jueves, 2 de mayo de 2024

Ahora toca irse de vinos a la fábrica de la luz

A la izquierda la inauguración de la rehabilitación de la fábrica de la luz acometida en 1998. El Ayuntamiento la volvió a abandonar después, haciendo una segunda rehabilitación diez años más tarde... y volviendo a abandonarla. Ahora van a gastarse otra fortuna en un tercer arreglo...

Está claro que en Lugo no aprendemos de los errores y no hay nada que hacer.

Resulta que ahora se van a gastar un montón de dinero (no queda muy claro en la información dada si hablamos de 600.000 euros o de dos millones, que ya es dinero) en convertir la vieja fábrica de la luz en un centro "enogastronómico" que se supone que va a dedicarse a hablar de la gastronomía y el vino... donde Cristo perdió la sandalia.

De hacer otro museo de esas características, si es que es necesario (cosa que dudo mucho), hay muchos sitios donde hacerlo sin meterse a gastar otra millonada en estropear el uso obvio de ese edificio. Por ejemplo se me ocurre que el sitio perfecto podría ser el llamado Pazo de Doña Urraca en la Tinería, o en cualquier otro inmueble situado en el casco urbano. Si hablamos de turismo, parece que es lógico situarlo hacia el centro, como ha demostrado la mala experiencia del MIHL, un fracaso más que anunciado por el sentido común.

Pero la lección que ya deberíamos haber aprendido está ahí, y sigue sin ser interiorizada por nuestras bienamadas autoridades. La fábrica de la luz es un edificio cuya historia ya he recogido en algunas ocasiones en este blog pero que no está de más recordar nuevamente:

  • Fue diseñado por el gran Eloy Maquieira.

  • En 1998 el entonces alcalde, Joaquín García Díez, logró una escuela taller financiada por la Xunta en la que se rehabilitó el edificio entero y una de las dos turbinas de principios del siglo XX. La intención del exalcalde era producir energía y, además, crear un centro de interpretación del Río Miño en una reforma que fue respetuosa con ese magnífico edificio.

  • En 1999, tras no presentarse Joaquín a la reelección, se produce un cambio de gobierno y el PSOE del Alcalde Orozco mete el proyecto en un cajón, como tantos otros entre los que destaca la construcción de un auditorio en San Fernando. 25 años después seguimos esperando por un futuro claro para ambos edificios, que por ahora sólo son objeto de maquetas y anuncios de prensa desde hace lustros.

  • Tras dejar el edificio abandonado se acordaron de él y acometieron obras de mejora a cargo de las arcas municipales (millón y pico de euros si mal no recuerdo)... y una vez hechas esas reparaciones lo volvieron a cerrar a cal y canto, con lo que se volvió a deteriorar.

  • En 2008 el Gobierno de López Orozco, y tras esas obras de mejora, adjudica el edificio a la empresa INCA por una renta de 445 euros mensuales, para un edificio de 1.264 metros cuadrados según el Catastro… a 35 céntimos el metro. En 2016 el juzgado paraliza las obras de reforma, lo que en la práctica supuso un nuevo abandono del edificio hasta el día de hoy.

  • En febrero de 2021 el TSXG publicó la sentencia que condenaba al Ayuntamiento a pagar 2,4 millones de euros a la empresa INCA, a la que había adjudicado el edificio en 2008. El concejal de Medio Ambiente fue señalado por el juzgado como responsable por haber dejado pasar, de forma deliberada, el plazo de renovación de la concesión de la Confederación, a pesar de ser reiteradamente advertido por la empresa adjudicataria. Se archivó la causa penal.

  • En 2022 el Ayuntamiento presenta el enésimo proyecto para ese inmueble, un centro de “enogastronomía”. El Gobierno anunció que activaría un proceso de participación ciudadana para recoger sugerencias, mediante un cuestionario en su web, que no sé ustedes pero yo no he visto en ninguna parte, quizá porque se podría saturar de respuestas del estilo "¿estáis de coña?".

  • Ahora, en 2024, se firma el convenio entre Ayuntamiento y la Confederación par seguir adelante con ese "proyecto", por no decir ocurrencia.

Lo más trágicamente divertido de todo es que nos hablan de "sostenibilidad" y "ecología", pero no sé si saben que el Ayuntamiento perdió la licencia para generar electricidad (que podría valer, por ejemplo, para mantener las absurdas y mal llamadas "Caldas") y que para mayor fantasía encargó una turbina que costó una fortuna y que hasta donde yo sé sigue pudriéndose en un almacén (que pagamos religiosamente todos los meses) generando gastos y más gastos totalmente demenciales.

La vieja Fábrica de la Luz debería fabricar luz, y ese uso sería compatible con el de ser la sede de las instalaciones de la tan necesaria playa fluvial de la ciudad, que sigue sin acometerse y que hace que esto sea sumamente ridículo.

Irse de vinos al quinto pino no es la solución de la fábrica de la luz, sino un parche multimillonario y bastante surrealista. Siempre que veo estas cosas me pregunto en qué está pensando la Unión Europea financiando estas chorradas.

2 comentarios:

  1. Estimado Luís,

    Concordo en que, de ser necesario facer ese centro enogastronómico con cartos públicos, un bo sitio sería o Pazo de Dona Urraca; e que a "fábrica da luz" debería "facer" luz. Que digo eu que tampouco debería custarnos tanto retomar ese proxecto coma fecer un novo.

    Pero no seu artigo hai un erro, xa que Maquieira (que naceu en 1901) non puido facer un edificio en 1894. O que sucedeu no 1894 foi a chegada da electricidade a Lugo, pero Maquieira traballou en lugo nos anos 20 e 30 do século pasado.

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    1. Corregido. Mezclé las ideas (eso pasa por escribir de memoria).

      Gracias por el apunte.

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