que el propio protagonista ha reconocido los hechos ya podemos llamar “chorizo” a Liñares sin que se entienda violada la presunción de inocencia. Que fuera la mano derecha de Orozco, el todopoderoso concejal que hacía y deshacía a su antojo con la complicidad de funcionarios municipales, y que su partido lo “castigase” dándole la Presidencia de la Confederación Hidrográfica ya es para analizar en otro capítulo.

Pero lo preocupante es la sentencia. Liñares ha sido condenado a un año y cuatro meses de prisión (es decir, que no pisará una celda porque si no llega a los dos años no entra) y una multa terrible de… 6.000 euros. Teniendo en cuenta que se reconoció que había cobrado 3.500 euros mensuales por la adjudicación fraudulenta del servicio de la O.R.A. en Lugo no sé, a mí me parece que la multa no es demasiado disuasoria para el futuro. En mes y pico sale a cuenta.

La O.R.A. funcionó en Lugo desde 2009 a 2015, es decir seis años. No hace falta ser matemático para echar cuentas y llegar a la conclusión de que a razón de 3.500 euros mensuales la broma suma 252.000 euros en sobornos. Aunque sólo le pagasen la mitad, porque a lo mejor la cosa no duró tanto como les gustaría, serían 126.000. Incluso aunque sólo llegase a cobrar un 10% son 25.200 euros. Vamos, que en todo caso sale rentable ser un corrupto y un chorizo.

El mensaje social es terrible: roba que malo será que no te salga rentable. Como la Carioca, el caso de las multas, y todos los demás que en Lugo se han saldado con condenas ridículas o directamente con escandalosas absoluciones. Al menos se ve que Pilar de Lara tenía razón en algo... 

miércoles, 20 de julio de 2022

Doce años sin playa fluvial

El recién reinaugurado Club fluvial de Friol... fotos: La Voz de Galicia.

En el año 2010 el entonces alcalde, señor Orozco, y el presidente de la Diputación, señor Besteiro, anunciaban la buena nueva: firmaban un convenio para que Lugo tuviese playa fluvial entre otras maravillas. Han pasado 12 años y seguimos a la espera, ¡quién se lo iba a imaginar!

Que no íbamos a tener playa este año era bastante previsible. Incluso aunque se lograsen instalar las bateas fluviales esas que nos quieren endosar como sucedáneo de una verdadera zona de baño en condiciones, seguiríamos siendo el hazmerreír de los muchos pueblos pequeñitos de nuestra provincia que, con unos recursos infinitamente más reducidos que los de la capital, disfrutan desde hace años de instalaciones envidiables.

No hay más que ver el ejemplo de Friol, un municipio vecino en que se acaba de inaugurar la remodelación de sus instalaciones, con unas piscinas junto al río y una cafetería que, si les soy sincero, me hace ponerme verde de envidia. Envidia de la mala además, de la que te hace bajar santos y pensar en qué manos está nuestro Lugo del alma.

Tras infinidad de promesas electorales y anuncios propagandísticos seguimos como estábamos pero con menos dinero en el banco, porque mi instinto me dice que los que vendieron las bateas nos las van a hacer comer, y por ellos como si las ponemos en el Rato. Total, en el inicio del Plan General proponían ese regato como ubicación para una escuela de piragüismo (es en serio… bueno, en serio que lo ponía quiero decir) así que bien podría ponerse una playa fluvial.

La culpa, por supuesto, es de la Xunta de Galicia, de quién si no. La mano negra de los poderosos que quieren que la ciudadanía no tenga una playa fluvial digna y gratuita para que se sigan asociando al Club Fluvial es quien tuerce todos los planes. Y si no, siempre podemos culpar al chachachá, eslogan que hasta tiene una canción.

El problema del informe de la administración autonómica es que está basado en criterios medioambientales y de seguridad, dos mantras que son muy difíciles de rebatir sin quedar fatal con la población, sobre todo cuando llevas años presumiendo de ser un ayuntamiento “green Vancouver” que hace casitas de madera (aunque no sepan para qué se van a usar) y proyecta barrios ecológicos súper divinos de la muerte (cargándose un humedal, pero bueno, tampoco hay que ser picajosos con esas cosillas).

Lo de mirar las notificaciones con calma, leer los informes que te mandan en 2019 para evitar problemas y buscar una ubicación adecuada en los ocho kilómetros de río que tiene Lugo (que ya son) mejor lo dejamos para mañana. A pesar de que nos quedemos un año más sin playa fluvial, siguiendo las enseñanzas de Escarlata O’Hara… ¡mañana será otro día!


17 de diciembre de 2010...



10 de mayo de 2011...


3 de abril de 2014...


9 de junio de 2016...


Enero de 2021...


Diciembre de 2021...





martes, 19 de julio de 2022

lunes, 18 de julio de 2022

Lugo está ardiendo

Lugo arde y la imagen revela un sentimiento: impotencia. Foto: Carlos Castro/Europa Press

Los incendios tienen algo de irracional, que desafía a la lógica y que precisamente por eso los hace más aterradores que otras desgracias. Todos nos vemos capaces de echar una mano a quitar escombros o cosas por el estilo, pero cuando hablamos de fuego... ya no vale la voluntad y el optimismo, hay que saber lo que se hace y a veces ni así, como demuestra el fallecimiento del brigadista de Zamora.

Ayer en Lugo veíamos llover ceniza. Incluso pequeñas ramas que conservaban intacta su forma aterrizaban en la ciudad pero totalmente huecas de vida y de contenido. Al tocarlas se deshacían porque sólo era ceniza con formas. Terrible.

Cuando los fuegos son intencionados, entonces la cosa cambia de tercio y se convierte en un atentado, lisa y llanamente, y a veces con víctimas como hemos visto. Quizá no podamos llamarlo terrorismo, porque su objetivo normalmente no es infundir el miedo sino incrementar la cuenta bancaria, pero sin duda es uno de sus efectos secundarios.

Siempre se dice que la mejor forma de extinguir un incendio es que no comience, o que al menos haya labores de prevención, limpieza de montes, creación de cortafuegos… y sin duda ese es el camino, el de intentar evitar que estas cosas pasen. Lo malo es que es más fácil de decir que de hacer, y los mismos que ahora se ponen como hidras, normalmente con motivación política, defendían lo contrario cuando la ola de fuegos que se produjo cuando en la Xunta gobernaba el bipartito… y viceversa. La imagen de Feijoo con la manguerita es difícil de olvidar. Esa puñetera manía de convertir todo en armas arrojadizas a la búsqueda del voto fácil es lo que tiene.

Mientras todo se politiza el monte arde por los cuatro costados, y en lugar de buscar soluciones (que no son sencillas, como ya hemos dicho) se buscan excusas que, si bien pueden ser creíbles porque la ola de calor es histórica, también es cierto que nos pillan muy cansados de tanta palabrería. Creo que más que avanzar hemos retrocedido.

En los años 80 hubo una campaña que entró en el imaginario colectivo y que en lugar de echar la culpa a los demás se centraba en algo positivo: “todos contra el fuego”. Firmado por ICONA, y con participación de un montón de famosos de la época, la campaña se proponía concienciar de los peligros de las barbacoas campestres, las colillas arrojadas desde los coches y demás causas de incendios involuntarios. Duró varios años y probablemente la más recordada de las campañas fue la que contó con la participación de Serrat.

https://youtu.be/Iuutni826aw?t=45

Probablemente hoy sería considerada una campaña fruto de la candidez, ya que se entiende que la mayoría de los incendios no sólo son provocados, sino que son intencionados. No se trata de pirómanos, que son una fracción de los que echan la gasolina y la cerilla, sino que se responde a intereses económicos, que es todavía más triste si cabe.

Lo que parece claro es que ningún gobierno está siendo capaz de hacer nada. Ni los cambios normativos ni las campañas están sirviendo de gran cosa, y a día de hoy O Caurel arde sin freno y estamos perdiendo nuestros más hermosos bosques, nuestros pulmones colectivos, y nada invita al optimismo.

viernes, 15 de julio de 2022

Las amenazas jamás han sido argumentos



La denuncia que ayer anunció Rubén Arroxo contra un descerebrado que le amenazó de muerte en Facebook es uno de tantos síntomas de que se nos está yendo la pinza como sociedad. Podremos estar en desacuerdo, podremos incluso hacer campaña contra alguien, llamar a “echarlo” de un puesto público mediante la única arma aceptable en una sociedad civilizada, el voto… pero de ahí a que nos vengamos arriba (abajo más bien) y nos creamos que podemos amenazar a alguien de muerte media un insalvable abismo.

He leído reacciones en que culpan al propio Rubén por las acciones que ha llevado a cabo en el Ayuntamiento (algunas de las cuales comparto y otras no, eso es irrelevante en este momento), u otras en que  lo asocian con partidos políticos herederos de ETA, un grupo que no sólo amenazó sino que asesinó a mucha gente, algo que por mucho que pueda parecer un argumento no es más que una pataleta. Todas estas opiniones son como las de “es que llevaba minifalda y por eso se merecía la violación”, intolerables desde mi punto de vista.

También hay otras que, desde la discrepancia e incluso la oposición política dicen lo único que cabe decir: que toda amenaza sobra y que hay que acabar con esas actitudes. Pero hay una  reacción que, en mi opinión, destaca por su elegancia, y no podía ser de otra persona que de Joaquín García Díez, diputado nacional, exalcalde de Lugo y a quien tengo el honor de llamar amigo. Joaquín bloqueó a la persona que había amenazado a Rubén, a quien explicó que tenía en su lista de amigos porque como representante público suele aceptar todas las solicitudes por ser una forma más de contactar con los vecinos, y no mencionó nada más que ese bloqueo y la condena a las amenazas.

No olvidemos que él protagonizó a su pesar campañas muy duras por cuestiones puramente políticas. Carteles con su cabeza tachada, marcada o incluso en una diana, convocatorias de escraches en su casa, insultos y todo tipo de groserías… pero cuando se lo hacen a otros, a personas que son de una ideología diferente, en lugar de sentir esa vergonzosa emoción tan habitual y para la que los alemanes incluso tienen un término (Schadenfreude, disfrutar con la desgracias de los demás), en lugar de caer en el revanchismo y el “ahora vais a entender lo que es sufrir esto”, hace lo contrario: se solidariza con quien lo pasa.

Ojalá todos tuviéramos su sentido común y su buen criterio. Nos iría infinitamente mejor.

jueves, 14 de julio de 2022

La temeridad de mezclar pacientes covid con no covid



Que la administración hace cosas que no caben en cabeza humana ya lo sabemos todos. Que esas cosas contradigan sus propios actos anteriores ya viene a ser una cuestión tan habitual que ni nos llama la atención. Pero cuando hablamos de salud, hablamos de salud.

Si hace unos meses la Xunta de Galicia imponía unas reglas absurdas para intentar contener (sin éxito, todo hay que decirlo) los contagios de Covid con un certificado que era un disparate de tal calibre que nunca más se volvió a hablar de él, ahora resulta que no tienen inconveniente en juntar en una habitación de hospital a un contagiado con pacientes con otra dolencia, algo no sólo inaudito sino contradictorio e incluso, por lógica, peligroso.

En el HULA de Lugo hay casos, según recogía El Progreso, en que han puesto en una misma habitación a un paciente con infección urinaria y otro con covid, porque no tenían otra disponible para aislar a este último. Y no, no hablamos de unos minutos mientras cambiaban las sábanas de otra habitación, sino de que pasó mañana, tarde y noche con el otro. Dejan los aislamientos en la “planta Covid” para los casos “agudos” y si ingresan por cualquier otra patología, aunque den positivo, los meten alegremente en “su sitio”. Vamos, que si te rompes una pierna te vas a trauma aunque seas más contagioso que la supuesta sopa de murciélago, de pangolín o lo que sea que dicen que fue el comienzo de todo este lío.

La explicación de la administración no puede ser más absurda. Nos dicen que son pacientes que ingresan “con Covid”, no “por Covid” y se quedan tan panchos. ¿Se imaginarían qué pasaría si el de la pierna rota de antes tuviera ébola? ¿También lo dejarían en trauma porque “no ingresó por ébola”? No se puede dar una respuesta más insultante. O el contagio existe o no existe. Lo de que sólo sea posible o peligroso si el paciente viene tosiendo en lugar de con otra patología es una bobada y me cuesta creer que hasta se atrevan a decirlo.

Todos los veranos tenemos esos titulares tremebundos que nos dicen que los hospitales “cierran camas” como si eso fuera una crueldad que dejase en la calle a los enfermitos. No es el caso. Ese “cierre” se debe a algo tan sencillo como que en verano hay menos pacientes. Será por el mejor clima, porque la gente en invierno es más proclive a accidentes o vayan ustedes a saber el motivo, pero lo que sería ridículo es que, sabiendo que la demanda asistencial va a ser mucho menor, tuviéramos que pagar por tener miles de habitaciones disponibles sin necesidad.

Ahí es donde está el matiz, en el “sin necesidad”. Ahora sí hay necesidad. La situación es diferente de la que teníamos de 2019 para atrás, porque esa “necesidad” es la de separar a los enfermos con covid de los otros, por mucho que la razón del ingreso fuera otra. Y si no hay cierre de habitaciones y simplemente es que el hospital es insuficiente, peor me lo ponen, porque aún está casi fresca la pintura en algunas zonas y sería el colmo que ya no nos llegase el que se suponía que era uno de los mejores hospitales de Europa.

Supongo que hasta que alguien ponga una denuncia por haberse contagiado en el hospital no se hará nada. A veces la administración sólo aprende a base de palos, y en muchas ocasiones ni así porque total, pagamos nosotros.

NOTA:
La noticia a la que se hace referencia la pueden ver en El Progreso en este enlace

miércoles, 13 de julio de 2022

Inaugurando cuarto y mitad de avenida

No se pierdan el recorrido del coche blanco en el vídeo demostrativo del nuevo trozo de avenida

Al igual que con los anuncios de la retirada de los parquímetros de la ORA (que ahí siguen) o que con la reapertura de los quioskos de la plaza de España y la de Santo Domingo (que continúan cerrados), ayer pudimos asistir a uno de esos ejercicios de malabarismo político a que ya nos tienen tan acostumbrados en Lugo que parecen normales.

La inauguración de un trozo desdoblado de la avenida Infanta Elena dio para paseo con autoridades, presentación, discursos e incluso vídeo que si les soy sincero no sé si es grabado con dron o es una infografía porque ahora lo digital va a tal velocidad que personalmente soy incapaz de distinguir la realidad de la ficción.

Empezando por el final, es curiosísimo que eligieran para ilustrar la nueva reforma un vídeo en que sale un vehículo saltándose no una vez, sino dos, la línea continua en la nueva rotonda. Si está captado con dron es un ejemplo de la mala señalización de ese punto (que supongo que acabarán por balizar si quieren que se respete) y si es hecho por ordenador… eso ya sería para nota porque lo que nos faltaba es que hasta la informática nos putee.

Pero el fondo del asunto, más allá de la anécdota de un coche que hace lo que no debe, es la pompa y circunstancia de una inauguración en la que se les debería caer la cara de vergüenza, porque esa vía es la comunicación directa de la ciudad con el principal polígono industrial y llevan décadas para desdoblarla… y aún no han terminado. Para que se hagan a la idea Las Termas se inauguró hace más de 15 años y si bien ahora han mejorado el acceso desde la ciudad a los centros comerciales del área (que parece que es lo importante, apoyar a las grandes cadenas mientras se cierra el resto de la ciudad para minimizar la competencia) queda que el tráfico fluya hasta el Ceao y el enlace con la A6, que se ve que no debe ser importante.

La conexión de la ciudad con el Ceao y la A6 sigue reducida a un carril por sentido.

No les discuto que sea una operación compleja, y que al haber muchos propietarios las cosas sean menos sencillas de lo que nos gustaría a todos, pero una cosa es eso y otra que saquen la fanfarria para abrir un trozo de calle que enlaza a trompicones con otro que no sólo sigue siendo de un carril por sentido, sino que encima tiene coches aparcados en el medio en el tramo final con el peligro que eso conlleva.

Es una tristeza. Hace unas semanas vinieron un montón de autoridades a presentar… una rotonda. Una rotonda necesaria e importante, no les digo que no, que unirá la Nacional VI con Alfonso X… pero es que es una rotonda… y el despliegue de medios era tal que parecía la apertura de la autovía con Orense o con Santiago. A falta de pan…

Mientras tanto, en plena ola de calor, los lucenses seguimos esperando por la playa fluvial, que entre mejillones y proyectos mal diseñados, va a estar lista para cuando los termómetros bajen de los diez grados. Pero bueno, siempre nos quedarán las bañeras colectivas para entrar en calor, si es que la subida del precio de la luz no hace que estén apagadas, aunque hay elecciones el año que viene y funcionarán al menos los primeros meses.

martes, 12 de julio de 2022

Lo que hay tras la sentencia para nombrar jefe del servicio de Arquitectura

El servicio de arquitectura tendrá nueva jefa y contenta, lo que se dice contenta, con la forma de llegar al puesto no creo que esté. Foto: La Voz de Galicia

La sentencia que condena al Ayuntamiento de Lugo a retrotraer el proceso selectivo para cubrir la plaza de jefe de servicio de arquitectura y admitir a una aspirante a la que dejaron fuera del proceso tras un más que discutible informe del interventor municipal, la todopoderosa figura del equipo de la Alcaldesa, es de difícil encaje.

El trasfondo de esta sentencia es muchísimo más relevante que el del enésimo varapalo judicial a la política de personal municipal… bueno, a la política municipal en general, que casi acababan antes allanándose cada vez que les ponen un pleito porque aparentemente no dan una y pierden muchas más veces de las que ganan. Pero a lo que íbamos, la trastienda de la resolución judicial pone dos importantes temas sobre la mesa: por un lado que Miguel Couto tenía razón al dimitir cuando se trastocó artificialmente el proceso de elección de su nueva mano derecha, lo que le supuso una desautorización que hacía muy complicado continuar con su excelente labor (no se imaginan la de fuegos que apagó en Lugo) y por otro que nadie es infalible, incluyendo al interventor, al que la sentencia deja en muy mal lugar e incluso llega a decir que sus consideraciones son “supérfluas”.

La historia del nombramiento del nuevo jefe de Arquitectura, que por cierto renunció con lo que la recurrente, en la práctica, ya tiene la plaza en el bolsillo aunque el Gobierno Local afirme lo contrario (si sólo hay una aspirante es complicado dar la plaza a otro), es un sainete con informes del interventor cruzados e incluso contradictorios. Según explicaba ayer Antonio Ameijide, emitió uno el 5 de diciembre de 2020 y otro el día 20 del mismo mes diciendo cosas opuestas. En el primero era favorable a la incorporación de esta funcionaria al puesto y en el segundo la descarta porque se cuestionaba su currículum por haber ejercido a tiempo parcial. Un giro copernicano y altamente sospechoso que suena a “lo hemos estado pensando y mejor no te queremos aquí”. Quizá porque la aspirante no era de “la casa” y venía de ejercer un puesto similar en la Xunta de Galicia, y claro, meter al “enemigo” en las trincheras puede ser peligroso. Pues ahora ni les cuento.

La reacción no ha sido pedir una disculpa a la damnificada (si fuera un gobierno de otro color apuesto un brazo a que se hablaría del "sexismo" de impedir su nombramiento para poner a un hombre), ni muchísimo menos rectificar o que alguien dimita por haber metido la pata de una forma tan clamorosa. No, por Dios, el gabinete de prensa, lo único que realmente funciona bien en la casa, no consentiría tamaña acción de honor, porque con eso sólo se dan armas a la oposición. Mejor sacar pecho y decir tonterías como que la sentencia no supone cambios, aunque en la práctica implique que la aspirante sea la única que pueda acceder al puesto.

El gran varapalo se lo lleva el papel jugado por el interventor municipal, que ayer mismo salía con la Alcaldesa en las fotos de las notas de prensa como si tal cosa. Isabel Pantoja, con sus “dientes, que es lo que les jode”, creó escuela. Si les digo la verdad me escama bastante la función del interventor municipal de Lugo. Me suena a que es juez y parte del día a día del Ayuntamiento de Lugo y eso no es bueno. Se supone que los interventores son funcionarios de alto nivel cuya labor es fiscalizar y controlar la economía, las finanzas y la gestión presupuestaria del gobierno local. Que conviertan a esta persona en coordinadora, gestora o como le quieran llamar de un área tan crítica como urbanismo como mínimo chirría porque no tiene mucho sentido que quien toma decisiones políticas sobre temas tan críticos como esos también sea el garante de las cuentas municipales. Y más si cambia de criterio entre dos informes separados por quince días para eliminar a una persona de la carrera por un puesto de “su” área. Raro suena.

No se imagina uno a un juez haciendo de abogado defensor ni a un notario dando fe de la venta de su propia casa. Puede que algunas de esas cosas sean legales (si les soy sincero no tengo ni idea) pero desde luego no son ni éticas ni razonables.

El secretario municipal y el interventor son dos figuras de habilitación nacional, lo que quiere decir que no son ni siquiera funcionarios del Ayuntamiento sino del Estado. Esto se hace para intentar eliminar cualquier tipo de dependencia del gobierno al que debe controlar y supervisar y por lo tanto para que quede fuera de sospecha de parcialidad… algo que en Lugo no sucede porque por muy legal que pueda ser su doblete es más que discutible que quien ha de guardar las gallinas haga en la práctica de concejal de alto nivel, por encima de la mayoría de los elegidos en las urnas.

En fin, a ver cómo salimos de esto ahora, y uso la primera persona porque recuerden que todos los lucenses somos corresponsables solidarios y, lo que es peor, paganos de los muchos errores que cometen nuestros próceres. Pagaremos lo de caldear el agua del grifo de las bañeras colectivas, pagaremos el mareo de las bateas de río y los mejillones de agua dulce, pagaremos el Garañón (tanto el I como el II)… y pagaremos también las muchas sentencias que pierden por hacer las cosas como las hacen: mal.

lunes, 11 de julio de 2022

La historia de ETA explicada para jóvenes (Juan Manuel Jimenez Muñoz)

Hoy día queda "inapropiado" poner fotos de ataúdes, pero es la dura y triste realidad con que desayunábamos habitualmente hace no tantos años. Hoy quienes formaban parte de su entramado escriben las leyes de "memoria" democrática...

Hoy les traigo al blog uno de los brillantísimos artículos del doctor Juan Manuel Jimenez Muñoz, un muy seguido médico y escritor malagueño que les recomiendo seguir en Facebook si no lo hacen ya.

De los análisis que he leído sobre estos 25 años del "espíritu de Ermua", ninguno más acertado, directo, claro y sin paños calientes que el del Dr. Jimenez.


La historia de ETA explicada para jóvenes

Queridos menores de 25 años, a quienes las siglas de E.T.A. no os dicen absolutamente nada; queridos menores de 35, a quienes las siglas de E.T.A. os dicen más bien poco; queridos lectores en general:

El mejor homenaje que podemos hacer a Miguel Ángel Blanco es explicar con lenguaje sencillo, y antes de que los verdugos reescriban la Historia, lo que fueron los años de plomo. Por eso, este escrito debería circular como la pólvora por todas las redes sociales.

Primero: ¿Qué fue la E.T.A.? Fácil: un grupo terrorista con 900 cadáveres a sus espaldas, 2600 heridos y 300 asesinatos sin resolver. Dejó de matar hace tan sólo once años. 

Segundo: ¿Qué quería conseguir la ETA? Yo os lo diré: separar de España por las armas al País Vasco y Navarra, y crear en dichos territorios una República Socialista Marxista-Leninista en la que sólo cupiesen los propietarios de ocho apellidos vascos con Rh negativo. Y casi lo consiguen. Y si se hubiesen salido con la suya, ahora tendríamos como vecino a un gemelo de Corea. Pero de Corea la mala: la del Norte.

Tercero: ¿Quiénes apoyaban, o justificaban, o militaban en E.T.A? Pues veréis: en primer lugar la Iglesia Católica Vasca, que jugaba entonces a dos barajas: diciendo una cosa en el País Vasco y la contraria en el resto de España. En segundo lugar, muchos de los políticos vascos que ahora parecen ángeles: esos que nos hablan del “dolor” que sienten por lo sucedido mientras aún organizan homenajes a los asesinos excarcelados, esos que ahora van a escribir el relato de la Transición. Y en tercer lugar, muchas personas corrientes de la sociedad vasca y navarra: unos, por miedo; otros, por convicción; y todos, convirtiendo aquel territorio vasco-navarro en un terrorífico manicomio.

Cuarto: ¿Quiénes se beneficiaron de los crímenes de E.T.A? A ello voy sin perder un instante: en primer lugar la propia E.T.A, que juntaba dinero a mansalva con los robos, secuestros y extorsiones a empresarios; y en segundo lugar los partidos nacionalistas vascos, que recogían los frutos de las acciones violentas de E.T.A. en forma de réditos políticos, privilegios territoriales y presupuestos del Estado. Bueno, ellos no los llamaban “frutos”: los llamaban “nueces”.

Quinto: ¿Cuánto duró el terror de la E.T.A? Ahí va el dato: más de medio siglo. Cincuenta y tres añitos de nada: entre 1958 y 2011. Por simple comparación, fíjate en estas cifras: la Guerra de la Independencia contra los franceses duró 6 años; las tres Guerras Carlistas vascas, 43 años en total; la Guerra Civil Española, 3 años; la Primera Guerra Mundial, 4 años; la Segunda Guerra Mundial, 6 años; la dictadura de Franco, 39 años. Por eso, cuando alguien te diga que ETA luchaba contra el franquismo, cágate en sus muelas. ETA, en dictadura o en democracia, luchaba contra España: contra la España de Franco, contra la España de Carrero Blanco, contra la España de Arias Navarro, contra la España de Adolfo Suárez, contra la España de Joaquín Calvo-Sotelo, contra la España de Felipe González, contra la España de Aznar y contra la España de Rodríguez Zapatero. Siempre contra España. Lo mismo que ahora hace Otegi, pero con bombas.

Sexto: ¿Sabéis, queridos jóvenes, las bromitas que gastaba E.T.A. en toda España? Vamos a ello. Unos meses nos deleitaba E.T.A. con cadáveres esparcidos por las calles: militares o civiles con los sesos fuera del cráneo, eviscerados, amputados, sanguinolentos. Otras, con niños de 9, 10, 11 o 12 años, hijos de guardias civiles, desfilando en pequeños ataúdes blancos hacia el cementerio. En ocasiones, con gentes anónimas que compraban en el Hipercor, o que veían una película en un cine, o que se bañaban en la playa, destrozadas por las bombas. A veces, con personas encerradas dos años seguidos en un zulo de tres metros: enterrados en vida. En ocasiones, con concejales secuestrados y muertos a sangre fría de un tiro en la nuca: estos días estamos recordando a Miguel Ángel Blanco. Bueno, ellos, los de Otegi, no llamaban a estas cosas “tiros”, ni “bombas”, ni “muertos”, ni “metralletas”. Ellos lo llamaban “lucha”. Y lo siguen llamando, no nos engañemos. Y así nos lo quieren escribir en los libros de texto, para vergüenza colectiva.

Séptimo: ¿Sabéis cuántos vascos tuvieron que exiliarse para siempre de su tierra por sentirse amenazados en aquel ambiente irrespirable? Ya va el dato: 300.000 vascos huyeron. Trescientos mil. Repito: trescientos mil. Son casi la mitad (en número) de los que murieron en nuestra guerra civil. Gentes que ya no votan allí. Gentes que ya no pintan nada allí. Gentes que ya no deciden nada allí. Nunca jamás. Ni sus hijos. Ni sus nietos. Un “retoque” demográfico de muchísima importancia. Una ingeniería social que es la verdadera victoria de E.T.A.: el “retoque” censal que ha permitido ahora, una década después, que los antiguos asesinos, y los antiguos cómplices de los asesinos, y los antiguos aplaudidores de los asesinos, y los actuales hijos de los asesinos, y los actuales justificadores de los asesinos, y los actuales tibios con los asesinos, obtengan en el País Vasco unos magníficos resultados electorales y sean socios preferentes del Gobierno. Sí, sí. Socios preferentes de Podemos y socios preferentes del Partido Socialista, el más castigado (junto al PP) por las balas de los asesinos. Qué vueltas nos da la vida.

Oiréis estos días –queridos jóvenes– que E.T.A. dejó de matar en 2011 porque comprendió que, para conseguir sus objetivos, lo mejor era entrar en política y abandonar las armas. No lo creáis. Se fueron porque no les quedó otro remedio. Se fueron por puro cálculo. Se fueron porque les faltaron armas con las que asesinarnos a todos, y dinero con que comprar dichas armas, y pistoleros que apretasen el gatillo. Se fueron porque ya no tenían suficientes sanguinarios que armasen las bombas y matasen a los niños de un Cuartel, o de un Colegio. Se fueron porque las condenas en la cárcel son larguísimas, y dan que pensar un poco. Se fueron derrotados por la Policía y por la Guardia Civil. Se fueron derrotados por una sociedad (la española) que dijo “¡Basta Ya!” tras el secuestro y asesinato a cámara lenta de Miguel Ángel Blanco. Se fueron, en resumidas cuentas, porque les vencimos. Porque la democracia, el mejor de los sistemas posibles, les ganó entonces la batalla. Aunque ellos, por desgracia, estén a punto de ganar ahora la guerra.

Adiós, E.T.A. Adiós. Adiós a ti y a la perra que te parió. Adiós a tu maldad y a tu lenguaje presuntamente progresista salpicado de Rh negativo, y de eufemismos, y de nacionalismo, y de fanatismo, y de racismo, y de tenebrismo, y de terrorismo, y de fascismo. Adiós al medio-perdón que pides con la boca pequeñita, y que yo no necesito, y que yo no te concedo, y que yo no te otorgaré jamás. Adiós al champán con que brindabas en la cárcel cuando matabas a alguien. Adiós a las nueces que caían del nogal cuando tú lo agitabas a las bravas; esas nueces que otros recogían, esas nueces que se convertían en réditos. Adiós a los entierros de tus víctimas por la puerta de atrás de las iglesias. Adiós a los curas y obispos que te amparaban bajo las sotanas, ésos que ahora piden también perdón pero no tienen perdón de Dios. Adiós a las tumbas profanadas de los asesinados, a esos sepulcros que –cual vampiros en la noche– pintarrajeabais con escritos insolentes para humillar a los deudos y matar dos veces a vuestras víctimas. Como el mismísimo cadáver de Miguel Ángel Blanco, a quien la familia tuvo que desenterrar del cementerio de Ermua para trasladar sus restos a Galicia.

Adiós, canallas. Adiós, malnacidos. Adiós, cobardes. Adiós, grandísimos hijos de la grandísima puta. Adiós. Adiós. Adiós.

No regreses por mi casa, E.T.A. de tristes recuerdos. No te quiero ni aunque hables en eusquera, o en catalán, o en español, o en gallego, o en valenciano, o en latín. Que los muertos, por desgracia, jamás entienden de idiomas.

Firmado: 

Juan Manuel Jimenez Muñoz.

Médico y escritor malagueño.

viernes, 8 de julio de 2022

Ya tenemos una (modesta) web turística de Lugo

 

La web por ahora está en versión PC y falta la de dispositivos móviles, pero todo se andará


Hace ya años que el Ayuntamiento de Lugo decidió hacer desaparecer la web turística de la ciudad, una que había costado una buena pasta y que acabó, como tantas cosas en nuestra ciudad, en el cajón de las iniciativas fracasadas. En el mismo podemos ver también las aplicaciones turísticas, que también costaron un montón de dinero público, y más cuestiones que se presentaron a bombo y platillo, con gran despliegue de medios, y que acabaron olvidadas porque una vez pasado el efecto “ooooh” da mucha pereza mantener las cosas.

Desde ayer hay una modesta página sobre turismo en Lugo tras la presentación de www.turismoenlugo.com. Está ilustrada mayoritariamente por fotografías cedidas desinteresadamente por el siempre generoso Manuel Buján Peón, una persona que siempre está ahí para cualquier cosa que tenga que ver con Lugo, algo que nunca le agradeceremos suficientemente.

La web en sí es una iniciativa sencilla, con una disposición de elementos clara y sin información farragosa, ya que se intenta captar la atención del público para que sepan qué visitar y qué hacer en Lugo, con referencia a las principales fiestas de la ciudad como el Arde Lucus y el San Froilán, pero también recogiendo otros certámenes que se celebran en Lugo empezando por el “Milagro” de San Vicente, que organiza la asociación Lugo Monumental, titular de la web y que tengo el honor de gestionar.

La página pretende ser una orientación al visitante, e incluye apartados sobre alojamientos y locales recomendados de hostelería, y una sección de compras y servicios. Ambas están recién inauguradas, pero se irán incorporando a los más de 100 asociados de Lugo Monumental paulatinamente, contando cada uno de ellos con su propia sección en la web para darse a conocer al visitante.

También se ampliarán los contenidos turísticos de la página, que actualmente se ciñe a los principales reclamos turísticos del casco histórico de Lugo (no podemos olvidar que Lugo Monumental es una entidad de barrio, circunscrita al recinto amurallado) que es el principal destino de los visitantes de la ciudad.

En todo caso, la intención de la Asociación es ir abriendo las opciones para que quienes vienen a Lugo puedan usar nuestra ciudad como “punto cero” y organizar viajes de varios días teniendo su epicentro en Lugo.

Aún falta mucho por hacer, cosas que añadir, excursiones, puntos de interés del resto de la ciudad, una versión para dispositivos móviles... y si les digo la verdad hay cosas del diseño que no me vuelven loco, pero queríamos ponerla a funcionar cuanto antes porque la campaña de verano ya ha comenzado y no era cosa de esperar mucho más.

Si ven que falta algo en la página, no se corten y avisen, porque estoy seguro de que se nos han quedado un montón de cosas en el tintero y será un placer que entre todos hagamos crecer esta sencilla iniciativa pensada para echar una mano a la promoción de Lugo.

jueves, 7 de julio de 2022

Siete años esperando por los kioscos

Siete años cerrados y ahora nos venden su "próxima" reapertura como un éxito de gestión...

En marzo del año 2015 los tres kioscos que había en Lugo de gestión municipal cesaron su actividad. Uno en la plaza de España, otro en Santo Domingo y otro en la Milagrosa. Desde aquel entonces, ya hace más de siete años, se nos dijo reiteradamente que iban a reabrir e incluso en aquel mismo año el entonces alcalde Orozco hablaba de la búsqueda de fórmulas para su pronta apertura… Se ve que no aparecieron.

El año pasado, en mayo de 2021, anunciaron nuevamente que se reabrirían, seis años después del cierre, y estos días vuelven a anunciar que próximamente saldrá el nuevo pliego de licitación. Se ve que las cosas de palacio van despacio, pero que en Lugo son especialmente pausadas con lo que el cartel que alguien puso en la Avenida de la Coruña va camino de ser el lema municipal: “exce-LENTÍSIMO Ayuntamiento de Lugo”.

Que llevemos siete años sin baños públicos en el centro parece que es lo de menos. Clausuraron los subterráneos de la Plaza de España y los tapiaron porque abrían estas maravillosas nuevas instalaciones, pero durante todo este largo periodo ha habido un abandono total del asunto.

Y ahora anuncian la reapertura de dos kioscos… ¿y el tercero? Cuando reformaron la plaza de la Milagrosa lo hicieron desaparecer y lo pusieron de mala manera en el parque de Frigsa, donde estaba allí a mano de vándalos y demás fauna. Después lo movieron a ese mismo recinto, pero a un lugar más discreto, tras las naves municipales que están en el propio parque y hace un mes seguía allí y entiendo que allí seguirá, para mayor gloria de la administración.

No parece que tengan mucha intención de volver a colocarlo en su sitio y eso tiene dos posibles explicaciones: o el kiosco ya está para tirar con él a la basura, cosa que dudo porque esos chismes están pensados para la intemperie y sería raro que se haya estropeado, o simplemente cuando hicieron la reforma de la plaza se les “olvidó” poner canalizaciones de electricidad y agua en previsión de reponer el kiosco en su sitio. Apuesto por esto último a la vista de la habitual desidia que caracteriza nuestra casa consistorial.

La digna oposición ha preguntado por este tercer kiosco, se ve que no tienen idea de dónde está, lo que denota que mucho interés por el tema tampoco es que haya, porque tampoco es que lo hayan enterrado bajo el Edificio Verde, está razonablemente a la vista.

Lo que más me pasma de todo esto es que se hacen las cosas con retrasos de muchos años, de forma chapucera… ¡y encima se anuncia como si fuera una gran iniciativa! Hasta he leído a alguien que felicitaba a la alcaldesa en plan “¡Qué buena idea!”… ¿Buena idea? ¿En serio? ¿Recuperar unas instalaciones que llevan siete años abandonadas en pleno centro es una “buena idea”?

Quizás estamos tan acostumbrados a un nivel penoso que nos conformamos con cualquier cosa. Personalmente a mí me daría vergüenza anunciar esto cuando ha pasado semejante cantidad de tiempo, pero ya ven que para algunos cuela cualquier cosa.

Siete años esperando por los kioscos y tienen el cuajo de salir a vender el tema como si hubieran inventado la rueda. Una gestión desastrosa y la sacan como una gran iniciativa… acojonante.


miércoles, 6 de julio de 2022

300 números de un periódico de primera

Los números especiales, como éste de las rebajas de julio del año pasado, tienen mucho éxito

300 números de cualquier publicación son muchos números. 300 números de un periódico gratuito es una hazaña, y es lo que acaba de conseguir De Segunda, que cada mes nos trae anuncios clasificados y mucha información útil de Lugo.

Cada mes dedican espacio a un barrio de la ciudad, lo que a todos nos encanta porque por mucho que queramos ir de cosmopolitas por la vida al final somos más de campo que las amapolas, lo que no tiene absolutamente nada de malo. Es inevitable, cuando vemos una foto aérea de Lugo lo primero que hacemos es buscar nuestra casa y aunque sólo se vea el tejado nos hace ilusión. Supongo que hasta en Nueva York hacen lo mismo, pero allí la lupa tiene que tener más aumentos.

De Segunda basa su éxito en una muy buena distribución del periódico, un diseño sencillo pero efectivo, cosechar mucha información de interés como la agenda de actividades de la ciudad, y un montón de anuncios clasificados que hasta cuando no buscas nada los lees por mera curiosidad. Yo personalmente me lo miro de cabo a rabo cada vez que lo veo, no me pregunten el motivo.

Además de todo esto De Segunda hace una labor de difusión de equipos deportivos de la ciudad sin cobrarles un céntimo, y también de autores noveles, clubes y asociaciones, lo que es muy de agradecer.

Completan todo esto con secciones directas, claras y entretenidas. Hay una que se llama directamente “chorradas”, y que tiene un gran éxito entre el público que a todos nos hace falta sonreír de vez en cuando.

Por si todo esto fuera poco, también tienen un servicio de reparto de publicidad que funciona de maravilla. Yo lo he usado alguna vez (por ejemplo con la EXFILNA hicieron una difusión en un pasmoso tiempo récord) y trabajan de maravilla.

En fin, que simplemente darles la enhorabuena por este “cumplenúmeros” y felicitarles por alcanzar los tres centenares de publicaciones, que no es moco de pavo, y agradecerles la labor que hacen en Lugo.

Felices 300 números y ¡a por muchos más!




martes, 5 de julio de 2022

Enésimo intento para cafetería de la Vieja Cárcel

La Vieja Cárcel tal y como la diseñó Nemesio Cobreros. Lástima no recuperasen esa estampa

Lo de la cafetería de la vieja cárcel es uno de esos marrones que se veían venir pero que hasta que lo tienen encima, sus responsables no caen del guindo. Se creen que con tener unas buenas vistas, algo que nadie discute, ya habrá bofetadas para conseguir la licitación porque dan por sentado que la hostelería es una mina de oro y que con unos cuantos cafés ya haces el agosto.

Que lo piense una parte de la población que tiene de hostelería la misma idea que de física cuántica, tiene un cierto pase, pero que quien ha de poner a funcionar una instalación intente timar a los emprendedores es, como mínimo, llamativo. Y sí, digo timar con todas las de la ley porque han pasado de pedir 2.000 euros al mes a 100, así que una de dos, o ahora la están regalando porque no es aceptable llegar a las municipales del 2023 con eso cerrado (cosa que no es descartable) o antes estaban estafando a los interesados. No caben muchas más interpretaciones.

Este sainete comenzó ya cuando nuestro Gobierno decidió que tenían mejor gusto que Nemesio Cobreros y añadieron una planta más a un edificio que tenía que tener dos menos. Le incrustaron esa pecera sobre el cuerpo frontal, que por lógica tendría que haberse reducido a la altura original diseñada por aquel gran arquitecto, y se felicitaron unos a otros por la gran idea de tener una cafetería súper mona de la muerte.

Tan ideal les pareció que tras esperar “únicamente” un año y medio desde la inauguración del edificio (que se abrió en marzo de 2017) sacaron a licitación el espacio en julio de 2018 pidiendo 2.000 euros mensuales de alquiler y una larguísima lista de requisitos acordes con su idea “naif” de lo que ha de ser una cafetería guachi ideal: menús ecológicos, comercio justo, horarios limitados… y quedó desierto, como era evidente. Bueno, para ser justos hubo un postor que picó pero lo dejaron fuera por ser una comunidad de bienes, y que jamás volvió a participar porque se dio cuenta de que había esquivado una bala.

Dos concursos en 2019 con condiciones similares, aunque bajando el canon en el segundo a 1.200 euros, también quedaron desiertos. Las condiciones eran inasumibles y a pesar de que se les dijo reiteradamente, insistieron en la cabezonería de pretender vender duros a cuatro pesetas, cosa que nadie compró.

De las vistas únicamente no se come...

Llegó la pandemia, la gran excusa para la paralización de cualquier cosa, y aunque empezó en marzo de 2020 les sirvió de argumento para estar sin hacer nada desde principios del 2019 hasta septiembre de 2021, donde volvieron a la carga. Cambiaron de sistema y en vez de una concesión administrativa optaron por una demanial que da más libertad al adjudicatario. También se independizó el horario del de la Vieja Cárcel, algo que era de sentido común pero que se resistieron a hacer hasta la cuarta tentativa. Tampoco coló.

En enero de 2022 vuelven a intentarlo con una concesión de 1.360 euros por 5 años prorrogables por 10 más y ni así. Les diré que de esa pensé que lo conseguirían, pero claro, no había visto que el primo que se haga con el local tiene que poner la salida de humos, la climatización, las neveras, la vajilla, el equipamiento… y que todo ello queda para mayor gloria de la administración. Tampoco pujó nadie.

Y llegamos ahora a junio de 2022. Tras presumir de haber “invertido” 30.000 euros en mejoras en la cafetería para que sea más atractiva (si se fijan en el detalle, si llega a picar alguien en la puja inicial de 2018 se habría comido aquel alquiler de 2.000 euros más estos 30.000 de “mejoras” que le habría tocado hacer) bajan el precio a 100 euros mensuales pero se mantiene la obligación de poner equipamiento de cocina (que cuesta una fortuna), salida de humos, climatización y demás requisitos para poder funcionar, que también quedarán en propiedad municipal.

Creo que se vuelven a equivocar. No es interesante meterte a una iniciativa cuyos plazos son ajustados (limitan mucho los tiempos para hacer las instalaciones) y de la que no se saben los costes. Lo suyo, creo yo, sería que al menos tengan algunos presupuestos de esas instalaciones para saber de qué hablamos.

En definitiva, lo único que sabemos es que la cafetería de la Vieja Cárcel, esa supuesta joya, ese presunto chollo, esa presumible mina de oro, lleva cerrada a cal y canto desde 2017 porque las expectativas del Ayuntamiento siempre estuvieron erradas. Se les ofreció colaboración para ver cómo solventarlo, pero ni caso hicieron… y así les va.

Sería divertido, si no fuera porque esos errores los pagamos todos.