Hay cosas aún peores que el adoquín

Quizá la foto de día sería más oportuna, pero me ha quedado tan bonita que he puesto esta del carril de las "Estantigas"

Saben ustedes que suelo ser crítico con el Ayuntamiento y las demás administraciones, pero hoy voy a romper una lanza en favor de una acción llena de sentido común que la entidad encabezada por Lara Méndez ha llevado a cabo: instalar adoquinado en el Carril dos Fornos.

¿Pero en qué quedamos?, dirá algún lector que recuerda claramente que he criticado duramente este tipo de suelos, ¿el adoquín es bueno o malo? Como casi todo en esta vida no hay blancos ni negros, sino escalas de gris. Verán, el adoquinado me parece un coñazo: es incómodo para las personas que caminan (da igual tacón que otro tipo de zapato, es un rollo) y no les digo nada de la gente que va en silla de ruedas, porque para ellos es una tortura china.

Sin embargo hay cosas peores. Por ejemplo el barrizal que había en el callejón dos Fornos y que sigue habiendo en una parte del mismo, o en otras calles supuestamente menores del casco histórico pero con gran encanto como el carril de las Estantigas, por donde para cruzar tienes que ir pisando las piedras que algún usuario bienintencionado ha ido colocando como islas en medio de las procelosas aguas (y lo que no son aguas).

Es decir, que lo ideal no es el adoquín, claro que no, pero me parece inteligente reciclar los que se han retirado de la Ronda de la Muralla para utilizarlos en calles donde la inexistencia de presupuesto no permite meter nuevos solados de otro tipo.

El nuevo adoquinado de Fornos (sí, es nuevo aunque no lo parezca) no tiene paso accesible para sillas de ruedas.

La única crítica que les haría, que si no no sería yo mismo, es que se han saltado sus propias teorías sobre los recorridos accesibles en la Tinería, y se ve que las personas con discapacidad no pueden pasar por allí cómodamente o hacer turismo. Si en la parte central de las calles que están adoquinando hubieran metido una hilera de planchas de otro tipo de suelo, más liso, no habría crítica que hacer. Bueno, sí, otra, quizá yo seguiría la calle hasta el final, porque es un poco extraño ese cambio de "barrizal a adoquín" en una línea trazada de forma aparentemente arbitraria.

Ahí lo dejo como sugerencia para el futuro.