viernes, 5 de abril de 2013

La monarquía en el Sálvame Deluxe

La infanta ha sido imputada. No fue sin tiempo la cosa. Por mucho menos metieron en los juzgados a otras personas, eso sí, de menos alcurnia. Si a al exmujer del exalcalde de Marbella (cuánto “ex”) la liaron por ver a su señor esposo entrar con bolsas de basura llenas de billetes sin extrañarse, lo mismo de debe de pasar a Doña Cristina de Borbón, por muy de Borbón que sea. 

Ahora la cuestión es la siguiente: si hay condena de por medio y declaran culpable a la hija del Rey, ¿se desestabiliza – aún más – a la monarquía? Parece que la respuesta obvia es que sí, sobre todo porque las cosas parecen apuntar a que la Casa Real sabía por dónde iban los tiros y en lugar de cortar de raíz el tema se limitaron a decirle a Urdangarín que “dejara los negocios”. No debería funcionar así el tema, porque para evitar un pequeño problema han creado uno de dimensiones aún por averiguar. 

Si un alcalde roba, nadie cuestiona que el Ayuntamiento ha de continuar con otro alcalde. Si un Presidente hace lo propio, sucede igual. Si la Familia Real no responde la solución no tiene por qué ser, necesariamente, la República, sino quizás la cesión de la corona a alguien que no esté manchado por todos estos temas. ¿El Príncipe de Asturias? Quizás. 

La monarquía no puede ser un capricho pasajero, sino una decisión meditada, ya sea a favor o en contra. Todos esos discursos que hablan del coste económico de la Corona parten de un supuesto absurdo, que es decir que España tendrá Rey o Presidente de la República según nos salga más barata una cosa que la otra. Curiosamente la monarquía es más barata que la república aunque sólo sea por el extraordinario coste que tienen las campañas electorales y la organización de elecciones en sí mismas, así que el argumento, además de hueco, es absurdo incluso en la forma. 

Personalmente he tenido siempre simpatía por la figura de la monarquía pero siempre y cuando ésta responda a su papel, cosa que parece que no está pasando en España. El Rey ha de ser un elemento de estabilidad, de cohesión, que esté por encima del juego político y que agradezca sus muchos privilegios (contra los que no estoy) con una actitud y un respeto que parece que no se está teniendo en este momento. 

Ya no se trata sólo de pegar tiros a elefantes, cosa que no ayuda lo más mínimo a que nos caiga simpático el monarca, sino de que si detecta la más mínima sombra de delito en miembros de la Casa Real no sólo los ataje sino que, de persistir, sea el primero en poner la pertinente denuncia, porque primero va España y la Corona, y luego la familia, por duro que sea. En el cargo le va aceptar esto. 

En Inglaterra la monarquía peligró por los eternos cuernos que llevaba Diana de Gales, que cumplió con su muerte el último requisito necesario para elevarse a los altares del imaginario colectivo y convertirse para siempre en Santa Di. Ni la reina ni nadie de su familia hicieron nada ilegal y aún así se consideró uno de los peores escándalos de su largo, larguísimo reinado. Su “annus horribilis” incluyó la muerte de Diana de Gales, el escándalo de los támpax de Carlos de Inglaterra y el incendio del castillo de Windsor. Ni comisiones, ni contratos, ni enchufes, ni fundaciones, ni sueldos basura… todo transparente como el cristal. Y la monarquía tembló. 

Pero “Spain is different”, aquí somos de blanco o negro. Si se pasaron décadas sin mencionar la posibilidad remota de que los cuernos de doña Sofía superasen con mucho a los de Lady Di, ahora se ha pasado al otro lado y a perro flaco todo son pulgas. 

Pues ni tanto ni tan calvo. Si hay que abrir un debate sobre la Monarquía como forma del Estado, que se abra. Y ya de paso podemos hacer tábula rasa y, como he dicho aquí alguna vez, no sólo modificar la Constitución sino escribir una nueva y revisar unas cuantas cosillas como la organización del Estado, las instituciones, las competencias y todas esas cosas que tantos problemas crean y tan pocos resuelven. 

¿Quieren debatir sobre el modelo de Estado (otra vez)? Pues vale, pero que sea en un foro más serio que el Sálvame Deluxe o La Noria. Si queremos modificar el esquema que sea porque tenemos motivos lógicos para ello, y no abramos este melón porque el Rey tiene una “amiga íntima” (que es como se llama a una presunta querida en la prensa para no meterse en excesivos líos) o porque el yerno metió mano a la caja, o la hija, o incluso el propio Rey si fuera el caso. Eso son personas, situaciones puntuales, no un modelo de Estado. Seamos serios, aunque sea por una vez.

jueves, 4 de abril de 2013

El crimen de Feijoo

Ayer no llegué a publicar el artículo porque me olvidé de darle al botón final que lo cuelga. Fue una pena porque habría resultado profético ya que hablaba de las declaraciones del juez Taín sobre las conversaciones entre Feijoo y Dorado y de que me parecía que estaban sacadas de madre. Pero la noche es joven y aún podemos tratar el tema aunque ya sin que pueda ganar el premio Bruja Lola a la adivinación.

Hoy sale en prensa el juez diciendo que se le ha sacado de contexto y malinterpretado cuando ayer sólo venía a decir que Feijoo no hizo nada malo, que por las conversaciones no se podía deducir que había nada oscuro ni que se continuaba una relación personal. Pero da igual, señor juez, eso es lo de menos porque aquí no estamos hablando de Feijoo como amigo de un narco, eso es irrelevante. Aquí de lo que se trata es de intentar buscar una brecha en el casco del único buque que con la crisis no sólo no ha hecho aguas sino que ha flotado con más tranquilidad en los mares electorales. Y todo eso a pesar de que intentaron acojonar a la población dando una lista de precios de lo que costaría ir al hospital (por cierto nunca más se supo de aquella campaña malintencionada como pocas he visto) o desacreditarlo llamándolo asesino, así, con todas las letras.

Porque es de eso de lo que se trata, el gran delito de Feijoo, su pecado original, lo imperdonable... haber demostrado que Galicia quedó tan harta del bipartito que ni con números rojos consiguieron que perdiera credibilidad a los ojos de los gallegos.  No hablamos de las relaciones de don Alberto con un narco, hablamos del único punto débil que han encontrado en cinco años de presidencia y en bastantes más de carrera política.

Quienes cuentan en su álbum de recortes con instantáneas junto a Dorribo, Lińares (sin entrar ya a los viejos tiempos de Barrionuevo y compañía), o directamente gente condenada por delitos pero que quieren hacer todavía carrera política son los que con más energía están intentando que los gallegos duden de la honorabilidad de Feijoo, ya que ven impotentes cómo el Presidente de la Xunta ha superado con cierta facilidad los obstáculos para su elección y reelección.

Lo mejor que tiene todo este tema es que es tranquilizador saber que tras mirar con lupa su labor sólo han podido sacar titulares con esta foto. Casi les diría que me parece que les ha salido el tiro por la culata porque la reacción de Feijoo ha sido ejemplar: comunicado de prensa a las pocas horas de salir el tema y rueda de prensa el primer día "lectivo" para tratar el tema sin complejos. No parece del PP, que suele caracterizarse por una torpeza casi legendaria en lo que a comunicaciones se refiere.

Si realmente este era el mayor cartucho que tenían para acabar con él tenemos por delante Feijoo para rato.

martes, 2 de abril de 2013

¿Cuánto costará la peatonalización de Quiroga Ballesteros?... ¡Y sin empezar las obras!

Lo prometido es deuda. Hoy toca hablar de los dineros de la peatonalización de la calle Quiroga Ballesteros. 

Cuando el otro día salió la noticia en prensa, en que el Ayuntamiento daba a conocer que iba a proceder a la conversión de esta vía en peatonal, se dejó caer como quien no quiere la cosa que se había encargado un “estudio” por la no desdeñable cifra de 9.559,00 €. 

Si uno se para a pensar en la cifra se da cuenta de que es dinero. Yo siempre paso a pesetas todo porque sigo con ese baremo (me veo como los abuelos de hace años que aún hablaban en reales) y me suena mucho más decir que es casi 1.600.000 pesetas que casi 10.000 euros. Como si fuera más o menos pasta dependiendo de la divisa. 

 “Bueno”, dirán los bienintencionados, “es que un estudio serio de la peatonalización es normal que cueste dinero. Se tienen que tener en cuenta todos los servicios de la calle como canalizaciones, electricidad, alcantarillado, el desvío del tráfico…”. Estaría de acuerdo si no fuera porque en el Ayuntamiento de Lugo trabajan muchas personas entre las cuales hay un fantástico servicio de ingeniería que será el que haga el trabajo duro, que es el relacionado con todo lo que va de la acera para abajo. Por otro lado hay un plan de tráfico que, presumiblemente, deberá contemplar esta opción, y si no o es que las cosas se han hecho precipitadamente o es que el estudio es una porquería. 

Es decir, que los casi 10.000 € que se dan a una empresa externa (vamos, lo que es una privatización como la copa de un pino teniendo personal de sobra para hacerlo en casa) son simplemente para que digan dónde poner los bancos y las farolas. Yo se lo hago por la mitad, o menos aún. 

Lo que me preocupa más que seriamente no es sólo el despilfarro, que también, en una carallada que puede decidir cualquier persona con un mínimo de gusto, sino el estilo que nos van a meter en la calle. ¿Vamos a tener un nuevo mausoleo como el de la Plaza de San Marcos? ¿Nos meterán más lápidas como en la Plaza de España? ¿Harán una “desfeita” como la de la llamada “plaza inútil” de Ramón Ferreiro? ¿Destrozarán la estética de la zona como en “O Cantiño”?... 

El buen gusto no caracteriza precisamente a nuestro gobierno local o, mejor dicho, a las empresas que contrata para decidir cómo se urbanizan las zonas a peatonalizar. Sus actuaciones en esta materia en el pasado hacen que se vea el futuro con cierta preocupación. 

Por otro lado, la confianza que tienen en los vecinos de Lugo es bastante escasa. Yo soy partidario de que estas cosas se resuelvan con concursos de ideas. Se puede convocar publicitándolo sin un gasto excesivo (unos carteles y la noticia en prensa son más que suficientes) en el colegio de arquitectos, el de aparejadores o la escuela de artes aplicadas. Seguro que hay por ahí más de una cabeza pensante que se animaría a presentar propuestas para humanizar la zona, sobre todo cuando lo que hay que presentar no tiene la carga de profundidad que supone la solución de los problemas que puedan dar las alcantarillas, el gas o la electricidad, que de eso se encargan los servicios municipales. 

No seré yo quien esté contra la privatización de servicios, que apoyo siempre que se haga como hay que hacerla. En Lugo tenemos ejemplos de privatizaciones que han funcionado muy bien, como el mantenimiento de jardines y zonas verdes, y de otras que son más discutibles, como la construcción de los aparcamientos subterráneos, que se han quedado desfasados y que son incómodos hasta el absurdo. 

Pero una cosa es encargar a una empresa un servicio que no tienes y otra muy diferente ningunear al personal al que ya pagamos todos los meses con nuestros impuestos para hacer el estudio fuera de casa. No sólo es ridículo sino caro. ¿Cuánto costará la peatonalización de Quiroga Ballesteros? Por ahora unos 10.000 euros sin empezar las obras siquiera. Más los sueldos que pagamos todos los meses a los técnicos que podrían hacer eso sin coste alguno... Mal empezamos.

Luego nos extrañamos de que las juezas pidan expedientes en cantidades industriales. Es que suena todo tan raro…

lunes, 1 de abril de 2013

Entre yates anda el juego

Les dije el otro día que hablaríamos del presupuesto de la peatonalización de Quiroga Ballesteros, pero que podría haber temas de actualidad. Lo hay. La foto de Feijoo creo que merece desplazar a mañana el otro tema. 

Sale una foto de Feijoo con su colega de hace 20 años y le ha faltado tiempo al BNG para pedir su dimisión. Parece que aún supuran ciertas heridas, como la de la foto de Quintana en el yate, con la bandera española de fondo, que le costó al bipartito las elecciones por acumulación con otras meteduras de pata públicas y notorias (me resisto a creer que una única cosa te haga perder unas elecciones si eres un brillante gobernante). 

Feijoo ha salido con un comunicado en el que afirma que cuando supo lo que hacía este señor dejó de tener relación con él. No tenemos por qué no creerle. Yo tengo conocidos e incluso amigos que han venido de vacaciones conmigo que después resultaron ser lo que no parecían (sin fardos de coca, pero fueron decepciones personales importantes). Incluso a mucha gente le ha pasado que durante un divorcio su expareja saca a relucir una mala leche que era desconocida para su cónyuge durante los 20 o 30 años de matrimonio. 

Parece bastante básico, pero lo voy a decir explícitamente por si acaso: nadie puede ser culpabilizado por lo que hace un tercero, por estrecha e íntima que sea su relación. Cuando digo nadie, me refiero exactamente a eso. Yo jamás he dicho que Orozco tenga que ser culpabilizado de las cafradas o presuntas cafradas que hacía Liñares en el Ayuntamiento de Lugo. Tampoco creo que Rajoy tenga la culpa de lo que hacía Bárcenas, o Griñán de que un cargo de su Junta pusiera el cazo para los EREs. No es un "y tú más", justo lo contrario, es una defensa global.

Y no me entiendan mal: no digo que en estos casos no haya que pedir explicaciones, claro que hay que hacerlo, pero porque hablamos de personas que están bajo tu mando. Lo de Feijoo ni siquiera llega a ese grado de responsabilidad. En los tres ejemplos (Orozco/Liñares, Rajoy/Bárcenas, Griñán/EREs) se puede entender que hay un grado de responsabilidad (no de culpabilidad a menos que exista complicidad o que estuvieran metidos en el ajo) porque se entiende que si una persona es subordinada tuya has de tener un cierto control sobre lo que hace. Lo que se llama culpa in vigilando. De todas formas se entiende que al primero al que le intentan ocultar estas cosas es al jefe, siempre que éste no lleve porción del pastel, claro, pero incluso en este caso tu culpa también es por tus actos, no por lo que hace otra persona. 

La foto de Quintana no le hizo perder las elecciones porque su colega fuera mala persona, sino porque la administración de la que Quintana era vicepresidente acababa de darle una concesión muy jugosa en el tema del concurso eólico. Es decir, no se culpa a Quintana de nada que hiciera su amigo (que en teoría tampoco hizo nada malo) sino que se pedían explicaciones de lo que parecía que podía ser un trato de favor. Aquí no hay nada de eso: no se acusa a Feijoo de esconderle fardos de coca en el sótano de su casa, ni de utilizar cargo alguno para echar un capote al señor este. Sólo se le acusa de haber sido amigo suyo. 

Pues qué quieren que les diga, con las vueltas que da la vida tarde o temprano es fácil que todos nos tengamos que avergonzar de alguna amistad, porque una cosa es la gente en su vertiente social y otra en sus tejemanejes. Y si no que pregunten a todos los “amigos” de Dorribo, o a la típica señora que cuando hay un asesinato en el piso de abajo dice que el homicida “era un señor muy agradable, saludaba siempre en el ascensor y me sujetaba la puerta del portal”… 

A ver si ahora tenemos que pedir certificado de penales para tomar un café.


miércoles, 27 de marzo de 2013

Gobernar es decidir

Los gallegos somos conocidos por no definirnos con facilidad, tal y como refleja la expresión de que no se sabe si subimos o bajamos. Algunos somos excepción al tema, ya que es fácil saber qué opinamos de algo con sólo preguntar (o incluso sin preguntar si lees el blog), y quizás sea un error porque el que tiene boca, se equivoca, y cae en la peligrosa deriva de la contradicción. 

¿Cómo no contradecirse? Suele ser sencillo, diciendo lo que se piensa. Uno puede cambiar de idea, o evolucionar respecto a su opinión original con algo, a mí me ha pasado con temas como la limitación de mandatos de cargos públicos (antes no la apoyaba pero ahora sí tras una conversación con un amigo que me convenció de lo acertado de esta medida), pero cuando hablamos de principios es más difícil andar variando. 

Alumnos de As Mercedes - Foto de La Voz de Galicia
Cuando se defiende simultáneamente una cosa y la contraria ahí ya no estamos ante una indefinición, sino ante una cara dura como el cemento armado. Es lo que le pasa a nuestro bienamado gobierno local, que exige a la Xunta diálogo con los alumnos y profesores de As Mercedes mientras que respecto a la peatonalización de Quiroga Ballesteros la niega a los placeros y comerciantes con el argumento de que una decisión de este tipo afecta a toda la ciudad y no se deben tener en cuenta los intereses de unos pocos. Con los vecinos del puente, en cambio, también quieren dialogar (como con los de As Mercedes) para no peatonalizar un puente tras gastar una pila de millones en la que, según ellos, sería la alternativa al tráfico. 

Personalmente creo que un gobierno ha de gobernar. Esto no quiere decir que haya que dar puñetazos en la mesa a diestro y siniestro y hacer lo que le venga en gana, no se trata de eso, pero sí de hacer lo que se considera necesario sin preocuparse de si las encuestas les dan o quitan votos por ello. Si se hubiera encuestado a los "interesados", los coches y autobuses seguirían pasando por delante de los Franciscanos.

Por supuesto ese principio básico no quiere decir tampoco que no se escuche a la gente. No parece muy lógico tomar decisiones a puerta cerrada y sin hablar previamente con las personas afectadas, ya que siempre se dice que cuatro ojos ven más que dos, y doscientos pares verán más que cinco. Creer que se está en posesión de la verdad de manera absoluta de forma que no sea necesario hablar con nadie más me parece un error. 

Pero consultar tampoco es vincular. Uno puede reunirse con los vecinos de la zona, con los comerciantes, las asociaciones, la junta de cofradías y el deán de la catedral para tratar temas que les afecten, pero es no implica que se haga lo que estas personas digan. ¿Para qué reunirse entonces? Pues porque nos pueden hacer ver cosas que se nos habían pasado, para explicar las decisiones que se prevé adoptar o, incluso, para dar salida a un derecho que debería ser constitucional y que es el de la pataleta. 

Recreación del puente romano
http://lvcvsavgvsti.blogspot.com.es
Creo firmemente que el paso de As Mercedes a un centro de Formación Profesional puro es totalmente lógico, como lo fue en el caso del Politécnico. Si queremos una FP seria y competitiva va siendo hora de centrarse en ella haciendo que los centros de enseñanza de profesiones estén dedicados a ello en exclusiva entre otras muchas medidas. También creo que peatonalizar Quiroga Ballesteros y el puente mal llamado romano es no sólo una buena idea sino algo que, como ha pasado en otras zonas, beneficiará (y mucho) a los comercios y, sobre todo, a la ciudad. 

Pero también creo que tanto la Consellería de Educación como el Ayuntamiento de Lugo han metido la pata en el proceso. Lo suyo es reunirse con la gente para plantear lo que se está estudiando y pedir opinión, no para modificar el fin último, sino para ver alternativas a los problemas que se pueden plantear y que tal vez no se aprecian desde un despacho. 

En el caso de As Mercedes, por ejemplo, ya hubo problemas cuando se hizo lo mismo con el Politécnico cambiando todo a medio curso. No parece muy lógico recolocar a los alumnos en abril cuando faltan dos meses y pico para acabar el curso. Lo suyo debería ser terminar donde empezaste y el año que viene convocar ya las plazas en los centros que se considere conveniente. 

En cuanto a Quiroga Ballesteros los comerciantes y empresarios de la plaza y el entorno también tienen que tener derecho a hablar, a exponer sus quejas, los problemas que puede generar la medida y que así se propongan soluciones que no eviten la peatonalización pero maticen sus efectos. 

No será lo último que hablemos de este tema. El lunes, si no se nos va el nuevo papa o hay un tema de más urgencia, les contaré lo que nos costará a los lucenses decidir dónde van los bancos y farolas, porque el resto ya está diseñado.

martes, 26 de marzo de 2013

Más zonas peatonales

En ocasiones es complicado marcar límites. Verán, ya saben que yo defiendo la peatonalización como una de las mejores formas de humanizar estas colmenas que llamamos ciudades. La agresividad de una acera estrecha donde convives con tubos de escape y pasos de cebra (ya nadie les llama así, ¿se han fijado?) se matiza mucho con una amplia tira de piedra que permita la convivencia de peatones y otras opciones como la bici, los patines o el carrito de niño. 

Qurioga Ballesteros - Foto de La Voz de Galicia
Sin embargo, que es una forma más pija de decir “pero”, nadie en su sano juicio puede defender un absoluto en el tema de la peatonalización. No sería lógico que no pudieran circular coches desde la plaza del Rey a la Piringalla, ya que lo que haríamos así sería desertizar la ciudad. No hay que pasarse. 

Ayer nos contaba el Ayuntamiento que quieren peatonalizar la calle Quiroga Ballesteros, en su tramo desde la calle Montevideo hasta Santo Domingo. Obviamente esto supone automáticamente la peatonalización de la parte de abajo de Santo Domingo, ya que su único acceso es por la plaza de abastos, y en esta plaza quedaría únicamente una vía para dar servicio al aparcamiento subterráneo. 

En principio la idea no me parece mala, me gusta que el peatón vaya ganando terreno en el casco histórico y me parece que es una calle que puede tener mucho futuro como peatonal, ya que hay negocios, hay vida en ella. Me parece, desde luego, una opción mucho más lógica que cuando peatonalizaron el tramo de ronda, que sólo sirve para… ¿nada? 

El problema de peatonalizar Quiroga Ballesteros es el tráfico. Hay mucha gente que cruza por el centro desde la ronda, a la altura de la Gasolinera Martínez, hasta la calle Castelao. Esta gente ahora tendrá que ir por la ronda y saturar aún más esta vía, con los consiguientes líos de tráfico en la calle Villalba y esa zona, que ya le llega bien. Por otra parte, imaginen el cristo que se puede montar en la calle del Teatro si no calculan bien el tema, ya que sería de acceso a los dos aparcamientos (Santo Domingo y Ánxel Fole), además de entrada y salida para toda la zona peatonal (coches de propietarios de garajes) y servicio de abastecimientos varios, transportes… 

También es preocupante el tema de la Plaza de Abastos. No es lo mismo una tienda tipo zapatería, mercería o incluso textil, que un sitio donde hay que meter terneras enteras y cajas de pescado. Tampoco es lo mismo para el comprador, que lleva cosas que pesan y que querrá, intuyo, poder acercar más o menos el coche. La solución a esto es el túnel que siempre dicen entre la plaza y el aparcamiento subterráneo, y después que la gente se busque la vida para hacer descuentos con horas de aparcamiento como hace el resto del comercio del casco histórico. 

Dejo para el final lo que más me quita el sueño… ¿van a hacer una horterada del estilo de la que han hecho en San Marcos? Ya sé que lo que mola es ser modernos, pero para eso que se compren un coche eléctrico. Me dejen la ciudad más o menos presentable, por favor, que frente a la Diputación uno no sabe si vestir de Pasarela Cibeles o pisar con cuidado por si hay gente enterrada. Es lo que tiene plagar una plaza de lápidas. 

Tengo que decir que el buen gusto no caracteriza a nuestros actuales gobernantes en Lugo, y que cada vez que hacen algo la cagan en ese sentido: el puente romano, la plaza San Marcos, O Cantiño, el paseo de las lápidas de la plaza de España… hay innumerables ejemplos de lo paletos que son a la hora de reorganizar la estética urbana, al menos en mi opinión por supuesto. 

La calle de Quiroga Ballesteros puede ser peatonal, sin duda, pero al igual que pasaba con San Marcos con cerrar el tráfico y elevar la parte de la calzada a la altura de las aceras igualando el pavimento va que arde. Y por favor, cuidadito con el “mobiliario urbano”, que las farolas torcidas esas que ponen ahora son, además de feas, un coñazo.

lunes, 25 de marzo de 2013

¿Dónde están los que pedían la intervención?

Hay cosas que son opinables. Otras no tanto. Por ejemplo, que la estrategia que está siguiendo Rajoy desde el Gobierno para evitar que esto se acabe de hundir es la acertada o no es cuestión de puntos de vista. Unos cuantos millones de españoles (tampoco tantos como en otras ocasiones) votaron al PSOE, que fue el que colaboró activamente en este tremendo desaguisado, mientras que unos cuantos más (más que en otras ocasiones) apostaron por Rajoy. 

Obviamente habrá un nutrido grupo de votantes del PP en las últimas generales que hoy no lo harían… o sí, que diría don Mariano. Lo que está pasando en Chipre, con sus corralitos, sus quitas a los depósitos, su crisis bestial que tiene a la gente metida en sus casas… es un ejemplo de lo que podría haber pasado en este país si nos hubieran intervenido, cosa que mucha gente decía estar deseando. 

Tal vez fuera porque estamos mal acostumbrados, que muchos pensaban que la intervención era recibir unas pocas órdenes desde Bruselas a cambio de una lluvia de millones, como los que nos cayeron para “formación” todos estos años y de los que no se ha sabido gran cosa. Pero no, no es así. La intervención es mala, amigos míos, algo a evitar, y no una especie de maná divino que venga a sacarnos las castañas del fuego a cambio de nada. Si les parece que los ajustes han sido duros, miren a Grecia o Chipre y luego hablamos. 

El otro gran frente abierto que tiene Rajoy es el de Bárcenas y sus chanchullos, que vienen a dar un paso más hacia la desconfianza ciudadana cuando ya parecía que lo del Gürtel estaba más o menos amortizado. Pues no, esto repunta, y la única estrategia acertada creo que es la de Feijóo y Esperanza Aguirre (extraño verlos de la mano en algo): depurar responsabilidades, cesar a los que hayan metido mano a la caja de forma irregular, y pedir disculpas a los españoles por hacernos pasar esta vergüenza tanto a los que son afiliados al PP como los que no. 

Yo, personalmente, me pongo colorado de sólo pensarlo porque es un tema que da auténtico asco. No me vale el “y tú más”, que cada vez se pone más complicado al escalar los escándalos de magnitud, o el “y tú también”, que es a lo que vamos. Los EREs de Andalucía no anulan lo de Bárcenas, por mucho que se intente, y a lo máximo que vamos a llegar así es a reafirmar ese “todos son iguales” que tanto éxito de público y crítica tiene en nuestros mejores teatros. 

Me deja perplejo el caradurismo de algún dirigente del PP que dice que Griñán estaba al tanto de lo de los EREs sin la más mínima prueba en favor de tal afirmación. Haciendo un ejercicio de lógica aristotélica, entonces Rajoy estaría al tanto de los sobres de Bárcenas, de la trama Gürtel y de un concejal de Rabanillos de la Higuera (espero que no exista el pueblo, que me meto en un lío) que aparcaba en una plaza de minusválido (perdón, discapacitado). 

No se puede exigir control absoluto de una organización por parte de su dirigente, porque hay sinvergüenzas que lo primero que hacen es esconder sus actividades de quienes les pueden echar a la calle, y lo de “es que usted lo fichó” haría que el presidente del grupo Carrefour se fuera a la trena cada vez que en un cajero de su cadena nos diera mal el cambio. Hay que ser un poquito más proporcionales. 

Parece que no aprendemos. Pepe Blanco dio la pista de lo que te puede pasar cuando pones en marcha un ventilador lleno de porquería sin calcular que a lo mejor te pone perdido el traje de Armani. Seguimos igual, sólo que ahora del lado de estribor.