Hay que felicitar al gobierno bipartito de la Diputación. Han aprobado, contra todo pronóstico, los presupuestos del ente provincial y han logrado meter un gol por la escuadra a toda la oposición, que no solo tiene más votos que ellos, sino que encima se ha tenido que comer el sombrero después de decir que los presupuestos eran inasumibles.
Lo preocupante del tema no es que se aprueben unos presupuestos, que no tiene por qué ser algo malo necesariamente, sino el método elegido por el PP para hacerse el sueco: levantarse y marcharse del Pleno, dejando a Manuel Martínez solo ante el peligro.
Al final va a resultar que la oposición en la Diputación es únicamente Martínez y que el resto están encantados de haberse conocido unos a otros, con la peculiaridad de que se ven tan listos que intentan colarnos un desencuentro donde el sentido común más elemental dice que hay un pacto más o menos oculto.
Por si viven en una cueva les explico cómo fue la cosa: en el debate del Pleno el Presidente, Darío Campos, se negó a debatir una veintena de enmiendas a los presupuestos elevadas tanto por PP como por Martínez. Tengo que decir que me sorprende enormemente la legalidad de no querer debatir unas enmiendas, y que no sé hasta qué punto no habrán metido la pata dictando una resolución arbitraria a sabiendas de su injusticia (definición del delito de prevaricación).
En la Diputación llueve sobre mojado |
Al final va a resultar que la oposición en la Diputación es únicamente Martínez y que el resto están encantados de haberse conocido unos a otros, con la peculiaridad de que se ven tan listos que intentan colarnos un desencuentro donde el sentido común más elemental dice que hay un pacto más o menos oculto.
Por si viven en una cueva les explico cómo fue la cosa: en el debate del Pleno el Presidente, Darío Campos, se negó a debatir una veintena de enmiendas a los presupuestos elevadas tanto por PP como por Martínez. Tengo que decir que me sorprende enormemente la legalidad de no querer debatir unas enmiendas, y que no sé hasta qué punto no habrán metido la pata dictando una resolución arbitraria a sabiendas de su injusticia (definición del delito de prevaricación).
De lo que no tengo duda alguna es de la inmoralidad del hecho. Eso de decir que no se quiere hablar de algo “porque no me apetece” no es lo que se viene considerando democrático en los círculos civilizados. Lo suyo es enfrentarse a la dura realidad y tragarse el sapo de tener que aceptar algunas de las enmiendas porque para eso los votos han dado las mayorías que han dado y los partidos han elegido a los representantes que han elegido, incluido Martínez.
La "espantá". Foto de La Voz de Galicia |
Para mayor fantasía, hoy nos sorprenden con dos páginas en El Progreso y otra en La Voz de Galicia en la que nos cuentan que “Gracias al PP” se han desbloqueado los presupuestos de la Diputación, lo que hace pensar que la maniobra no solo no fue accidental sino que presumen de ella. Craso error si uno sabe de lo que habla.
Si el PP quería “desbloquear” los presupuestos tenía dos opciones muy lícitas: votar a favor o abstenerse. Luego podría explicar que es mejor un mal presupuesto que ninguno, que se recogen algunas de las partidas que la propia Candia dejó comprometidas en su breve etapa de Presidenta, o que los alcaldes del PP de lugares pequeños (los que necesitan a la Diputación como agua de mayo) presionaron para que se dejara aprobar las cuentas. Todo eso son argumentos lícitos y razonables que serían comprensibles, pero levantarse y marcharse, haciéndose los ofendidos, cuando lo que se pretende es buscar una aprobación por la puerta trasera de los presupuestos es hacer el indio.
Se ve que no confían en que el votante medio del PP sea lo bastante espabilado como para entender motivos generosos para aprobar un presupuesto, así que optaron por ese circo, por una pantomima calculada al detalle, que se confirma con los anuncios de prensa e hoy.
Por cierto, imagino que tras las recientes y firmes promesas de participación y transparencia dentro del PP de Lugo esta maniobra habrá sido sometida a los cauces apropiados y consultada, al menos, con los miembros de la ejecutiva provincial o similar. De lo contrario nos encontraríamos con que al primer desafío a esa “participación” se ha optado por la decisión unilateral de la cabeza del chiringuito. Más de lo mismo.
Chapeaux!!
ResponderEliminarartículo brillante, luis,
ResponderEliminarun gran articulo Luis,los chicos0as del pp tienen que hacérselo mirar y creo que pensar primero las cosas antes de hacerlas,pero últimamente creo que es pedirles demasiado.
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