jueves, 10 de octubre de 2019

El Mercedes amarillo

Los últimos tiempos del edificio no fueron los mejores
Aunque siempre hablo de cosas de Lugo o que afecten a nuestra ciudad, hoy voy a hacer una excepción porque el tema no nos toca ni de refilón. Les voy a hablar de un Mercedes que había en la entrada de La Coruña.

Los que ya vamos teniendo una edad recordamos un edificio muy llamativo que había a la entrada de la ciudad, aproximadamente donde hoy está una cadena de grandes jugueterías, llegando a Coruña la izquierda. Era Automóviles Louzao, concesionario de Mercedes-Benz, y si por algo nos atraía la mirada era por su caprichosa construcción con una jaula acristalada muy elevada en la que siempre había un antiguo Mercedes, que mi memoria recuerda negro cuando era pequeño, y que sustituyeron después por uno más “moderno” de color amarillo.

Navegando por uno de los muchos grupos de Facebook que se dedican a recuperar retazos del pasado (les recomiendo uno que se llama “amigos del óxido, lo abandonado y lo retro” que nos ofrece muy habitualmente estampas muy curiosas), alguien colgó unas fotos de la destrucción de aquel edificio y de cómo una grúa despedazó el Mercedes que había en aquella especie de pecera gigante. Aunque les parezca una tontería, me entristeció verlas.

Cuando uno recuerda con claridad cosas que eran nuevas y que hoy son consideradas “antiguallas”, va asumiendo que ya tiene una edad y se vuelve nostálgico. Quizás ese sentimiento es el que hace que tenga tanto éxito todo lo relacionado con los años 80, porque los que vivimos esa época siendo niños o adolescentes la recordamos con cariño e intentamos, en la medida de lo posible, revivirla… y ya estamos en une etapa de la vida en que podemos pagar entradas a conciertos de viejas glorias o buscar en Ebay discos de vinilo de Cindy Lauper sin asustarnos de pagar por ellos 15 o 20 euros.

El Mercedes que había a la entrada de Coruña era, para un niño como era yo cuando lo vi por primera vez, un prodigio de estética. Allí suspendido, contra toda lógica, subido no sabías cómo (aunque destrás hay unas más que evidentes puertas de ascensor) y expuesto para mayor gloria de una marca prestigiosa… Tenía todos los elementos para captar nuestra atención y lo hacía.

No comparto que cualquier tiempo pasado sea mejor, pero sí que hemos dejado por el camino muchas cosas en esta supuesta evolución en que estamos metidos como si lo importante fuera crecer indefinidamente. Entre ellas un Mercedes amarillo.



miércoles, 9 de octubre de 2019

Villalba da ejemplo y reduce la propaganda electoral

Cartelones electorales en Lugo en pasadas elecciones. Foto: Diario de Pontevedra
Villalba ha acertado, y todos los demás ayuntamientos deberían seguir su ejemplo: han reducido a cuatro localizaciones puntuales los lugares permitidos para poner propaganda electoral. Falta por ver si mantendrán esa política a lo largo del tiempo, en las próximas elecciones autonómicas y, sobre todo, en las locales que es donde los que dictan la norma se juegan la permanencia en el cargo, o si solo es una señal de haber recibido el hartazgo que tiene la población para estas elecciones… pero al menos es un comienzo.

El disparate propagandístico electoral que vivimos cada poco tiempo no es sostenible ni económica, ni ecológica, ni socialmente. Gastarse millones y millones de euros de dinero público en campañas electorales, en que además quienes más cuartos tienen son los que paradógicamente más reciben (no es que se ayude a las listas con menos posibilidades, que sería más comprensible para equilibrar la balanza), no tiene demasiado sentido hoy día, en que hay formas más limpias de hacer llegar los “mensajes”.

El Gobierno de España tiene un Ministerio de transición ecológica que solo ha servido para aplaudir con las orejas mientras se proyecta el cierre de la central térmica de As Pontes al tiempo que compramos energía a Marruecos (como si el aire que contaminan sus centrales térmicas no lo respirásemos aquí) y para crear confusión con el futuro de los coches diésel que, como todo el mundo sabe, son los transportes que usan los ricos. Pero no ha movido un dedo para reducir la ingente cantidad de papel y cartelería plástica que se usa campaña tras campaña. Vamos, que no contaminen los demás, dice el señor que viaja en avión de Madrid a Valladolid, pero los míos pueden porque somos tan importantes que estamos por encima del sostenimiento del planeta.

Lo de dar ejemplo solo va con algunos políticos. Pocos la verdad. Incluso a veces parece que hacen el ganso y les voy a contar el caso de un amigo mío diputado nacional (no daré nombres pero tampoco creo que sea tan difícil adivinar de quién les hablo) que se empeñó en viajar en clase turista a pesar de que el Congreso le ofrecía ir en primera. De hecho le explicaron que incluso podría salir unos euros más caro el billete en turista porque los convenios que tienen con las compañías eran para las más altas categorías y su respuesta fue ejemplar y aleccionadora: “pues que cambien el convenio”, porque entendía que era poco apropiado dar el mensaje de que Sus señorías necesitan manicura (es un decir) en la hora escasa de vuelo que tienen desde Madrid a casi cualquier punto de España. Coherencia ejemplar en mi opinión.

Pero volviendo al inicio del artículo, Villalba ha marcado un hito en el tema de las campañas electorales. Evitarán el bombardeo constante y agresivo de la publicidad no domesticada que se adueña de nuestras calles en toda contienda política. Mientras las empresas recibirían duras sanciones si se les ocurriera la idea de poner banderolas en cuanta avenida hay, tenemos que ver las cabezas colgantes de los líderes de turno para convencernos de que su detergente lava más blanco, pero no en Villalba.

Envidio a sus vecinos, que solo tendrán que sufrir la propaganda que elijan si ven la tele (supongo que las suscripciones a Netflix aumentarán en estos días).

martes, 8 de octubre de 2019

PEPRI a la carta

Los extravagantes giros del PEPRI que dejan fuera de la zona afectada a edificios públicos.
Una forma de no tener que cumplir lo que los demás sí tienen que cumplir.
Que la administración hace lo que le viene en gana, pisando con fuerza donde los pobres mortales no tenemos oportunidad de asomarnos es algo que es sabido por todos, pero cuando anuncian con neones y lucecitas de colores su desprecio por las normas, con esa osada indiferencia que tienen por las ordenanzas y las leyes que ellos mismos dictan y promueven, resulta aún más insultante.

En este blog hemos visto innumerables ejemplos, desde la puerta de madera del Ayuntamiento, que prohíbe explícitamente “la madera en su color” en el PEPRI hasta las violaciones reiteradas a esa misma norma en todos los centros públicos.

Pero a veces la norma no se incumple, simplemente se “soslaya”. Fíjense que los planos del PEPRI se hacen unos curiosos quiebros para dejar fuera de la zona afectada a los edificios del Ayuntamiento (el del Seminario) y la Xunta, lo que hace que no se incumpla la norma metiendo el pivote electrónico que acaban de instalar en el jardín de la sede autonómica y que no sería posible en zona PEPRI.

¿Por qué la línea hace esos antinaturales giros? ¿A qué responde que se dejen fuera del ámbito de protección edificios históricos, uno de ellos ya desaparecido (el convento donde ahora se ubica la Xunta)?

Las normas son iguales para todos, nos cuentan, pero no estoy muy seguro de que se nos hagan a todos los dibujos en los planos a la carta.

El pivote "legal" por los pelos...

lunes, 7 de octubre de 2019

Álbum de Saal - Una sincera opinión



No me gusta demasiado la idea de meter publicidad en el blog, y me niego a ser de esos que va por ahí en plan "si me invitas a algo te hago un artículo favorable". A pesar de ello, hace unos meses vi una oferta de un álbum digital que te hacía un descuento si te comprometías a hacer una crítica del producto en redes sociales. Me pareció muy honrado (porque no te exigían que fuera favorable, solo tu opinión) así que acepté y como soy de enrollarme, aquí les cuento lo que me pareció.

El álbum es de la web www.saal-digital.es, una empresa de productos fotográficos de calidad. Tanto te hacen una taza como un cuadro para la pared. Vamos por partes:

El diseño:

En la fase de diseño del álbum se utiliza el programa Saal Design. Es una aplicación que te descargas en el ordenador y que además de completa tiene detalles muy positivos, como por ejemplo que en función del tipo de producto que seleccionas y la mensajería te indica un plazo de entrega, lo que es muy útil para saber si se ajusta a una fecha (un cumpleaños, un aniversario…).


1.- Selección del producto:

En mi caso elegí un álbum fotográfico. Te da muchas opciones de acabados, y puedes elegir tipos de tapa (brillante, lino, simil piel, tipo madera…), si las quieres acolchadas o no, si lo quieres con una caja de regalo… Según vas seleccionando las opciones te va diciendo el coste, lo que también es muy útil para hacerte una idea del resultado.

Pantalla de selección de producto
Opciones de álbum, calidades, encuadernación genérica...

Elección de tamaño del álbum
Detalles finales como tipo de cubierta, caja de regalo, acolchado...


2.- Maquetación inicial:

Una vez seleccionas el tipo de álbum te deja colocar las fotos y elementos a tu aire, utilizar una maquetación automática o incluso la opción “en un minuto” con el que solo subes las fotos y la aplicación las coloca sola. Yo es la opción que elegí.




El siguiente paso es seleccionar un estilo para el álbum. Ahí creo que hay un pequeño fallo porque todos los estilos son demasiado parecidos. Imagino que irán añadiendo opciones con el tiempo pero todos son bastante neutros, cambiando únicamente algunos pequeños adornos y con colores suaves.

Los estilos creo que es uno de los puntos débiles de este tema ya que son todos bastante similares. Solo cambian los detalles.

Ahora toca seleccionar y subir las fotos que quieres incluir en el álbum. Aunque después puedes añadir o quitar las que quieras es recomendable pensarlo antes con cierta calma y meter en una carpeta las que desees, para que sea más cómoda la selección. En función de cuántas fotos metas te sugieren un número de páginas (lo que influye en el precio, claro) aunque puedes cambiarlo tú. Obviamente si quieres más fotos en menos páginas serán más pequeñas y viceversa. Aunque te da tres opciones principales también hay un desplegable con muchas más así que da mucha libertad de elección.


3.- Maquetación de detalle:

Una vez has hecho todo lo anterior se abre un editor que te permite cambiar todo lo anterior: colores, ubicación de elementos, introducir textos, cambiar orden de fotos… en base al diseño elegido que puedes alterar cuanto quieras.

Curiosamente la aplicación te obliga a revisar todas las páginas. Está muy bien porque te obliga a vencer la pereza de “darlo todo por hecho”, y tienes que ir marcando una por una que estás conforme. Puede parecer tedioso pero recuerda que solo lo haces una vez y el álbum te queda siempre.

Cuando esté a tu gusto (esto es lo que más tarda si te lo tomas con cierta tranquilidad, lo que es más que recomendable porque es lo que más va a influir en el resultado final) puedes añadir el artículo al carrito de compras. Ahí terminas de elegir ciertas cosas como el tipo de portada (mate o brillo) y ver los costes finales.

La aplicación de maquetación de detalle es completa y fácil de usar.

El envío:

Se envió a través de MRW con lo que el seguimiento fue puntual y completo. Lo pedí un 14 de agosto y me llegó en poco más de dos semanas. Teniendo en cuenta los plazos del verano, y que yo mismo tardé un poco más de lo previsto en recoger el pedido, es más que adecuado.

El resultado:

Los materiales me han parecido de gran calidad. Las tapas muy rígidas y las páginas de excepcional resistencia.

Lo único que no me ha convencido es que las fotos salen algo oscuras. Probablemente sea porque lo comparo con el brillo de la pantalla (pasa muchas veces cuando imprimes cualquier documento) pero quizá sería bueno incluir una advertencia o equilibrar la impresión para compensar esa diferencia.

Pero en general, salvo ese tema (que se puede corregir en el ordenador) es un gran álbum. Estoy muy satisfecho.

Resumen:
  • En contra: los limitados estilos del álbum y que las fotos salen más oscuras de lo esperado.
  • A favor: la aplicación es cómoda e intuitiva, permite muchas opciones pero no es necesario usarlas todas así que puedes hacer lo que te convenga, y los materiales son de extraordinaria calidad.
Muy recomendable.

viernes, 4 de octubre de 2019

El ''Milagro'' de San Vicente, medio siglo de Historia de Lugo

La primera edición del ''Milagro'' de San Vicente en San Froilán de 1969.
Foto del Archivo Histórico Provincial de Lugo
Hoy se cumplen 50 años de una preciosa tradición, la de una fuente que echa vino por sus tres caños, tres figuras barrocas del siglo XVIII que han visto de todo en esta ciudad durante los últimos siglos. Por eso Lugo Monumental ha hecho el esfuerzo de repetir este acto que normalmente tiene lugar el 29 de Julio por Santa Marta, patrona de la hostelería.

La cultura del vino tiene mucho de nuestra esencia, de nuestra cultura y nuestra historia, de compartir mesa y mantel, del esfuerzo para recolectar la uva y transformarla en ese manjar de dioses que se llegaba a enviar a la mismísima Roma desde aquí, cuando los medios eran caballos y carros de bueyes, si bien hay que reconocer que comparando épocas las vías romanas superaban con mucho a nuestro actual ferrocarril.

En las fiestas de San Froilán de 1969, gracias a la iniciativa de Don Ezequiel García Rodríguez, recaudador de impuestos, por primera vez la fuente de San Vicente obró el “milagro”, que siempre entrecomillamos para no ofender a nadie porque no pretendemos ser otra cosa que emplear una irreverencia inocente para ilustrar la fiesta. Nada más.

Lugo tiene en su peculiar “milagro” una fuente inagotable de sorpresas para los que nos visitan, que abren los ojos como platos y sacan fotos para subir a redes sociales, en la versión actual del boca-oreja. De ahí que te encuentres fotos de nuestra querida fuente etiquetadas en chino o en alemán.

Hoy cuatro de octubre a las nueve de la tarde tenemos una cita con medio siglo de peculiar tradición, enmarcada en las fiestas de pueblo más grandes del mundo y rendimos homenaje a una pequeña historia que forma parte de otra más grande: la Historia de Lugo.



Una fuente que echa vino... ¡¡¡milagro!!! ¡¡¡milagro!!!
Artículo publicado en La Voz de Galicia del 4 de octubre de 2019

jueves, 3 de octubre de 2019

Lugo, Patrimonio de la Humanidad

Maqueta del casco histórico. El original está algo menos cuidado. 
La campaña para lograr que el casco histórico de Lugo se convierta en el cuarto Patrimonio de la Humanidad de nuestra ciudad acaba de subir de nivel.

Ya había mucho camino andado con iniciativas de gran valor ciudadanas, como la exitosa campaña del guía turístico Guido Álvarez (quien logró que el hastag - o como se diga - #LugoPatrimonioMundial sea un éxito nacional) y políticas, como la propuesta de 2017 de Santiago Fernández Rocha (entonces portavoz de Lugonovo), quien llevó al pleno municipal una declaración para iniciar el expediente.

Pero que un medio de comunicación como El Progreso se implique en organizar una recogida de firmas no deja de ser un salto, el pistoletazo de salida de una campaña en que se mojen las mismas administraciones públicas que ignoraron en su día el acuerdo plenario y la campaña social.

Seamos positivos. En el acto organizado por el diario lucense, con el patrocinio del Ayuntamiento de Lugo, la Diputación Provincial y Monbus se recogieron las primeras firmas para intentar que la queridísima fuente de San Vicente, el Palacio de Doña Urraca, la casa de los Montenegro, el magnífico palacio barroco que alberga a la Corporación Municipal, O Cantiño, el Cuartel de San Fernando y todo el restante y rico patrimonio de nuestro casco histórico entre en el listado de los lugares más emblemáticos del mundo. Verán que cito lo bueno del recinto amurallado y lo que, siéndolo, necesita urgentes actuaciones si queremos optar realmente al título.

Hay algo llamativo e interesante. Si bien se reservó la primera página para las firmas protocolarias de las autoridades e invitados, ya había varias hojas con rúbricas de la gente que, incluso antes del inicio del acto, quiso apoyar esta causa porque vio el contenido y le gustó. Es un gran comienzo.

Solo nos queda sacudirnos de encima esa costumbre que tenemos de despreciar lo nuestro, de considerar que “no somos suficiente”, de pensar mal. Por supuesto que hay muchas cosas que pulir y mejorar (también las había en la Muralla y se mejoró desde su declaración) y algunas que se han perdido para siempre, pero la esencia sigue ahí.

Lugo es una gran ciudad que merece, sin duda alguna, ser Patrimonio de la Humanidad. Todos juntos, como hicimos en la ocasión anterior, lo podremos conseguir. Incluso diría que si para lograrlo hay que dividirnos en buenos y malos quizá sea mejor dejarlo correr.

Espero que no sea así, que se trabaje, juntos, y sin dejar a nadie tirado por el camino buscando una medalla a codazos. Ojalá podamos decir algún día que lo conseguimos "entre todos".

miércoles, 2 de octubre de 2019

Conclusión final: ¿A qué esperan? (magníficas propuestas que cuestan cuatro perras)

La parcela a vista de pájaro (gracias a Google Maps) que podría ser de uso público y está cerrada a cal y canto.
Las flechas señalan por dónde habría accesos (aunque la casa de la derecha parece que no da al jardín, sí lo hace, es que tiene una segunda construcción en la parte trasera).


Termino esta pequeña serie de artículos en que resumo las jornadas del Colegio de Arquitectos del pasado sábado con la intervención del arquitecto José Angel Carreira Montes, quien propuso algo tan bonito y tan sencillo (habitualmente esos conceptos suelen ir ligados) que no me cabe en la cabeza que no esté en marcha ese proyecto.

Propuso actuaciones de detalle que realmente serían magníficas para la zona. Algunas ya están sobre la mesa desde hace tiempo pero otras no. Por ejemplo, la idea de abrir al público el patio de manzana que está entre la Ruanova y la Tinería me pareció maravillosa. Es una zona ajardinada, que se rehabilitó en su momento cuando se recuperaron las casas de esa parte, pero que ahora vuelve a estar bastante abandonada porque es un “sí pero no”, un conjunto de traseras y de fincas que son de varios propietarios, pero en muchos casos son públicas.

La propuesta de Carreira no puede ser más sencilla: abrir paso al público en un horario determinado para que esa zona sea un jardín interior. El acceso desde Rúanova sería a través de la galería que hay en esa calle (en ese edificio de hormigón que rompe la estética de la zona pero que gracias a esto podría tener una función), ya que solo habría que abrir un hueco en la pared del fondo. La entrada desde la calle Tinería se facilitaría desde la Oficina de Turismo de la Xunta o incluso, añadiría yo, desde uno de los locales que por ahora nadie ha cogido en alquiler porque es muy compleja su puesta en funcionamiento.

A través de esta galería se podría acceder a la nueva plaza interior.
Con esto lograríamos una nueva placita más que digna, de un tamaño muy adecuado, y que podría ser un remanso de paz en una zona bastante movidita. Como el acceo es a través de inmuebles se le pondría un horario y listo.

Ni siquiera sería una operación muy costosa, ya que estamos hablando más de meter una desbrozadora y de un tema de jardines que de obra civil. Como mucho presenta cierta complejidad el espantoso muro de hormigón que tiene el edificio de Ruanova, pero eso se podría solventar con una mano de pintura, que si no fuera por el PEPRI incluso se podría enfocar como un trampantojo, un dibujo que haga la ilusión de que ese muro no es tal sino un paisaje o algo interesante. Lamentablemente la más que rígida normativa del casco histórico impide tal actuación, ya que en su artículo 110 limita los colores a emplear en fachadas, y aunque el propio ayuntamiento se ha saltado esa normativa a la torera en diversas ocasiones no seré yo quien proponga que lo haga.

Ese tipo de acciones de tamaño medio/bajo se podría llevar también a otras ubicaciones. Por ejemplo, resolvería la terrible estética que sufrimos desde la Muralla en parcelas como la que está entre la Tinería y el aparcamiento de Ollos Grandes o en la trasera del llamado Palacio de Doña Urraca, dos “excavaciones” que el día menos pensado empiezan a dar castañas y nueces del tiempo que lleva la vegetación campando a sus anchas.

Mientras no tomen una decisión sobre esos lugares, y dado que la “provisionalidad” lleva ya unos cuantos lustros, no creo que fuera tan terrible gastarse unos euros en hacer que esos sitios se conviertan en zonas aprovechables con un jardín, unos bancos y un par de farolas. Ya si meten unos columpios ni les cuento.

Todo esto son cuestiones sencillas, asumibles, asequibles, baratas y más que razonables. Darían vida, restarían imágenes negativas y convertirían ruinas y puntos degradados en el centro de la zona.

Solo tengo una pregunta… ¿a qué esperan?

Permitan que termine estos artículos agradeciendo al Colegio de Arquitectos su invitación. Ha sido un honor y un placer dar nuestro punto de vista y poder debatir con gente de tan alto nivel, preparación y experiencia y espero que nuestra colaboración futura sea fluida.